16|| Fácil.

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Amo mis entrenamientos

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Amo mis entrenamientos. Soy una niña amante del deporte, adoro sentir el ardor en mis pulmones y en mis articulaciones con cada ejercicio, la liberación que siente mi cuerpo al terminar agotada. Justamente por esto terminé como animadora, adoré cada maldito día que pasé haciendo esto, sin embargo al ver el rostro de Candy arruino mi día.

—Deben detenerse porque esto es incómodo, Hay—murmura Ari rodando los ojos.

—Yo no comencé nada, simplemente dije lo que pensaba y terminó por mentir que durmieron en mi cama—comento, recordando sus palabras haciendo arder mi pecho de la ira. — ¿Tú que habrías hecho en mi lugar?

—La hubiera ahorcado con mis propias manos—el comentario de Juls me obliga a mirarla. —¿Qué? Tú preguntaste.

—La violencia no es la solución, chicas—Ariana es la típica reina de la paz y la armonía, para ella no existen los conflictos sino los malos entendidos que se pueden resolver con una simple charla de amigas. Lleva días completos tratando de convencerme de hacer las pases con Candy pero el que se haya ido a vivir en el apartamento de Brendan y que mienta acerca de ser novios, me tiene cansada. No seré su amiga, no seré ni siquiera una conocida para esa chica porque no es más que una falsa. —Está arrepentida, me lo dijo.

—Arrepentida, sí claro, tú eres la única persona que podría creerse eso—murmuro. Observo la hora en mi reloj y mis compañeras comienzan a rodearme. Soy la capitana de las animadoras este año, me costó demasiado trabajo llegar a ser lo que soy y me fascina. — ¡Muy bien, chicas! El partido de este fin de semana es importante. Debemos ganar para entrar en la clasificatoria así que hay que hacer nuestro mayor esfuerzo. Estoy pensando en un acto doble con música en vivo que...

—¿Tú vas a cantar? ¡Qué sorpresa!—todas las miradas se concentran en la persona que hizo ese comentario cargado de sarcasmo. A todas les sorprende, excepto a mí, pues supe al instante que se trata de Candy. —¿Por qué siempre cantas tú? Somos un equipo de más de veinte personas, y tú siempre estás delante.

—Es la mejor, por eso es la capitana—le recuerda Lindsay con el ceño fruncido.

—¿No existe nadie más que pueda cantar? Porque yo lo hago muy bien, y jamás me preguntaron si podría hacerlo—la indignación de mis compañeras termina por alterarlas a todas. Básicamente, es el equipo contra Candy, así que elevo las manos y luego soplo el silbato para captar su atención.

—¿Quieres cantar? ¿Crees que puedes? —inquiero obteniendo un asentimiento de cabeza de su parte.—Perfecto entonces. ¡Conecten los micrófonos que haremos una prueba de sonido!

Existen guerras que no se declaran de frente y en voz alta, y ésta es una de ellas.

No sé cuál es su problema, no sé siquiera porqué pretende enfadarse conmigo cuando en realidad yo debería ser la más enfadada aquí porque me ha utilizado desde que nos conocimos, escaló en nuestra sociedad gracias a mis influencias y ahora pretende que al separarnos, continuará con los mismos privilegios solo por chupar una polla de vez en cuando. Es duro, pero es la triste realidad. Su triste realidad, porque teniéndola o no en mi vida, yo continuaré en lo más alto.

Entre Tus Brazos (AQS #4- libro I y II)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora