TORY.
—¡Felipe! —grito tratando de llegar a él, pero los hombres que se me vienen encima son demasiados.
Un golpe en la pierna me destabiliza mandándome al suelo, tomo una escopeta dándole a un muro, repito otra vez la acción provocando de la columna se venga abajo.
Los rusos miran como el salón se cae pedazo a pedazo, la mayoría trata de huir.
«Esta es mi oportunidad»
Me escabullo por lo bajo tratando de llegar a Felipe mientras los rusos tratan de lidiar con el derrumbe.
—Felipe, por favor dime que estas bien —suplico en medio de un ataque.
Lo muevo para que reaccione, pero simplemente no abre los ojos.
«No»
—¡Felipe! ¡Abre los malditos ojos y dime que todo está bien! —imploro llenando su cuello de lágrimas.
Me abrazo a él.
Ya nada importa, la maldita fortaleza se está derrumbando.
Lava ardiendo recorre mi cuerpo llenándome de odio y resentimiento puro, levanto la vista encontrando al maldito infeliz de Nikolay.
—¡Tú! —grito llamando su atención mientras me pongo de pie.
Me apoyo en un solo pie ya que el otro lo tengo lastimado.
—¡Te voy a matar! —grito y comienzo a correr hacia él importándome un carajo mi cuerpo herido.
Me voy contra el ruso mandándolo al suelo junto conmigo.
—Argh —gruñimos los dos al mismo tiempo.
La furia me toma por completo y de pronto ya no siento dolor y mucho menos cansancio. Me subo sobre él golpeándolo con mis manos hechas puño, no pienso, solo actúo queriendo acabar con su vida, no me importa si una bala me perfora la cabeza, yo solo quiero matarlo.
Cegada por la ira, estrello mi cabeza contra la de él causando heridas abiertas. Me empuja levantándose y yo hago lo mismo, ambos estamos desarmados dispuestos a matarnos.
—Te mataré, pequeña zorra —promete mientras escupe sangre.
—Quiero ver eso —respondo de regreso.
Nos vemos una vez más antes de irnos uno sobre el otro.
Suelta el primer golpe, pero lo esquivo perfectamente tomando distancia para lanzarle una patada a la cara la cual logra detener con su brazo. No desisto y vuelvo a atacar con puñetazos y patadas, una mezcla de boxeo y artes marciales.
Tal vez yo pueda tener la habilidad y lo golpeo más vece que él a mí, pero El Grande tiene la fuerza y el cuerpo para que cada golpe que recibo de él se sientan como cinco de los míos.
Golpeo la parte donde debería estar su hígado causando que se curve un poco, con la mano derecha y desde abajo, ejecuto un golpeo en dirección vertical que va directamente a la mandíbula del oponente causando un uppercut perfecto que lo destabiliza mandándolo boca arriba.
No sé cómo diablos lo hago, pero doy un salto dando un giro de 360° para golpear su torso con mis pies destrozándole una o tal vez dos costillas.
—¡Maldita puta! —grita embravecido expulsando sangre de su boca.
No estoy dispuesta a dejarlo que me mate tan fácilmente, le causaré todos los daños posibles antes de irme al infierno.
—¡Las fuerzas especiales del ejército británico están aquí! —comienzan a gritar.
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KRIPTONITA
De TodoVen y descubre lo peor de la Monarquía, Mafias, Familias, Amistad y Amores unidas por un terrible pasado. Tory Kendall y Andrea Cooper te mostrarán el camino. Dos chicas completamente diferentes pero con algo en común: ellas tienen el poder de hace...