Engendro del Abismo

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Emily se había criado en un ambiente duro. Constantemente su familia cambiaba de vivienda, hasta que llegaron a Orsys. Era buena estudiante en la escuela de magia pero su prima siempre la superó por ello se empeñó en buscar más. Cuando le tocó trabajar en el ducado Bathory, el sótano estaba prohibido en las horas de estudio de la pequeña señorita de la casa. Emily se empeñaba en permanecer oculta en el sótano donde Sophia practicaba magia tabú con quien sería la maestra más perversa de todo el continente.

La Sóciere Jouet Karoline Mouchard, estaba podrida hasta los huesos y sea lo que sea que le haya enseñado a Sophia, en medio año y por orden del duque, fue colocada como institutriz exclusiva de Sophia y se le otorgó un título nobiliario con dinero. Karoline ya se había percatado de la presencia de Emily y accedió a enseñarle los principios de la brujería a cambio de que ella no volviera a ingresar al recinto del sótano.

Obtuvo alabanzas de su nueva maestra en cada cosa que hacía, pero Emily consideraba que no era suficiente, sentía que no se le estaba mostrando todo y así fue.

Si bien Emily aprendió magia negra, por no decir trucos baratos, parecían no estar al nivel de Sophia, ni en maldad como en poder. Era muy ingenua y torpe. Karoline solo la había usado de juguete y la engañó todo el tiempo mientras experimentaba con Emily para perfeccionar el "encanto" que Sophia usaría en el futuro.

Se había corrido el rumor que era una habilidosa manipuladora, a menudo quedándose con el dinero de sus clientes sin devolverles nada a cambio, todo eso después que fuera vista reuniéndose con tres sujetos buscados por desfalco y extorsión cerca de un templo. Luego de una breve conversación, se despidieron y al día siguiente el párroco junto con otros habitantes del templo fueron encontrados asesinados y habían sido saqueados.

Para evitar sumar problemas, puesto que Sophia ya era bien conocida por sus perversidades, el duque despidió a Karoline, no sin antes entregarle una cuantiosa suma de dinero para desaparecerla. Emily fue invitada por su maestra a seguir visitando su casa para estudiar. Emily iba cada cierto tiempo en busca de orientación al viejo condado de Acharin.

Ray obtuvo lo que deseaba, encontró a la malnacida que entrenó a Sophia y la usaría como peón para sus planes. El único problema sería el poder lidiar con ella sin ser descubiertos. Se empeñó en disimular su presencia, pues los recuerdos extraídos de Emily mostraban a una mujer tan preparada que rozaba e incluso superaba el poder de La hermandad misma, en ambición y perversidad. Ray tomó la forma de una mujer de mediana edad y Meraki tomó la de una joven en sus veintes, mientras que los niños usaban un escudo de invisibilidad y protección.

Habían vigilado la finca de antemano para evitar contratiempos pero algo les parecía muy extraño. El lugar era bastante silencioso, estaba casi desierto por no decir abandonado. Los empleados podían contarse con los dedos de una mano y no había rastros de su señora por ningún sitio. Zion usó su ojo para buscar a la mujer y lo que encontró fue algo espantoso.

El horror más macabro se hallaba en el segundo subsuelo de la mansión que fungía de laboratorio. Había cientos de cadáveres de niñas y mujeres rapadas colgando de los techos como decoración, algunas estaban despellejadas o desangrándose sobre tambores llenos de sangre mientras otras yacían descuartizadas en una mesa de carnicero con un brasero y una olla hirviendo a lado con los órganos puestos dentro de botellones . Los huesos eran lanzados a un pozo sin fondo o eran usados como herramientas mientras el cuero cabelludo, estaba en otra mesa preparado para fabricar pelucas.

El hallazgo era repulsivo y vomitivo. El recinto estaba lleno de estantes llenos de ingredientes considerados mágicos y condimentos varios, también había otro estante lleno de libros, al parecer eran de cuentas y otros temas. Y en medio de todo ese desvarío, había una mujer joven desgarrando la piel de una de las víctimas con los dientes para comérselos desaforadamente.

Ray sabía que ese era uno de los tantos cuerpos que este engendro había tomado para sí mismo. La Karoline que conoció en su vejez, distaba de la que vio en los recuerdos de Emily. Si bien eran el mismo ente, el avatar fue cambiando a medida que comenzaba a pudrirse. Cada vez los cuerpos resistían menos por ello optó saltar de cuerpo en cuerpo para mantenerse eternamente joven y esa técnica se la había pasado a Sophia de alguna forma para que la usara en algún momento.

Ray preguntó a Virgil si era posible que un lich hiciera tanto alboroto con cadáveres y gente viva para trasladarse a un nuevo contenedor pero este le contestó que jamás había oído tal estupidez en su vida aunque posiblemente, el ser con el que estaría lidiando no fuera un lich sino que al contrario podría tratarse de un ser ancestral tan hórrido como un primordial. Descartando el asunto de que fuera un lich se manejó con la premisa de que fuera un dios caído o algo peor, por ello se preparó para la cacería.

Ingresaron a la finca y a través de un portal se dirigieron al laboratorio para atacar por la espalda a la mujer. El olor a la sangre y a cadáveres en descomposición hacían del aire irrespirable. Buscaron a la mujer pero no la hallaron en el sitio. Un sentimiento ominoso recorrió la columna de Ray, cuando de repente la mujer apareció de la nada frente a ellos.

-Oh! No sabía que la puerta estaba abierta, no importa no irán a ninguna parte- Karoline sonreía y observaba detenidamente a Meraki – Qué hermosa piel, será un bello tapiz y por el aroma de tu sangre puedo saber que tiene el mejor sabor que cualquier otra- Su sonrisa se distorsionó y se pasó la lengua por sus labios saboreando a su presa

-Interesante observación pero no estamos interesados en formar parte de tu obscena colección. Ringo ahora o nunca- Ray llamó apresuradamente a Ringo para hacerse cargo de la mujer

Ringo apareció detrás de la mujer y la atravesó con Antares transformado en una lanza corta. Comenzó a girar la lanza para retorcer el interior con el mayor dolor posible y luego la extrajo rápidamente. Tomando el bastón que cargaba en su espalda, lo introdujo dentro de la mujer mientras recitaba un cántico. La mujer cayó al piso, su cabello rojo se tornó blanco y empezó a envejecer.

Ray aún estaba en alerta, algo no andaba bien. Karoline se dejó atravesar sin razón? No, ella lo estaba esperando. De repente Ringo se puso a gritar de dolor. Como si fuese pólvora quemándose, su piel y cabello se volvieron negros azabache, sus ojos se tornaron amarillos y sus uñas crecieron al igual que sus orejas. Se había transformado en un demonio casi por completo y esto era impensable siendo que era mitad bruja y su sangre demoniaca no podía manifestarse al 100%, a lo sumo algún rasgo demoníaco sería notable pero no todo.

Karoline empezó a reír como loca, no creía posible que una bruja mestiza hubiese llegado tan lejos.

-Jajajaja...así que estabas buscando robar mi poder? Pues ahí tienes, disfrútalo si es que puedes. No sé quienes son malditas escorias atrevidas. ¿Osaron traspasar las puertas sin temor a represalias? No les dejaré escapar- Karoline estaba furiosa

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