La serpiente y el león.

161 15 3
                                    


Mientras se encontraban en la clase, Hermione y Audrey se seguían preguntando donde podían estar Ron y Harry, Audrey volvió su atención a la clase cuando escucho a sus compañeros sorprenderse al momento de que Mcgonagall se transformaba en gato. Al segundo siguiente volvió a hacer ella misma, y comenzó a dar instrucciones para realizar una lectura y un breve ensayo. Acto seguido volvió transformarse en gato y pasearse por el salón para vigilar a los estudiantes.

―Llegamos ¿te imaginas que haría Mcgonagall si nos descubriera.

Ron y Harry acababan de entrar al salón algo agitados, en cuanto Hermione y Audrey los vieron tuvieron la leve impresión de que corrieron desde la torre para llegar a la clase.

―No lo sé ―respondió Harry tratando de recuperar el aliento.

De un momento a los dos chicos quedaron congelados ante lo que vieron, un gato salto del escritorio y en el aire tomo la apariencia de la profesora y se paraba frente a ellos dos.

―Woow eso...―Ron hizo una pausa, tratando de asimilar lo que acababa de ver ―fue increíble.―Harry y Ron estaban tan sorprendidos que tenían la boca abierta.

―Gracias por el cumplido señor Weasley ―respondió la profesora mirándolos por encina de sus gafas ―me podrían explicar ¿por qué llegan tan tarde a clase? Tal vez sería más útil si los transformara a los dos en un reloj de bolsillo, así tal vez llegarían a tiempo.

Audrey no podía evitar dejar de verlos, en ese momento pensó que tal vez hubiera sido buena idea pedirle a uno de los demás chicos que los despertaran. Aunque la escena le parecía divertida ya que Ron tenía la cara que ponía cuando su madre lo regañaba, así que la chica hacia un esfuerzo para no reírse.

―Pues nosotros vera...― empezó a decir Ron con un leve tartamudeo.

―Regresar es un lío.―Harry termino la oración de Ron, pensando en que la profesora seria menos dura.

―Los convertiré en un mapa, tal vez eso los ayude a encontrar sus asientos. ― Mcgonagall les hizo una señal para que fueran a sentarse, así que Neville y Audrey se recorrieron en sus asientos para que ellos tomaran lugar.

―Espera a que Percy se entere que llegaste tarde en tu primer día...―dijo en voz baja Audrey a Ron que había tomado el lugar libre junto a ella.

―Pues, no se enterara si tu no se lo dices―respondió Ron a su amiga mientras sacaba sus cosas ―por favor Audrey, ya sabes cómo es él.

―La verdad Ron, no creo que sea necesario que se lo diga ―contesto sin despegar la vista del pergamino ―además, algo me dice que estará bastante ocupado con las fotocopias, así que no lo notara.― miro a su amigo y le guiño un ojo.

La clase término y la siguiente era pociones con Snape, Audrey se sentía algo nerviosa por tomar su clase, ya que su tía le había hablado mucho sobre él, y de cuando eran estudiantes, por lo que había escuchado de Bill, Charlie y Percy, era un profesor demasiado estricto y nunca se le veía sonreír. Al entrar al salón, noto que era algo oscuro a diferencia del de transformaciones. En este había frascos con ingredientes por todas partes y algunos otros con pociones en su interior, sobre las mesas se encontraban algunos calderos, de los que salían algunos vapores de colores u olores diferentes.

― ¿Y qué fue lo que hicieron los gemelos ahora? ―se escuchó preguntar a Ron a Audrey.

―Pues, básicamente le jugaron una broma a Malfoy –Audrey hizo una mueca tratando de recordar algo ―amm ¿recuerdas? cuando le tiraron una especie de tinta morada a Charlie ―Ron asintió ―pues ahora imagina a Draco.

Juegos del DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora