Definitivamente más que atracción [BB #2]

Capítulo 48

BLAKE

Busqué a Ben, que se había quedado a dormir en casa la noche anterior, y lo encontré en un rincón del jardín, cerca de donde estaban ubicados los rosales de papá. Por supuesto que él estaba allí tomando fotos.

—¡Benjo! —grité y troté hasta él.

—¡Chisttt! Espera, hombre, no te acerques o volará...

—¡Date prisa!

Impaciente, esperé hasta que Ben terminó de fotografiar con deliberada lentitud a algún bicharraco que descansaba sobre la hoja de una planta. Solo después de eso bajó la cámara y me miró con cara de pocos amigos por interrumpirle.

—¿Qué quieres, fastidioso?

—Acompáñame a Tim Hortons. Quiero un muffin inglés de queso, salchicha y huevo. Y también quiero un café. Pero no quiero ir solo.

—¿Qué? —Arrugó la cara en un gesto y verificó la hora en su reloj—. ¡Pero si hemos desayunado apenas hace dos horas!

—¿Y eso qué? Hago ejercicio en las mañanas. ¿Vas a acompañarme o no? Luego podemos pasar a visitar a Dawn... Ya sabes, la cosita pequeñita que nuestro hermano procreó con Elsa y que hoy cumple cuatro días de nacida. Bueno, primero debemos hablarles para ver si es prudente la visita, tampoco queremos molestar.

Ben resopló y rodó los ojos.

—Solo me has convencido porque quiero ver a ese angelito de nuevo.

Sonreí satisfecho de que él mordiera el anzuelo. Aunque la verdad era que yo también moría por ver de nuevo a la bebé, que había nacido el martes once de septiembre apenas. Todos estuvimos dándole apoyo moral a Dawson y Elsa en el hospital el día del parto, y luego vimos a la pequeña Dawn a través del cristal que nos separaba de ella en la sala neonatal. El jueves que les dieron el alta nadie quiso molestarlos, así que fue apenas ayer que los visitamos y pude cargar en brazos a la pequeñita por un par de minutos en los que Ben nos tomó una foto que ya había enviado a todo el mundo para presumir a mi sobrina.

Ben guardó su cámara en el estuche para llevarla consigo, por si se daba la oportunidad de fotografiar a Dawn. Si bien él era más de trabajar con la naturaleza y paisajes, estaba tan embelesado con la nueva integrante de la familia que seguro la tomaría de modelo cada que pudiese. Incluso ya había propuesto hacerles una sesión familiar, a lo que Dawson y Elsa aceptaron encantados.

Condujimos al Tim Hortons más cercano para satisfacer mi deseo de comida y luego nos pusimos en camino a casa de nuestro hermano mayor, que ya había aprobado la solicitud de visita.

—Por cierto, hermanito, ya no he escuchado rumores de que tu supuesta novia, la ardiente súper estrella de cine, siga en la ciudad.

—Se fue a Los Ángeles, por fortuna. Aunque todavía me fastidia a la distancia.