La Cuna del Bosque (COMPLETO) - Libro 3

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Las dos jóvenes se adentraron en el profundo sueño de Brooke, sin saber qué podían encontrar, sin saber dónde irían a parar. Aparecieron en mitad de un bosque, se oía a los pájaros cantar, al viento sacudir los árboles, y a las ramas crujir debido a las caricias de este. Heather ni siquiera comprendía cómo habían llegado a tal lugar, había sido instantáneo. Empezaron a caminar, sin rumbo alguno, apenas había luz, era de día, pero, los árboles obstaculizaban los rayos del sol.

- Este lugar parece de lo más normal... - Mencionó Abi, mirando a su alrededor.

- No bajemos la guardia, todavía no sabemos lo que está pasando.

- Llevo mi pistola, pero... Dudo que sirva en caso de que ocurra algo, ¿verdad?

- No lo creo, no... Piensa que esto es un sueño, no formamos parte de él directamente. Aunque espero poder hacer algo para despertar a Brooke...

- Brooke es la chica que tocó aquella cuna y quedó ciega, ¿verdad?

- Así es... Yo misma la encontré, con el miedo metido en vena - Paró un segundo. - Pues claro, este es el mismo bosque.

- ¿Aquí fue donde la encontraste?

- Sí, estuve investigando una brecha dimensional, me encargué de la pobre criatura y... Pensé que ya estaría, no fue la gran cosa, pero... - Giró la vista hacia la derecha, localizando aquella cuna, de tono morado gracias a una luz que emergía - Esa cosa aparecía de tanto en tanto en las dimensiones, y... No llegué a tiempo, fue demasiado tarde.

- Caray... - Abi se acercó a la cuna - Da mal rollo, a decir verdad...

- Sí... Lo peor es que te tentaba a acercarte, no sé qué fue lo que le pasó a Brooke antes de aparecer en este bosque, pero desde luego, jamás debió tocar esa cosa.

- ¿Nunca te ha contado qué ocurrió para que terminara aquí?

- No... Si te digo la verdad, cuando vino al Limbo conmigo, todo le pareció bien. No tuvo nada de miedo, no se quejó de estar muerta... Fue extraño. Debió de sucederle algo horrible antes de llegar al bosque, porque nunca nos lo quiso contar.

- Hmm... Algo me dice que no andamos lejos de saberlo, fíjate - Más allá, parecía haber una casa, incluso había parte de una calle, era como si el bosque y un pequeño pueblo se juntasen. - Eso no debería estar ahí, supongo.

- Para nada... Debe de ser cosa de estos sueños, todo está desordenado, no había más que ver la ciudad donde hemos aparecido antes... No sé, deben de llevar tanto tiempo aquí atrapados, que se ha empezado a reflejar en el exterior.

- Pues encontremos a Brooke, seguro que estará en esa casa, vamos - Decidieron acercarse, subieron el pequeño porche de madera, que parecía viejo y desgastado. La puerta estaba abierta, así que entraron sin dudarlo, encontrándose con un hogar en el que parecía que había pasado un huracán. Varios muebles estaban movidos, algunas sillas rotas, incluso en la cocina había platos rotos esparcidos por el suelo, ¿qué había ocurrido? Se oía una fuerte discusión en una de las habitaciones. Heather y Abi se acercaron, un hombre estaba pegando voces.

- ¡¡Eres despreciable!! - Gritaba aquel tipo - Pedazo de mierda... - Luego golpeó con su pie una mesita de noche. En la habitación había tres personas, Brooke, sentada de rodillas en el suelo, una mujer pálida en una cama de matrimonio y aquel hombre que no dejaba de enfurecerse.

- Papá... Para por favor... - La pobre chica estaba llorando.

- ¿Que pare? ¿QUE PARE? - La agarró del pelo y la acercó a la cama de mala manera - ¡¡Mira a tu madre, Brooke!!