Jodido egoísta - [Riren] - (Levi x Eren)

Capitulo: 24

Espero que lo disfruten y sea de su agrado ♥

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Aplaudí junto con los demás, alejándome poco a poco de Levi, al final del discurso del director. Ya había entregado el cheque real, Levi luego se lo daría a su director y este invertiría en camas mas cómodas para los pacientes, agrandar un poco más el hospital, mas respiradores y en medicamentos.

Me retire un poco, no sin antes lanzarle un beso a Levi, junto con las cámaras. Todo había terminado ya, filmaron mas de emergencias, yo me acerque para estrechar mi mano con el director del hospital. Hannes y las cámaras salieron, yo me quede observando como todos acomodaban todo.

El rubio doctor ya no estaba, lo que me alegraba mucho.

Me tome algunas fotografías, luego firme algunos autógrafos y luego finalmente me dejaron un poco solo, Levi fue a uno de los cubículos vacíos con unos papeles; lo seguí e ingrese, cerrando la cortina para que no nos vieran. –Estoy listo para ayudarlo, doctor Levi. –dije en pose con una sonrisa.

Él volteo a verme, luego volvió su vista a los papeles.

–No soy un doctor. –dijo. –Soy enfermero, aun no obtengo mi título profesional.

Me senté en la cama cerca de él, con mis piernas cruzadas, una encima de la otra. –Pudiste serlo, pero decidiste ser enfermero. Uno sexy. –dije. Me miro con una ceja alzada, rodo los ojos negando con la cabeza. –Pero, ayudas a las personas, y eso te hace una excelente persona.

–Deja de decirme eso, tus piropos mierderos no me interesan. –dijo, volteando con los papeles en las manos. Incline mi cabeza a un lado, sonriendo como un bobo. –No soy sexy, ni ninguna de esas mierdas que me dices. Soy una persona, simple. Un enfermero, punto.

–Un sexy enfermero. –dije sonriendo. –No puedes negarlo.

Rodo los ojos de nuevo, y estaba por alejarse pero no lo deje. – ¿No tienes otra cosa mejor que hacer, mocoso? –preguntó. Negué con la cabeza. –Algunos debemos trabajar, atender personas heridas y estas ocupando una cama que debe usar un paciente de urgencia.

–Soy un paciente de urgencia, necesito un enfermero de cabellos azabaches en estos momentos. –dije, separando mis piernas. Deje mis manos en la falda, subiéndola un poco. –Soy un mal paciente, debo ser disciplinado. ¿Quién podrá hacerlo?

Levi se acercó a mí, jadee al tener su rostro cerca del mío. Sus manos terminaron en mis muslos, había dejado los papeles a un lado de mi cuerpo. Acerque mis labios a los suyos, queriendo besarlos, pero de pronto cerro mis piernas. –Vete. De. Aquí. –dijo.

Observe que bajo sus ojos tenia sombras negras, que anteriormente no había visto; preocupado tome su rostro entre mis manos. –Tienes horribles ojeras, ¿es que acaso no duermes? –pregunté y acaricie con mis pulgares sus mejillas pálidas.