Zayn se quejó nuevamente, cuando las heridas de sus dedos se abrieron al tocar las cuerdas de la guitarra.
Semicerrando los párpados, con el sol golpeandole de frente. Sentado en el porche de su casa con hectáreas grandes antes de llegar al siguiente vecino.
El calor en Tennessee en ese momento no estaban siendo gran problema.
El único problema que Zayn Malik podía tener en ese momento, era su falta de motivación para escribir su siguiente álbum.
Suspirando resignado, miró la botella de tequila a su lado.
Después del accidente que había tenido y en el cual casi muere, su manager y la disquera decidieron mandarlo a una vacaciones obligatorias a su natal Tennessee, y asistir a un grupo de rehabilitación.
Si bien, el definitivamente prefería morir antes que regresar a tennesse, no le quedo de otra más que volver cuando se le amenazo con terminar su carrera musical.
Regresar a la casa de sus padres habían sido un martirio. Solitaria, tal cual la habia dejado, triste y casi en ruinas.
Pero tanto trabajo ahí le había mantenido alejado del alcohol por casi un mes. Había prometido dejarlo, y cuando la tercer semana apareció frente a su puerta el líder del grupo de alcohólicos anónimos del condado, bueno, Zayn pensó en esconderse.
Al final, terminó asistiendo tres veces a la semana. Aún así mantenía en su casa botellas vacías para recordarle.
Nuevamente al presente, el cantante acarició las cuerdas de su fiel guitarra, y el sonido no le gustó para nada.
—Demonios—maldijo, ya harto del mismo mal sonido que solo sabía hacer.
Desde su divorcio con el alcohol, las letras y la melodía no parecían llegar. No había más inspiración, no como la que el alcohol y las drogas le daban.
—¿Nuevamente con eso? Te dije que pusieras una benditas en esos dedos, Malik.
El azabache detuvo lo que hacía, sonrojandose sin ver a su visitante inesperado.
A su lado, Liam Payne tomó asiento, con esa gran y resplandeciente sonrisa que parecía nunca abandonar su rostro.
Cuando recién había tocado el hogar de sus padres, había ido este vecino quien le había brindado su ayuda. Liam Payne decidió ser su amigo y ayudar en todo lo que pudiera.
Si bien, al principio este no sabia quien era Zayn, no cambio su trato hacia el azabache cuando este le contó sobre su fama.
Ambos formaron una amistad sincera, que poco a poco comenzaba a comer la cabeza de Zayn.
Jamás sintió atracción hacia otro hombre, sus parejas sentimentales y compañeros de cama siempre habían sido mujeres. Actrices, cantantes, modelos, incluso una que otra fan. Jamás un hombre.
Entonces, ¿Por qué su corazón se aceleraba cada vez que Liam se acercaba y le sonreía?
—¿Como va el album?—pregunta Liam.
—Es un asco—escupe, molesto—Necesito enviar a mi manager un sencillo, pero no puedo crear nada.
Payne no sabía mucho de música, su único fuerte era el campo. Siempre fue un chico de campo y animales. Así que, no sabia como ayudar a su amigo.
—Usa a una novia—Zayn miro nuevamente a su amigo, Liam sonreia viendo al horizonte de las tierras—Si quieres hacer una canción de amor, supongo que lo primero que debes hacer es pensar en esa persona.
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TALLER DE OS
RastgeleNueva sección de Os @liameyewrinkles gracias por esta preciosa porta. ¡gracias, corazón!