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La mañana llegó pronto, el cuerpo de la rubia se sentía agotado después de la fiesta del día anterior.

Estaba cansada, sus pies todavía le dolían, pero se sentía feliz, la noche anterior lo había pasado realmente bien y había sido una gran noche, la mejor despedida que habían podido tener, a opinion de la rubia, quien creía que todos se marcharían mucho mas animados para comenzar su nueva aventura.

La rubia abrió los ojos y se topó con el rostro sereno de su novio, el cual todavía dormía plácidamente con una sonrisa dibujada en el rostro y uno de sus brazos rodeando la cintura de la chica.

Víctor, despierta, es hora de levantarse -dijo la rubia acariciando el rostro del chico-

Ya? -murmuró el chico sobandose un ojo- Pero si no hemos dormido casi nada...

Ya dormiras durante el viaje, anda levanta so vago -dijo la rubia riendo mientras se levantaba de la cama después de dejar un rápido beso sobre los labios del mayor-

Vale mama, vale -dijo el chico levantándose de mala gana-

Con una carcajada, la rubia cogió su ropa y se metió en el cuarto de baño para así cambiarse, mientras el chico hacía lo mismo en su habitación.

Cuando estuvieron cambiados, salieron de la habitación cogidos de la mano y bajaron al salón, donde se toparon con los adultos y el resto de adolescentes que habían pasado allí la noche.

Esto no termina de convencerme -dijo Jude mirando a su hija y al delantero-

Dejala vivir, no seas amargado -le dijo Caleb con cierto tono burlón-

Yo voy a dejarlo estar -dijo Axel suspirando- Eso o duermo en el sofá

Así me gusta -dijo Shawn besando la mejilla de su prometido-

Aun no estais casados y ya te tiene bien pillado poe los huevos -comentó Dylan divertido-

Dijiste algo, Dyl? -le miro Marky con una sonrisa-

Eh no, no que va, no dije nada -se apresuró a responder el de gafas-

Aquello provocó una carcajada general y un puchero por parte del estadounidense.

No se yo quién de los dos esta peor -comentó Paolo burlón-

Todos se sentaron a la mesa para desayunar, el último desayuno que los dos de la selección tendrían en su planeta por una larga temporada.

La rubia se había sentado entre Cameron y Alessandra, manteniendo una agradable charla con ambos y junto a Sol, mientras que Víctor había hecho lo mismo pero entre Bai Long y su hermano, hablando los tres animadamente junto a Tezcat.

El desayuno pasó en un abrir y cerrar los ojos y pronto llegaron las primeras despedidas en la puerta de la sede.

Te vamos a echar tanto de menos -decía la italiana abrazando a su amiga- Mucha suerte y cuidate muchísimo, por favor, vuelve como campeona.

Nos veremos en cuanto vuelvas, en cuanto digas que has vuelto cogeremos el primer avión -dijo el estadounidense uniéndose al abrazo- Y tu, cuidamela bien o te las verás con mis unicornios -le dijo a Víctor divertido, a lo que el delantero solo alzó una ceja-

Tranquilos, volveré con la victoria y nos veremos nada mas ponga un pie en la tierra, ya veréis, no tendréis tiempo de echarme de menos -dijo la rubia besando la mejilla de ambos chicos, separándose después del abrazo-

Mucha suerte, pequeña -le habló Paolo- Confiamos en vosotros

Nos vamos a casa con la confianza de que dejamos la suerte del planeta en buenas manos, lo conseguiréis -le dijo Marky sonriendo-

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