Hayden lo tiene todo. Dinero, poder, belleza, talento. Cuatro cualidades que ponen el mundo a temblar cuando de Hayden McMurray se trata.
Acostumbrada a una vida de lujos y riquezas, rodeada siempre de todo lo que ha querido, siendo la más consenti...
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La cabeza me está matando. Siento un palpitar horrible en la frente que me obliga a abrir los ojos. Una habitación blanca, no es mía ni del apartamento de mis hermanas, está rodeándome. No comprendo qué sucede, me cuesta acostumbrar los ojos a la luz pero cuando logro enfocar, veo a Brendan con su móvil en la mano a un lado de la cama.
Trago grueso y llevo mi mano a mi cuero cabelludo donde duele. Tengo un vendaje, seguramente hicieron puntos en la herida.
—Eh, despertaste—dice Brendan al notarme. Guarda su móvil y me sonríe levemente. Puedo ver por sus ojeras que está cansando, no ha dormido y por su ropa noto que tampoco se ha duchado porque tiene sangre seca en la manga de su camisa. —¿Cómo te sientes?
—¿Qué pasó?—pregunto. Siento la garganta seca por lo que agradezco el vaso de agua que me tiende. Lentamente comienzo a recordar que mi propia hermana me golpeó con una caja de madera cuando traté de evitar que saltase por su balcón, y luego a...—¿Heaven está embarazada? ¿Dónde está Hayley?
—Las trajimos al hospital. Hayley tuvo... tuvo una sobredosis. Tus padres están aquí—dice con la mirada baja. —Están con ella ahora. Y sí, Heaven si está embarazada, ese es el otro problema.
—¿Por qué es un problema?—susurro confundida.
—Se niega a decir quién es el padre—responde. La cabeza de da vueltas porque a decir verdad, esperaba cualquier cosa menos ésto. Jamás pensé que mis hermanas estuvieran en tantos problemas. Mamá debe estar enloqueciendo y yo no puedo quedarme ni un segundo más en esta cama. Hago ademán de levantarme, pero él me mantiene en mi lugar.—¿Qué crees que haces? Sufriste un fuerte golpe, Hayden, no vas a ir a ningún lugar.
—Necesito salir de aquí, mis padres deben estar enloquecidos, los conozco ¿De acuerdo? Esto será demasiado para papá y podría decir algo incorrecto o hacer algo... necesito estar con mis hermanas ¿Sí? —sabe que soy cabeza dura, y que es prácticamente imposible que me mantenga aquí contra mi voluntad, así que suspira con fuerza y se levanta para traer mi ropa. —Gracias.
Me pongo de pie y me coloco el abrigo que me tiende. Pienso que puedo hacerlo todo, que puedo con todo lo que debo hacer, sin embargo la cabeza me da vueltas cuando debo ponerme los zapatos.
—Es el último favor—dice Brendan, arrodillándose frente a mí colocando uno a uno los zapatos en mis pies. No puedo evitar sonreír porque gruñe como si me hiciera un favor cuando en realidad, lo hace porque me tiene cariño. —Listo, pastelito.
Tomo aire y camino por el lugar. Salgo al pasillo, guiada por Brendan nos adentramos en el segundo piso donde toda mi familia se acerca a mí para abrazarme apenas me ve. Me sorprende ver a mi tía Venus aquí junto a mi tío Kiran.
—Cariño, ¿Estás bien? —mi tía me toma en sus brazos. Quisiera poder llorar, pero jamás lo haría de frente, así que bajo la mirada y respiro profundo. Esto es llorar por dentro como ganadora.
