Vuelvo a la habitación para recoger las cosas vitales. Cojo ropa de abrigo porque en el Norte aún hará más frío. Julian se ha quedado abajo preparando provisiones por si acaso.Rider entra en la habitación y se apoya contra la pared. Cuando le doy permiso entra y se tira en la cama. Rider nunca tendrá remedio. Al menos soy alguien en quien confía y es lo que necesita, aunque sin ser una de esas chicas.
Quizá por eso me ve como si fuese Kristine.
—Lo increíble es ver que mi hermano todavía cree que tiene alguna oportunidad por tenerte—es lo primero que Rider dice tras tirarse en la cama. Suspiro un poco mientras niego con la cabeza, intentando correr, pero sin saber exactamente cómo hacer las cosas. Sin tener ningún tipo de control sobre los actos de Dalton—. Intento ser bueno, pero Jena no confía.
—La entiendo—él alza un poco su cabeza, mirándome.
—Dime qué tengo que hacer para que me crea—suspiro entonces.
—No lo sé—es la única respuesta que puedo darle—. Deberás ganártela.
—Cree que te adoro, supongo que eso enzarza todavía más la situación—no sé qué parte de eso era mentira. Rider me admiraba, como rebelde, como leyenda, pero lo hacía, sin lugar a duda—. Estoy contigo porque creo en ti—es lo que Rider me dice, sentándose en la cama. Sus palabras duelen y estallan de sinceridad—. Porque creo que tú eres justa. Porque creo que eres una buena persona en un mundo corrupto. Tú eres mi líder—alzo un poco las cejas. Rider me veía como a una líder rebelde.
—Soy una mierda de líder—termino sentándome a su lado. Él me mira desde el único ojo que le queda—. Soy la líder que te ha roto...
—Y también a la que casi me follo, lo cual no está nada, pero que nada mal—le doy un buen golpe en el brazo. Se queja entonces.
—Cállate.
—Eso es lo único que sabéis decirme—no es una mentira. Pero Rider no me ataca. Él sabe calmar la situación con su humor. Julian me calmaba de otra manera, pero Rider es capaz de hacer olvidar a cualquiera la mierda—. Si algún día te casas con Julian, quiero ser yo el que te lleve al altar—es lo que me pide él. No sé hasta qué punto eso es una broma.
Me río entonces, lo que hace que él también se ría. Supongo que esto era lo que yo necesitaba para no desmoronarme.
—Tú me ves con un anillo en el dedo y casándome, joder Rider—él sonríe un poco. Guardo la ropa en la mochila rápidamente. Suspiro un poco mientras recojo. Rider se levanta y empieza a ayudarme, pasándome cosas—. ¿Cómo van las cosas con Careg?
—No lo sé, ¿Cómo las llevas tú con Dalton?
—No seas un capullo conmigo—él se encoge de hombros—. Quiero proteger a mi hermano pequeño... y quiero darle una paliza a mi hermano mayor. No sé si está bien preguntarte esto, pero en esos casos... Tú tenías dos hermanos...
—Kris siempre se metía en líos—me asegura Rider, pero me doy cuenta de que habla de ella sin hundirse—. No es que fuese muy amable con mi hermano para protegerla a ella—la mano de Rider se queda sobre el piano blanco de pared—. Pianista.
—Recuerdo que casi le acuchillas la mano—Rider se ríe entonces, repasando el piano.
—No iba a hacerlo.
—Dabas miedo.
—Es el mejor cumplido por tu parte—y la mano no se retira del piano.
—¿Sabes tocarlo? —le pregunto, pero Rider niega.
![](https://img.wattpad.com/cover/26778865-288-k288181.jpg)
ESTÁS LEYENDO
La Marca del Ejército (#LMDLR2)
Ficção CientíficaSEGUNDA PARTE DE LA MUERTE DE LA REVOLUCIÓN. ¿Qué estarías dispuesto a sacrificar por lo que más deseas? Tras la ida al Imperio, Alexia cree encontrar las soluciones a sus problemas al encontrarse con sus hermanos, los cuales viven a salvo en el I...