Antes de cualquier otra persona, siempre me impuse primero. Cuidar de mí misma, de mi salud tanto física como emocionalmente no me convierte en alguien egoísta, así que no me disculpo ni con mi familia ni amigos por las decisiones que tomé últimamente.
El patinaje lo es todo para mí, siempre deseé vivir de esto a pesar de que ingresé a este mundo algo tarde. Tuve que convencerme que las competencias pequeñas eran lo único que me quedaba hasta que fui convocada para el campeonato.
Es mi gran oportunidad, y no pienso perderla por nada ni nadie, incluyendo a Brendan.
Noté que no era la misma, que mis problemas de celos estaban ganando cualquier batalla no dicha y me estaban quitando la concentración, la mirada de mis metas, así que apagué mi teléfono por las siguientes dos semanas.
No respondí mensajes, ni llamadas, ni visitas. Me alejé de mi familia, de mis estudios, y me concentré puramente en practicar. Día y noche, con fuerza.
Mi entrenador está orgulloso, según él tengo unas buenas posibilidades de ganar el primer lugar o entrar en los cinco primeros puestos pues tengo la cabeza en el campeonato, y solo en eso.
Doy la última vuelta en la pista recibiendo los halagos de mi entrenador. Me muevo hacia la salida donde me entrega un sobre.
—Es tu inscripción y fecha de presentación—dice sonriendo. —Debes estar el 16 de febrero en la pista, y al final darán los resultados.
—Ahí estaré—respondo respondiendo su sonrisa.
Me ducho y cambio en el gimnasio pensando en que hice lo mejor. Después de la pelea con Brendan tuve que verlo unas horas con Candy en mi casa hasta que me marché. Me llamó incontables veces hasta que decidí apagar mi teléfono, y no le abrí la puerta cuando vino aunque agradezco que no haya entrado a la fuerza pues sé que tiene la llave de Candy. Ni siquiera visité a mi familia porque es sabido que tendré que verlo o saber de él así que lo evité lo máximo posible.
Aunque ya no pueda hacerlo más.
—Mamá me envió a saber porqué no respondes las llamadas—la voz de mi hermana llena mis oídos y no me contengo al gritar cuandno veo a Hope de pie, con los brazos cruzados sonriéndome.
—¡Estás aquí!—corro a sus brazos los cuales siempre me reciben de la forma más cariñosa posible. —¿Cuándo llegaste?
—Llegué hoy, pero antes de disfrutar tuve que venir a buscarte—responde algo molesta. —¿Por qué no vas a casa?
—Tengo una competencia en unos días, quería estar lista—me encojo de hombros. —Pero supongo que hoy es inevitable ¿Cierto?
—Debes ir, están esperando tu propuesta para la canción de este año—murmura. —Toma tus cosas y vamos a casa, mamá ya preparó tu vestido para esta noche.
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Entre Tus Brazos (AQS #4- libro I y II)
RomanceHayden lo tiene todo. Dinero, poder, belleza, talento. Cuatro cualidades que ponen el mundo a temblar cuando de Hayden McMurray se trata. Acostumbrada a una vida de lujos y riquezas, rodeada siempre de todo lo que ha querido, siendo la más consenti...