Capítulo 7

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En mi apartamento Alexis y yo tuvimos una velada romántica y tranquila, Alexis siempre era muy romántico y atento conmigo, en poco tiempo me encariñé con él, pensé mucho sobre si podríamos tener un futuro y decidí en darle una oportunidad ya que nos llevábamos bien y de que ambos sentíamos una empatía, además de que yo necesitaba olvidar completamente a Jeremy, pero aveces sentía de que era imposible, tantos años en la misma situación. Aquel amor imposible que no veía ni avancé en mí y ni en él. Jeremy vivía en su burbuja con la esperanza siempre activa y percibía de él dejaba de vivir para encerrarse en su mundo solitario.

Luego de tanto conversar con Alexis, nos fuimos hacia mi habitación, aceptaba bueno y tomamos la decisión, me tomó del brazo y me apretó hacia su cuerpo, quedando muy cerca, sentía los latidos de su corazón y se acercó a mí lentamente, me besó muy apasionadamente, me quitó la ropa lentamente, luego tomó mis senos con sus suaves manos mientras que yo moría de excitación bajo su boca hacia mi vulva, lamió mi vagina y mi clítoris, gemí de placer, cuando llegué al orgasmo, me penetró y tuvimos sexo una y otra vez.

Al día siguiente Susan tocó la puerta de mi apartamento, al verla la invité a pasar, trajo consigo a su lindo bebé Jonathan, muy adorable y tierno de por cierto. Susan y Mery ya eran madre a muy temprano, después de hablar cosas de su vida, pero no de la parte que me interesaba de ella, me preguntó por nuestro misterioso, raro y moralista amigo Jeremy una vez más.

—¿Qué has sabido de Jeremy? — me preguntó dándole el biberón a su bebé—. Ese cabezota sabrá Dios donde se habrá metido. Que yo sepa él nunca había hecho eso.

—Eso mismo que sabes tú de él, sé yo tambien. Lo último que me dijo es que quería un tiempo para meditar y que iba a evitar contacto con personas por un tiempo —le contesté mientras acariciaba mi cabeza y me iba recordando de él—. No sabemos que estará pensando en estos momentos, debe de tener una razón muy fuerte.

Suspiré.

—Extraño. ¿No? —comentó Susan extrañada.

—Sí muy extraño, él tiene problemas con su familia recuerdo que me había comentado algo al respecto —le aclaré—. Debemos de darle tiempo a ver que dirá luego.

—Qué será lo que habrá ocurrido, ojalá se comunique con nosotras pronto —argumentó Susan esperanzada.

—Jeremy tiene depresión que es peor, tiene problemas con su familia y el desprecio de Mery se le sumado a más —supuse de una manera breve.

—Ummm... Sí verdad —recordó Susan.

—¿Asististe a la boda de Mery? —me preguntó.

—No pude asistir, mi mente no estaba para fiestas ese día me excusé y le mandé regalos con Claudia luego ella vino a mi apartamento cuando regresó de la luna de miel —le comenté mientras tomaba mi móvil—. Yo tampoco entiendo a Mery. Ella tambien es rara.

—Ummm interesante, oye hay algo que no te he comentado y te lo voy a decir —dijo Susan.

—Jeremy hace dos años en el último grado escolar, tuvo un romance esporádico con Mery sólo duraron 3 meses, Mery me contó que Jeremy no era su tipo, esa es la razón principal porque el sufría tanto por ella, sé que no lo sabes, Jeremy en su vida privada es muy reservado, en especial en ese asunto —añadió, me quedé sorprendida y por segunda vez entendí a Jeremy, Mery era su ex y yo no lo sabía.

—Ahora entiendo su reacción —le contesté.

—Tú sabes que algunos hombres son reservados pero no entendí la razón de que no te haya dicho —me dijo.

— Así es, hablemos se otra cosa —intenté cambiar de tema.

—De acuerdo —contestó Susan.

Hablamos más cosas entre nosotras, decidí olvidar el asunto de Jeremy y que aparezca cuando tenga que aparecer. Así de simple.

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