CAPÍTULO 39

179 18 2
                                    


Me inspecciona de pies a cabeza.
 
—Hace mucho que no nos vemos —me rodea siguiendo con la inspección— te ves más… bella.
 
—¿Qué haces aquí? —decido hablar con el corazón en el pecho.
 
—Vine a visitar a mi familia —susurra cerca de mi oído estremeciéndome.
 
—Me tengo que ir —comienzo a caminar pero rápido Markov corta mi camino.
 
—¿A dónde crees que vas?
 
—A mi casa así que quítate —me doy valor empujándolo logrando que se haga a un lado.
 
—Andy —volteo viendo a Jackson— Sht —se lleva el dedo índice a los labios indicando que guarde silencio.
 
Lo ignoro y sigo caminando
 
«Debo de decirle a alguien ¡ya!»
 
Doblo en la esquina y ahora si comienzo a correr, una sensación horrible se instala en mi pecho al mismo tiempo en que aparece un sabor amargo en mi garganta, los ojos me arden y lo único que quiero es estar en mi maldita casa.
 
Le mando mensaje a Nick pero recibo un “No" como respuesta, lo llamo pero no responde ¿Qué diablos hace? Entro a mi dormitorio y no aguanto más. Comienzo a llorar abrazando una almohada.
 
«Mis padres aún están con ellos»
 
Jamás en mi vida había sentido la muerte tan cerca.
 
La noche cae y ellos no aparecen. Estoy pensando seriamente en llamar a la policía. Bajo a la planta principal encontrando a Sasha en bata y con una mascarilla para la piel mientras come un tazón de helado.
 
—¿Ya regresaron? —pregunto sacudiéndome la nariz.
 
—Ya te dije que no por cuarta vez —responde cansada, de inmediato hace una mueca al verme— ¿Ya te viste? Estas horrible, deberías de darte un baño o no sé. Pareces muerta con la cara que traes.
 
Me dejo caer a su lado en el sillón. No le pongo mucha atención al programa de comedia, la angustia no me deja pensar muy bien.
 
—Señorita Andrea, alguien la busca —una mucama llega interrumpiendo.
 
—Hazlo pasar —responde mi hermana sin dejar de ver el televisor— Andrea, será bueno que veas a un amigo, tal vez te ayude a quitarte ese aspecto asqueroso que te cargas.
 
«Apuesto que es Fanny«»
 
Giro la cabeza esperando a ver a la morena con una radiante sonrisa.
 
—¡¿Nick?!
 
—¡Ahhg! —grita mi hermana a un lado levantándose de inmediato— du…duque Jefferson.
 
—¿Qué haces aquí? —le pregunto sin salir del asombro.
 
Sasha no sabe ni como pararse. Nick está con la misma seriedad de siempre vistiendo caro.
 
—Tu me llamaste —se impacienta.
 
«Lo llame desde hace horas, tonto maldito»
 
Me giro sentándome bien en el sofá.
 
—Apuesto que te molesté con mis mensajes y llamadas —la voz se me quiebra— vete, lamento haberte hecho venir hasta aquí.
 
Agarro un cojín buscando consuelo. No soy importante para mis padres ¿cómo pude pensar que sería diferente con Nick?
 
—No le hagas caso a mi hermana ¿gustas algo, un vaso de agua, un café? —mi hermana saca a flote su coqueteo— Lo que sea.
 
Dejo que una lágrima se resbale por mi mejilla.
 
—Déjanos solos —demanda Nick.
 
Sasha se tarda pero se va. Siento como el sofá se hunde un poco.
 
—¿Qué es lo que pasa? —pasa su brazo por mis hombros acercándose.
 
—Nada —respondo sin mover un solo pelo.
 
—Andrea, no me lo pongas difícil —su aliento caliente recorre mi cuello.
 
—Nick, no tengo ganas de coger —lo corto.
 
Sé que solo nos vemos para hacerlo pero esto ya es el colmo, ve que estoy mal y ni así deja de pensar con el pito.
 
Suelta un suspiro grotesco alejándose.
 
—¿Qué es lo que pasa? De verdad que a veces no te entiendo —se molesta— sea lo que sea dilo.
 
—Olvídalo, ya te dije que te fueras —me enfado conmigo misa por esperar tanto de personas como él y mis padres.
 
—Estas loca —se levanta encaminándose a la salida.
 
Dejo que más lágrimas resbalen por mis mejillas, de verdad me siento mal emocionalmente.
 
Con mis padres no cuento, con Sasha no se puede hablar bien y con Nick… con Nick menos.
 

Andrea.
¿Estas ocupada? ¿Crees que puedas venir a mi casa? Me siento mal.
 

Tory.
Estoy en cinco.
 
Sonrío un tanto melancólica con el teléfono en mano.
 
 

KRIPTONITADonde viven las historias. Descúbrelo ahora