Jodido egoísta - [Riren] - (Levi x Eren)

Capitulo: 15

Espero que lo disfruten y sea de su agrado ♥

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En cuanto la enfermera termino, me pregunto si quería que llamen a alguien. Negué con la cabeza, con mi vista aun en el suelo. Ella se fue, dejándome solo. Al poco tiempo escuche pasos, notando que eran los de Levi, ya que se detuvo justo a unos pasos de mí.

Tomo mi mano, dejándola en el aire; lo mire de reojo mientras él tomaba unas gasas y vendas, que había dejado a un lado de la camilla. Me desinfecto las heridas de los nudillos, luego me puso una gasa; comenzó a cubrirme la mano, en silencio.

–Debo verme mal. –dije a los pocos minutos.

–Vivirás. –dijo Levi, terminando de vendar mi mano. –Es bueno saber que incluso a idiotas como tú, le pueden dar un buen golpe y aun te mantienes despierto. Pensé que te desmayarías. Aunque, tú también le devolviste los golpes, incluso peores.

–Se pelear. –dije. –De niño peleaba mucho, una conocida me enseñó a derribar a mis oponentes. Nunca dejar que un idiota me derribara, lo que viste fui yo mismo. En la tarde me había tomado con la guardia baja, pero esta vez no le sería tan fácil.

–Parece que algo tienes en esa cabeza podrida. –dijo Levi. Eren sonrió, tomándolo como un alago positivo. Levanto su vista, viendo el rostro neutral del enfermero. Mordió levemente una esquina de su labio, desviando la mirada.

Se bajo de la camilla, quedando ambos cara a cara; termine alejándose un poco del enfermero. No quería arruinarlo, habían hablado con normalidad y temía cagarla diciendo algo que moleste a su enfermero/salvador/ángel. –Adiós. –dijo, caminando a la salida.

Afuera ya había reporteros, había comenzado a caer una leve lluvia y algunos policías rodeaban el lugar, elegí otro camino antes de ser interrogado. Procure no andar por calles donde podía ser visto, tomando un taxi lo más pronto que podía.

Iría a mi piso y se sumergiría en mi bañera; lo necesitaba.

Descansaba su cabeza contra el borde de su bañera con hidromasaje, cuando Hannes entro en su baño con una tableta en su mano. –Te dejo solo un rato, y ya estás en un nuevo escándalo. –dijo, enseñándome unas fotografías publicadas en la página de la revista de Kat.

Exhale, volteando a verlo. –Buenos días a ti también. –dije relajado. Había tenido un mínimo acercamiento con el enfermero, habíamos hablado con normalidad y eso lo tomaba como otra victoria.

Mire finalmente las fotos con claridad, en ella se veía a Floch siendo sostenido por el guardia, mientras me alejaba y corría hacia mi enfermero salvador, y este a su vez me ayudaba. –Lástima que no tomaron la patada. –dije sin interés.

Hannes puso sus ojos en blanco, masajeando su frente con sus dedos. – ¿Qué hacías allí a esa hora? –preguntó. Yo mordí una esquina de mi labio, sonriendo mientras recordaba lo sucedido. –Olvídalo, no quiero saberlo.