La Cuna del Bosque (COMPLETO) - Libro 3

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Ellen se mantenía abrazada al chico, no era capaz de creer que estaba allí realmente, parecía un espejismo, un eco del pasado. Poco a poco, comenzó a notar algo distinto el cuerpo del muchacho, bajo la caperuza, había una especie de "bultos" que sobresalían, ¿qué serían?

- Estás aquí de verdad... ¿No? - Preguntó con algo de miedo.

- Claro que estoy aquí, después de la faena que me habéis dado, no te digo... - Su carácter seguía siendo el mismo. La joven comenzó a contemplar al chico, entonces notó qué era lo que no cuadraba... En una zona de la cara, emergían varios cristales, como los de la infección que le mencionó aquella vez...

- Tu cara... La infección volvió a crecer...

- Bueno... Ese parásito me lanzó a otra dimensión, así que... El virus que había en mi cuerpo, comenzó a crecer, hasta que se apoderó de mí - Se remangó el brazo izquierdo, lo tenía todo cristalizado.

- Dios... Pero, no lo entiendo, ¿no deberías haber perdido la cabeza...?

- Y lo hice, durante algún tiempo, me volví un maldito monstruo, pero... Creo que luego me "estabilicé", como si de verdad pudiera controlar esta cosa... - Se miraba el brazo - Conocí a alguien, una niña, Aurora... Ella me advirtió de que era distinto a los otros infectados... Tal vez se refería a esto, no lo sé...

- Siento mucho no haber... Hecho nada para impedir que pasara aquello, yo...

- Eh, no pasa nada, nosotros... Lo vamos a arreglar, ¿vale?

- Pero cómo... ¿Cómo has dado con nosotras?

- Todavía conservaba algo del poder de Kloum, pero... Poco a poco se iba apagando, así que, utilicé hasta la última pizca, en concentrarme para encontraros a ti y a Brooke, me alegra ver que seguís de una pieza.

- Cuánto tiempo hace que estás...

- Tres años.

- Joder... Aquí solamente han pasado cinco meses...

- No te preocupes, donde estuve todo aquel tiempo, siendo lo que sería "un Roto", era una dimensión vacía, sin nada ni nadie. Creo que ese parásito me mandó allí para que me pudriera en mi soledad, como un bichejo... Cuando le encuentre...

- Y... ¿ella? - Señaló a la chica que se había encontrado en el lavabo - ¿Qué tiene que ver con todo esto?

- Bueno, básicamente yo soy la infiltrada aquí, pero... Tengo un buen motivo, y créeme, no voy a irme a ninguna parte hasta que dé con lo que busco - Añadió ella. Llevaba una chaqueta de un tono azul oscuro, impermeable.

- ¿Qué es lo que andas buscando? - Preguntó Brooke.

- A mi novio... Isaac - Dijo, con un tono algo más serio.

- Ay, mi madre... ¡Tú eres Megan! - Ellen se sorprendió de verla allí.

- Síp, ah... Es un placer, Ellen. Me habría gustado que fuera en otra situación, pero... - Bajó la vista durante un instante - Perdí a Isaac, se marchó y no le volví a ver, así que cogí su pistola de portales y comencé a buscar por todas partes... Hasta que llegué al Limbo... O al menos, a la entrada, allí encontré a Derek.

- El Limbo... Espera, ¿por qué en la entrada?

- Hay una barrera, Ellen - Añadió Derek. - No se puede pasar, es como si estuviese sellado... Se abre el portal, pero... No deja atravesarlo.

- Qué extraño... Quizá sea debido al poco poder que debe de quedar allí, me imagino que se sellará hasta desaparecer, como si se engullera a sí mismo.