7. Ira y amenazas

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Midoriya estaba por llegar pero preferí no mirar atrás, me conozco y sé que si volteo, querré salvar a ese idiota. Mi mente estaba hecha un caos que solo era controlado por la necesidad de salvar a Aizawa y fue entonces que una fuerte explosión disipó aquella espesa bruma. Bakugou, Kirishima, Todoroki y Hajino habían llegado a tiempo e intervinieron.

No pude evitar sentirme enojada, en especial con Hajino. Estábamos tan cerca y todo lo que ella debía hacer era retrasarlos para así mantenerlos a salvo y que no intervinieran. Aunque no puedo culparlos, solo hacen lo que creen correcto, incluida ella. Ignoré ese malestar en mi interior junto al ardor en mi brazo que por toda la adrenalina había quedado en segundo plano, y me apresuré para llegar a la cima.

Una vez ahí, todos los presentes voltearon a verme con terror en sus ojos. De por sí ellos ya estaban entrando en pánico y en cuanto giré hacia el suelo lo comprendí, 13 estaba gravemente herida y era claro que ellos no sabían que hacer.

- ¡Aizawa sensei! -Mina y Uraraka corrieron en mi dirección y me ayudaron a poner a sensei en el suelo.- Sensei...

Ambas estaban comenzando a llorar, presas del miedo que causaba la situación mientras Yue me miraba entre preocupado y asustado. Él sabía lo que esto significaba para nosotros, para mí. Sus heridas eran graves y si no lograba contenerlo pronto, moriría por la pérdida de sangre.- ¿Está Yaoyorozu con ustedes? Necesito detener el sangrado si queremos que viva.

- No sabemos donde está. La separaron al igual que los otros. -farfulló Mina tratando de no trabarse por el llanto. Era obvio que en su vida habían visto algo como esto.

- ¡Demonios! -su estado era deplorable, su sangre cubría el suelo y mis manos. Con cada segundo de duda, su vida corría peligro. Intenté concentrarme para localizarla y para mi mala suerte se encontraba hasta el otro lado del complejo; jamás llegaría a tiempo. No me queda otra opción, tendré que hacerlo.- Uraraka, dile a Satou y Sero que vengan. Tengo un plan para salvarlo pero voy a necesitar su ayuda.- sin pensarlo dos veces, corrió a llamarlos y estos al ver su estado, pusieron mala cara claramente preocupados.

- Sensei...

- Sero, necesito que uses tu cinta y hagas un torniquete en sus brazos para tratar de parar el sangrado. Satou, cuando él termine eso, necesito que sujetes bien a sensei.

- ¿Qué vas a hacer? -cuestionó algo confundido mientras Sero cumplía mi orden.

- Algo que me había prometido jamás volver a hacer, pero me temo que es la única opción que tenemos. -ante aquellas palabras, todos me miraron preocupados y la mirada de Yue se llenó de pánico. Él sabía perfectamente lo que haría y lo que eso implicaba, pero no les quedaba más que confiar en mí.

Como le pedí, Satou sujetó a Aizawa con ayuda de Sero. Coloqué mis manos sobre su pecho y me concentré en su sangre, sus huesos rotos y la carne expuesta por la pelea. Intenté hacer una imagen mental de cómo realmente todo debería verse e hice mi mejor esfuerzo para regresar y retener la sangre en su lugar cerrando las venas y arterias dañadas.

Ante esto, él comenzó a removerse por lo doloroso del proceso. Sus huesos eran el mayor problema, si movía alguno en la dirección errónea, el daño sería mayor.

- S-Sujétenlo. Ya casi termino. -me costaba hablar y podía sentir como mi cabeza comenzaba a punzarme. Una vez que sentí que ya estaba fuera de peligro, me detuve.- Y-Ya está b-bien... -entonces todo se tornó negro. Creía haberme contenido pero solo fui arrogante. Mi cuerpo no estaba acostumbrado y la cantidad de energía que utilicé terminó por noquearme.

Narradora

La pelea había llegado a su fin. Para la suerte de los presentes los pro héroes llegaron a tiempo e hirieron a Shigaraki, obligándolo a retirarse. Tú no habías sido testigo de lo ocurrido, y al igual que All Might y Midoriya, te encontrabas en la enfermería; aunque en un cuarto diferente. Si bien no parecías tener heridas aparentes, no recobraste la consciencia hasta muy entrada la noche.

Sabías lo que estaba por ocurrir, no necesitabas tener el quirk de Yue para saberlo. No solo la misión había fracasado, sino que además Shigaraki había resultado herido, habían perdido al nomu y Aizawa estaba hospitalizado. Tenías cierto temor de volver a casa pero no hacerlo solo agravaría las cosas.

- ¡Te dije explícitamente que debías protegerlo! -a penas te vio cruzar el umbral, Yudoku desató su ira contra ti No había sido tu culpa pero cuando la mayor se enfurecía, su ira nublaba completamente su juicio. Más aún si la causa tenía algo que ver con Aizawa.

- ¡No fue mi culpa! -alcanzaste a gritar- Le dije que no debía tocarle ni un solo cabello. Que estábamos ahí única y exclusivamente para matar a All Might, pero al no encontrarlo las cosas se salieron de control y Kurogiri me envió lejos. No pude hacer nada, madre.

- ¡¡Pero ya está hecho!! -la mayor luchaba para contener las lágrimas. En cuanto supo de lo ocurrido, sintió como su corazón se comenzó a comprimir dolorosamente. Saber que ella había tenido algo que ver con la condición del héroe la mataba lentamente.- Se acabó.

Aquella simple sentencia te asustó. No podía hacer eso, no después de todos los sacrificios que habías hecho para llegar ahí.- Por favor, no lo hagas. He esperado mucho por esta oportunidad. No puedes solo terminarlo...

- Puedo y lo haré. Fui clara con mis condiciones y ese bastardo aún así se atrevió a lastimarlo. -la determinación en sus ojos ardía con la intensidad del mismo sol, nada podría hacerla cambiar de parecer.

- Te lo suplico, necesito esto. Tú prometiste que me ayudarías a lograr mi deseo, pero si te retractas ahora no podré hacerlo.

- ¡He dicho que se acabó! -gritó llena de ira haciendote sentir pequeña.- Desde hoy en adelante, Negai no volverá a trabajar con la Liga de Villanos.

Ese era el fin. Tus planes, sacrificios y trabajo duro; todo se iría al demonio y todo gracias al maldito de All Might que no estuvo donde debía para poder asesinarlo como se tenía planeado.

- Retírate. -ya no fuiste capaz de decir nada, aquello solo lograría agravar más la situación. Necesitabas pensar en algún plan; por el momento aún contabas con estar en la UA para así monitorearlo, pero quizás eso no sería suficiente.- Casi lo olvido. Tú y los otros dejarán la UA.

- ¡¿Qué?!

- Ya no trabajamos con esa rata, ya no necesitan estar de encubiertos ahí. -eso no podía ocurrir, aquello era todo lo que te quedaba. Presa del pánico y frustración, usaste la única carta que te quedaba.

- No puedes hacer eso. Si nos vamos ahora, puede llegar a ser sospechoso. -ante aquella afirmación, Yudoku se mostró confundida e interesada.

- ¿De qué demonios estás hablando?

- Puede que hayan sido descuidados, pero no son estúpidos, madre. Tarde o temprano sospecharán de un infiltrado y el que dejemos la escuela tras el ataque podría volvernos sospechosos. Y como bien sabrás, si sospechan de uno, pueden llegar a descubrir al resto. No quiero poner en peligro a la organización... A mi familia.

Luego de aquello, la mayor no dijo nada y se retiró del lugar. No eran necesarias las palabras, sabías perfectamente qué significaba su silencio. 

La habías convencido.

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¿Cómo está mis niños?  ¿Qué les ha parecido el capítulo?  ¿De qué creen que hablaba T/N? Eso y más en los próximos capítulos. Sin más me despido mis niños, besos. <3


Publicado el 19/03/21


Traiciones - [Katsuki Bakugou y  tú] COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora