|Muñeca de Cristal| Christopher Vélez

Capítulo 46

𝑶𝒏𝒆 𝒍𝒂𝒔𝒕 𝒈𝒐𝒐𝒅𝒃𝒚𝒆, 𝒑𝒍𝒆𝒂𝒔𝒆

La prueba de vestido, la última prueba de vestido, después de haberlo ajustado a mi medida porque constantemente bajaba más y más de peso, por fin podríamos hacer la prueba final antes de la boda, que era en dos semanas.

- Waw, me queda perfecto - Dije mirándome en el espejo.
- Por fin bonita, vaya que querías lucir delgada el día de tu boda, pero exageraste preciosa, ya te veías hermosa desde la primera vez que viniste - Comentó Aron, el encargado de mi vestido.
- ¿Crees que me veo mal? - Pregunté alarmada.
- Ay para nada hermosa, envidio esas curvas, que suerte tiene el novio - Dijo guiñandome un ojo.
- Ay tú tan lindo -.

Salí del probador para mostrarle a mi mamá, mi suegra y mis amigas como se me veía el vestido.

- ¿Qué opinan? - Pregunté.
- Perfecto, te ves hermosa, está genial - Dijo mi suegra.
- Por fin, te ves preciosa hija - Afirmó mi mamá.
- No hay duda, serás la novia más bella - Dijo Claudia.
- Confirmo, estás perfecta - Finalizó Bety.
- Entonces no se diga más, por fin está listo -.

(...)

Cuando terminé de vestirme agradecí a Aron y salí del lugar con todas las demás, el vestido lo enviarían a casa.

- Carmen preparó la comida favorita de ___, vamos a casa para comer - Dijo mi mamá.

Todas asentimos y nos subimos a la camioneta, mi mamá iba conduciendo y la señora Yenny en el asiento del copiloto, Clau, Bety y yo íbamos atrás.

- ¿Hiciste dieta? - Me preguntó Bety.
- Ni una sola - Les asegure.
- Luces divina, pero si bajaste mucho de peso, ¿Cómo le haces? - Inquirió Claudia.
- No tengo ni la más mínima idea, pero no se pongan a hacer dieta sin consultar a un nutriólogo - Les advertí.
- Quiero verme bien en el vestido, seremos tus damas de honor - Mencionó Bety.

Antes de que pudiera responder un escalofrío recorrió mi cuerpo y mis ojos vieron borroso un instante, no era la primera vez que pasaba pero ya me había acostumbrado así que lo veía un tanto normal, no me alarmaba mucho porque sospechaba que era por el estrés.

- ¿Estás bien? - Preguntó preocupada Claudia.
- Sí, sí, solo que estoy un poco cansada, anoche me dormí tarde -.
- Por hablar con el novio - Se burló Bety.

Ellas rieron y yo traté de reír con ellas, no quería decirles que los huesos habían comenzado a dolerme sin razón alguna, seguro pronto se me pasa, tampoco era la primera vez.
Cuando llegamos a casa todas bajamos de la camioneta, yo no me sentía muy bien, necesitaba descansar sí o sí, pero todas habían venido para comer juntas así que debía ser fuerte.
Entramos a casa y nos dirigimos al comedor, pues en cuanto Carmen escuchó la puerta de inmediato nos atendió.

- A mí sirveme muy poco nana, por favor - Me pedí.
- ___, come bien, ya estás perfecta de peso, bajaste mucho - Comento mi mamá.
- Como bien, solo que últimamente no me da mucha hambre -.
- Deja las dietas preciosa, Christopher te ama tal como eres - Me dijo mi suegra.
- Les aseguro que no hice dieta, pero no sé que pasó -.

La comida transcurrió entre risas y anécdotas por parte de mi mamá y mi suegra de como ellas se preparaban para su boda.
Yo había tratado de olvidar que sentía dolores, que cada vez se intensificaban más, sin embargo no mencioné nada, pronto se irían.
La señora Yenny, Claudia y Bety tuvieron que irse ya que era tarde, yo estaba agradecida la verdad, quería tumbarme en la cama y dormir hasta la próxima semana.

- Mamá, estoy demasiado cansada, iré a recostarme un rato ¿Sí? Te amo, gracias por ser parte de todo ésto y acompañarme en todo momento siempre - Dije con una sonrisa.
- Mi amor, no te dejaría sola nunca, anda, ve a descansar -.

Yo besé su mejilla y sin más subí con cuidado hacia mi habitación.

- Ay, mi pequeño Copito, ven aquí hermoso - Él subió a mi cama y rápidamente se acostó en mis piernas para dejarse acariciar - Mi compañero siempre fiel, ¿Sabes cuánto te amo? Cuando esté casada con Chris tu serás nuestro primer hijo, ay pequeño, cuánto te quiero, llegaste a mi vida para darle un toque de felicidad grandioso que jamás voy a poder olvidar - Lo abracé y besé su cabecita - Estoy muy cansada Copito, demasiado cansada -.

Mis párpados pesaban, mi cuerpo me hacía sentir débil.

- Juguemos un rato hermoso - Copito fue por su juguete, una pelota chillona saltarina, se la lance un par de veces haciendo que él fuera por ella y la trajera de vuelta varias veces.

De pronto él se quedó mirándome muy quieto, ladeó su cabecita y se acercó a mi pierna para acariciarla.

- ¿Qué pasa bonito? - Me incline para cargarlo y abrazarlo - ¿Ya no quieres jugar? - Él se movió entre mis brazos haciéndome dejarlo en la cama, se echó en ella y yo solo lo miré - Estás cansado, bueno, no te juzgo, yo me siento igual que tú, muy cansada -.

Poco a poco me dejé caer en la cama de forma que mi cuerpo se estiró y mi brazo pudo envolver el cuerpo de Copito.
Antes de quedarme dormida algo me hizo tomar mi celular y escribirle el mismo mensaje a todos los chicos, teníamos un grupo juntos así que sería más fácil.

*Oigan, gracias por estar para mí siempre, amo el momento en el que los conocí a todos, los preparativos están siendo tan exitosos gracias a toda su ayuda, los amo en serio, gracias chicos.😌♥️😘

Salí de su chat y entré al de mi papá.

*Papito, el vestido me quedó perfecto, por fin está a mi medida, dicen que baje de peso por alguna dieta pero juro que no hice ninguna, aún así quería compartir mi emoción contigo, te amo, nos vemos más tarde.♥️

Finalmente quise saber cómo estaba Chris, así que le envié un mensaje rápido.

*Amor mío, ¿Qué tal van las cosas? Yo ya estoy en casa, dormiré un rato corto por si llamas y no atiendo, te amo demasiado amor, suerte con todo, besos, besos, besos, te amo guapo.😍♥️
*Por cierto, dile a tus papás que agradezco infinitamente su ayuda, de verdad ya habría pedido la cabeza sin ellos, y recuérdale a Jonathan la fecha de la boda, Francia y él no pueden perderse el gran día.

Apagué mi celular y lo dejé en la mesita de noche dispuesta a dormir por fin, me sentía tan fatigada, tan cansada ya.
Poco a poco mis ojos se cerraron y supe entonces que había caído en un sueño placentero muy profundo.