Llegaron a la sala común de Slytherin, cuando los tres entraron, trataron de actuar normales y simular sus caras de asombro, al ver el interior de la sala. Era fría y se preguntaban si era la más oscura de las cuatro. Sobre la chimenea se encontraba el emblema de la casa de Slytherin, por las ventanas se podía ver las profundidades del lago negro, por un momento te pareció ver al calamar gigante. Imaginabas que la luz que entraba por las mañanas y las tardes debía ser, un poco verdosa, por la cantidad de vitrales que había con diferentes tonos de verde. A diferencia de la sala de Gryffindor, no tenía tantos adornos navideños, se podría decir que en la de ustedes había vomitado, un duende de la aldea de Santa.
-Pansy - Draco no te perdía de vista, por un momento olvidaste que eras ella - no piensas sentarte, oh acaso subirás, a escribirle a Zabini contándole que encontré...su...pequeño obsequio para T/n.
En ese momento Harry y Ron te miraron por el rabillo del ojo, Draco de verdad parecía molesto por eso, ahora entendías porque estaba tan preocupado cuando te encontró. Le preocupaba que hubiera llegado a ti el regalo de Pansy, aunque no sabías de lo que se trataba, era obvio que podría resultar peligroso.
-No, no pienso escribirle a Zabini - lo viste directamente a los ojos y caminaste hacia la sala para sentarte junto a Harry y Ron - es...una pena que no dejaras que mi obsequio llegara a Evans...yo que pensaba hacer las paces con ella - respondiste de forma sarcástica.
-Sabes, hay días en los que quisiera creerte eso de..."hacer las paces" - recalco Draco, que caminaba directamente hacia ti, por un momento su rostro quedó a tan solo unos centímetros del tuyo. Miro a los chicos y regreso a sentarse frente de ustedes. - Saben es increíble, que los Weasley sean sangre limpia, por como son avergüenzan al mundo de la magia, todos...- en ese momento tú y Harry notaron como Ron apretaba los puños - ¿Qué te sucede Crabbe?
-Comí mucho - contesto Ron, que trataba de tranquilizarse.
-Oigan, me sorprende que el diario el profeta, no haya informado de los ataques, supongo que Dumbledore lo ocultara al mundo - Harry y tú se miraron, solo pensaste que posiblemente a eso se debía la última visita de Alex - mi padre dice que Dumbledore es lo peor que le pudo pasar a este lugar.
- ¡No es cierto! -Exclamo Harry, en su rostro se podía ver la ira, de un momento a otro Ron volteo y le dijo un leve "cálmate".
-¡Que!...- Draco se había levantado de su lugar de nuevo y lucia más molesto que antes, era bastante obvio que ninguno de sus amigos se atrevía a llevarle la contraria - ¿crees que hay alguien, peor que Dumbledore? ¿Quién? dilo - de inmediato empezaste a sentir un poco de tensión en el lugar, así que poco a poco empezaste a buscar tu varita, por si tenían que salir antes de ahí.
-Harry Potter - respondió Harry, algo en su voz te decía que le había costado algo de trabajo decir su propio nombre.
-Si Goyle...- Confirmo Draco, que parecía sentirse orgulloso ante esa respuesta - tienes razón San Potter ja, y como si fuera poco ahora lo creen el heredero de Slytherin -al parecer esto último le enfadaba.
-Pero...¿tú sabes, quien es el culpable? - pregunto Harry mostrando interés.
-No lo sé Goyle, te lo dije ayer - este les dio la espalda y camino a la pequeña mesa que se encontraba frente a ustedes, tomando un paquete que se encontraba encima de esta - ¿debo repetírtelo? ¿Esto es tuyo? - Harry solo negó con la cabeza y te miro. - mi padre me dijo que hace cincuenta años abrieron la cámara, no me dijo quien fue, solo que fue expulsado, y esa vez que la cámara fue abierta, murió un sangre sucia...creo que no falta mucho para que eso vuelva a suceder - la mirada y la forma en como contaba esto Draco, te parecían espeluznantes, jamás lo habías escuchado hablar, era bastante frio - la verdad...espero que sea Granger.
ESTÁS LEYENDO
Juegos del Destino
FanfictionAudrey Elizabeth Evans Fudge, se ha quedado huérfana y vive con su abuelo el Ministro de magia Cornelius Fudge. Su tía Elizabeth Evans trabaja en el ministerio y es una de las mejores hechiceras que hay en su campo. Este año es especial para ella...