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Tras el sonido del silbato, el partido dio comienzo con el saque de centro por parte de Magmavis. El que llevaba el balón en su poder era un pequeño ser de color blanco con medio  rostro rojo y cuernos, dejando claro que aquel era el jugador de refuerzo que habían mandado para ayudar al equipo rival en aquella ocasión.

 El equipo rival avanzaba por el campo esquivando las entradas que realizaban los jugadores del Earth Eleven; eran demasiado ágiles en aquel ambiente y los terrestres, debido al escaso acondicionamiento, demasiado lentos; hasta que, finalmente, fue Frank quien pudo detener su avance.

El balón, en el poder del Earth Eleven, pasó del defensa hasta el velocista y de este a la rubia, quien inmediatamente se lo pasó al capitán el cual tenía una oportunidad clara de tiro y la aprovechó, usando su "Tiro Vendaval 2" mas este fue detenido por el portero rival, Aoba, sin necesidad de supertécnica alguna.

Mientras tanto, en las afueras del estadio, aun con un buen trecho por delante antes de llegar al estadio, se encontraban los dos miembros restantes del Earth Eleven.

Parece que el partido ya ha empezado -dijo Terry divisando el estadio desde lo alto de una colina-

Si, hay que darse prisa -dijo Riccardo preocupado-

Mientras caminaban, el portero tropezó con una piedra del camino y por poco cae por el precipicio directo a la lava; mas gracias a sus reflejos, el virtuoso fue quien de sujetar su brazo y subirle de nuevo al camino.

Estoy bien -dijo el portero serio-

Anda, vamos -le respondió el pelicenizo con una sonrisa al ver que se encontraba bien-

De vuelta en el campo de juego, la rubia iba con el balón en sus pies, segura de que podría regatear a los jugadores de Magmavis mas aquello no fue posible debido a unas ordenes muy específicas de Aoba.

En ese momento, la rubia se dio cuenta de que el portero y capitán rival no veía el campo como ellos, si no que lo veía seccionado y dirigía en las secciones a sus compañeros. No solo eso, el mecanicista parecía capaz de prever los movimientos del Earth Eleven, mas que prever, calcular, pues eran seres centrados en la tecnología. Pero, lo mas frustrante para la rubia era no poder imitar sus habilidades; bien podía imitar sus supertécnicas ya que era una habilidad que los humanos también poseían, pero era imposible imitar sus habilidades físicas, probablemente debido al que hecho de que los rivales no eran humanos y, por lo tanto, sus morfologías físicas eran completamente distintas.

 Ahora eran los magmavisianos quienes corrían con el balón en su poder, pero su avance únicamente llegó a la defensa, dónde fueron detenidos por Zippy, quien pasó el balón a Arion y de este fue a parar a Falco, a quién también se lo robaron.

Buddy se acercaba a defender al jugador que portaba el balón en sus pies pero, en ese momento, tras una extraña indicación de Aoba, el rival mandó el balón hacia la banda lateral, por donde todos pensaban que saldría la pelota, mas esta chocó contra un muro de vapor que salió en aquel momento de los laterales del muro.

Pero que demonios es eso? -dijo la rubia confusa-

Se han puesto en marcha los sistemas de refrigeración -habló el comentarista- Así que han mandado un pase a las columnas de aire caliente.

El balón continuó en poder de Magmavis, pero esta vez si fueron detenidos por Keenan, quién mandó el balón fuera del campo por la banda.

Chicos, hidrataros todos -dijo la rubia por el estado de sus jugadores, quienes sudaban cada vez mas-

Cuanto calor -dijo la pequeña de cabellos verdes-

No te lo bebas todo por favor Trina, doscientos cincuenta mililitros es una cantidad suficiente -explicó el de cabellos lilas-

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