LIA
La mañana del lunes fui muy temprano a mi cita con el médico y salí del consultorio más nerviosa de lo que entré, pero tuve que hacer a un lado mis preocupaciones cuando llegué después a Beat porque surgió un problema con la distribución del nuevo álbum de Heaven y eso era algo que tenía que resolverse de inmediato. Por supuesto que Ron dejó la tarea en mis manos mientras él arreglaba detalles irrelevantes sobre la fiesta de lanzamiento que se realizaría el viernes.
Por fuera la gente podría creer que me estaba dejando abusar, pero en realidad no se trataba de que mi trabajo no fuese reconocido y Ron tomara todos los créditos de mi esfuerzo. Daniel llevaba cuenta de todo lo que yo hacía en lugar de Ron, con lo que ya había formado una larga lista de razones que le servirían para, el siguiente año, respaldar su decisión de no renovarle el contrato y de ese modo conseguir un nuevo representante para Heaven.
Terminé de atender el problema de distribución apenas el día de ayer y esta mañana, luego de acompañar a Heaven a probarse el modelito para la fiesta del viernes, la dejé en casa y fui a reunirme con Christian Letts.
El señor Letts era, en pocas palabras, la mano derecha de King. Una de las tres personas que estuvo en su funeral, además de Chet y Zara. Cuando llegué al café donde me citó, el señor Letts ya me esperaba. Era un hombre más formal de lo que imaginaba, quizá lo juzgué mal por saber para quién trabajaba.
Me presenté con él y, tras intercambiar breves saludos, tomé asiento. Tenía que admitir que me sorprendió bastante cuando Billy me comunicó que este hombre quería reunirse conmigo.
—Se parece usted muchísimo a él, ¿se lo han dicho?
—Más de lo que me gustaría —admití con algo de incomodidad.
Él todavía me observaba como si estuviese frente a la reencarnación de su antiguo jefe, lo cual era incómodo.
—Excepto el color de piel. King era trigueño por su ascendencia fiyiana, usted no heredó eso de él.
—No estaba al tanto de esa información... —murmuré—. Que King tenía ascendencia fiyiana, quiero decir.
Porque fotos suyas claro que había visto, así que ya me suponía que mi color de piel lo debía a los genes de Zara.
El señor Letts rio.
—Sí, es algo que pocos conocemos. —Soltó un suspiro y chasqueó la lengua—. En fin, señorita Banfield, no pretendo quitarle mucho de su tiempo, así que trataré de ser conciso. Lo cierto es que he esperado encontrarme con usted desde hace bastante tiempo.
—¿Y por qué no me contactó antes? Estoy segura de que tuvo los medios para hacerlo, ya que imagino que fue usted quien dio conmigo cuando King me buscaba el año pasado.
—Está en lo correcto. Pero viendo el poco éxito que tuvimos aquella vez, juzgué adecuado esperar a que Zara la convenciera de escucharme.
—Pues ella nunca mencionó nada al respecto.
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Definitivamente más que atracción [BB #2]
RomanceDos años después de conocerse, la atracción entre Blake y Lia solo ha ido en aumento. Cuando finalmente caen, ambos saben que ya no hay vuelta atrás. Lidiar con las consecuencias de lo que han hecho no será cosa sencilla. Quizá lo más difícil para...