Bienvenida al Raimon

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La mañana llegó como una exhalación para los jugadores del Earth Eleven, quienes se encontraban bastante descansados y listos para un nuevo día de entrenamiento en la sala oscura, pues lo que todos vieron a través de sus ventanas  nada mas levantarse, fue aquel manto oscuro plagado de estrellas que llevaban viendo durante el último mes y medio.

Justo después del desayuno, Skie interceptó a la rubia, quien se encontraba ajustando el plan de entrenamiento junto al virtuoso para informarles de que había conseguido conectar con el Instituto Raimon en la Tierra y que los esperaban al teléfono para luego salir a la carrera del lugar en busca de su novio, más los dos que se quedaban atrás sabían que este no iría, había prometido no hablar con nadie de casa hasta haber ganado, aunque quizás conseguían traerle arrastras.

Tras las palabras de su amiga, ambos se miraron con una amplia sonrisa y se levantaron a toda prisa saliendo de la sala a la carrera para poder llegar cuanto antes al teléfono y poder hablar con sus amigos después de tanto tiempo.

Chicos! -gritó la rubia al ver a todos sus amigos en la pantalla, con una enorme sonrisa- Dios cuanto os extraño

Hola a todos -dijo Riccardo con una sonrisa-

Todos tenéis buen aspecto -habló Subaru el primero, pues finalmente se había reunido todo el Earth Eleven para aquella llamada-

Me siento mas aliviado -dijo Wang-Chang-

Bueno, supongo que no tenéis morriña no? -dijo Aitor con su característico tono burlón- Por cierto, Alice, Víctor, Vlad y Sol os mandan un abrazo a los dos y que os echan mucho de menos, que no ven la hora de que estéis de vuelta. Lo mismo de tu padrino, tus tíos y los demás Alice

Gracias Aitor -dijo la rubia sonriendo dulcemente ante aquello- Diles que les quiero y que yo también les extraño muchísimo

No tenemos tiempo para sentir morriña -dijo un alegre JP-

Se te ve que estás emocionado JP -le respondió Samguk-

Si lo llego a saber me habría colado yo también -dijo el peliacua poniendo sus manos tras su nuca-

Cuantos crees que se nos pueden colar sin darnos cuenta? -dijo Terry divertido-

Y sabéis contra quién jugáis el siguiente partido? -preguntó Michael- Cuantas posibilidades tenéis? 

Pero con quien demonios crees que hablas Michael? -dijo la rubia con una sonrisa burlona- Vamos a ganar, por supuesto

Cueste lo que cueste -lo finalizó Frank-

Pardiez que desde aquí ya se siente vuestra decisión de luchar por la tierra -dijo el de la larga coleta- Me gustan los ánimos que tenéis

Y parece que el equipo está mas unido que nuca -dijo el pelirrosa de coletas-

Es gracias a lo que se ha esforzado el capitán -respondió Riccardo con una sonrisa- Y de los entrenamientos infernales

De nada -dijo la rubia con una amplia sonrisa burlona- Ya verás las vistas que te estoy preparando para cuando volvamos a casa Gabi

Manténmelo de una pieza anda -dijo el pelirrosa riendo ate aquello-

Yo sabía que eras una torturadora -le dijo Aitor a su amiga-

Chst, ni caso, Riccardo es un dramático -dijo la rubia riendo-

Y tu Arion, no vengas con eso de no hablar con nosotros hasta después de ganar el torneo -le dijo Michael-

Es-esta bien -dijo el capitán algo avergonzado- 

Arion, si tu te pones nervioso todos se pondrán nerviosos -le dijo Samguk con una sonrisa tranquilizadora- respira hondo y relájate, por favor