25

382 48 78
                                    

Ellen y Heather cruzaron el portal de la derecha, Derek e Isaac el de la izquierda. Las dos jóvenes llegaron al otro extremo, dejando atrás el Limbo, una vez se cerró el portal, ojearon dónde se encontraban. Era de noche, las estrellas y la luna iluminaban el cielo, más abajo, las calles llenas de luces artificiales, daban vida a la ciudad. Decidieron salir del callejón donde habían aparecido. Los semáforos, los coches iluminando el asfalto, había vida en aquel lugar, y no parecía muy alejado del mundo donde vivía Ellen. La gente caminaba, charlaba, cenaban en las terrazas de los restaurantes, era como volver a tener vida... Para ambas.

- Este sitio parece... Muy normal - Recalcó nuestra protagonista.

- Sí... Parece la Tierra.

- Bueno, Lein es humano, tendrá que pasar desapercibido entre los suyos, ¿no?

- Supongo. Bueno... ¿Por dónde empezamos?

- Demos un voltio, a ver qué encontramos... - Propuso la pelirroja. Comenzaron a caminar, paseando por las calles, tratando de buscar algo que pudiera indicarles dónde estaba el joven brujo - Oye y... ¿Cómo ha ido con Isaac?

- Oh, bien... Ha cambiado bastante, pero es normal, los años siguen pasando en mi dimensión. Le echaba de menos, nunca pensé que volvería a verle.

- No te juzgo por largarte a aquella dimensión de cabeza a por él, he visto cómo le miras... ¿Sigues...?

- ¿Q-qué? No, yo... Bueno, un poco, pero, supongo que por ser quien es. Es decir, me alegro de que Megan sea la persona adecuada para él, cuando tuve ocasión de verles juntos la última vez que estuve en la Tierra... - Sonrió sin darse cuenta - Se merecen el uno al otro.

- Entiendo - Le miró, algo apenada.

- ¿Qué hay de ti? ¿Hubo alguien en tu vida antes de...?

- Bueno, sí. Mark, mi exnovio, pero... Fue tan imbécil.

- Vaya, siento que la cosa saliera mal.

- Bah, no te preocupes, mejor así... Luego, tal vez hubo alguien, pero... Ya no sé qué pensar.

- ¿Tal vez? Vaaya... Cuéntame eso.

- No es nada, realmente son cosas mías, pero... Pasé una buena tarde con alguien, eso es todo.

- ¿A qué te refieres?

- Era alguien gracioso, atento y... Sabía escuchar y distraerme de las cosas que pasaban por mi cabeza - Recordó por un instante la imagen de Lein. - Y cuando digo que no pasó nada, es que... Bueno, yo no estaba preparada, aunque pude notar su interés en mí.

- Vaya. Parecía una buena persona.

- Sí... Lo parecía - Necesitaba dejar el tema. - Bueno, ya no importa, ahora tenemos otros asuntos, ¿no crees?

- Totalmente... Pero no sé ni por dónde empezar a buscar, es todo tan... "Normal".

- Umm... ¿Y ahí? - Señaló un lugar en la acera de enfrente.

- Vaya... ¿Una discoteca? ¿Tú crees?

- No lo sé... Tal vez, es joven, es de noche...

- Hmm, bueno, tampoco hay muchas opciones, no creo que esté cenando en un restaurante a plena vista - Añadió Heather.

- No tenemos dinero, esa es la pega...

- Oh, en mi mochila tengo - Se la quitó y rebuscó, tardó poco en sacar varios billetes. - Cuando viajas tanto a otras dimensiones, terminas por prepararte para lo que sea, incluso... Tener dinero para poder comer unos meses.

La Cuna del Bosque (COMPLETO) - Libro 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora