El cansancio acumulado me ha hecho dormir durante todo el viaje a casa, lo que agradezco, ya que ahora podré tener más resistencia para acompañar a mi hermano en el hospital, toda la noche si es necesario.
Tras pasar por el control policial, camino para salir en dirección a la sección donde me entregarán mi maleta.
Como no sólo traía una me tarda más de lo pensado. Sin embargo cuando ya las tengo en mi poder, salgo del lugar. Camino intentando mantener bajo mi perfil, para ello también he tenido que ayudarme con la vestimenta. Lamentablemente, la privacidad es algo que ya no está del todo bajo mi control, y que creo que aquí se les hará más difícil de respetar.
Mientras me movilizo hacia las afueras del aeropuerto observo como se encuentran algunas personas a la espera de sus familiares, mientras que otras sólo serán recibidas por un taxista que sostiene su nombre en un cartel. Por mi parte debo buscar uno que no tenga destinado a una persona, y pedirle que me lleve al hospital.
—¿Está libre? —pregunto a un chófer que pareciera buscar una carrera.
—Sí —responde.— ¿A qué sector?
—Suroriente —respondo.
—Bien —asiente.— permitame ayudarle.
—Gracias —esbozo una pequeña sonrisa tras entregarle una de mis maletas.
Comienzo mi camino tras el caballero. Nos toma al rededor de 10 minutos llegar a su vehículo. Una vez lo hacemos, le ayudo a subir mis pertenencias al maletero, y luego termino por subir mi cuerpo al auto.
—¿A dónde se dirige específicamente, señorita? —pregunta una vez se sube.
—Al hospital. Al hospital Dr. Arthur Brousse.
Cierra sus ojos a través del espejo retrovisor para darme a entender que partiremos.
Durante el camino me cuesta prestarle atención a mi alrededor. Mis emociones se hacen latentes, dificultandome el respirar. La angustia, la incertidumbre son todo lo que ocupan mi cabeza en estos momentos.
Sam
Mis ojos comienzan a abrirse con una enorme dificultad. Siento como al hacerlo, cada uno de los músculos de mi rostro se tensa y me hace frunzar el ceño ante el dolor. Intento soltar un quejido, pero es inútil, pues resulta aún más doloroso.
Comienzo a fijar mi vista, lo que me causa punzada en la cabeza. Frunzo el ceño nuevamente, auch. Las luces de la habitación en la que me encuentro me encandilan ¿dónde estoy?. Guío mis ojos a mi derecha y me encuentro a mamá con su cuerpo tendido en la orilla de... ¿una cama? Papá está justo detrás de ella, y en cuanto mis ojos se posan en los de él, se acerca a mí lado.
—Sam —una lágrima cae por su mejilla.— oh Sam —su mano se dirige a mi cabello.
Quiero responderle, pero no puedo. Mamá despierta más rápido de lo que contaba, y se incorpora bruscamente al lado de papá.
—Oh cariño —más lágrimas aparecen, esta vez en su rostro.— oh, dios. Oh, gracias a Dios.
—Iré por los doctores —le dice papá a mamá. Ella asiente sin quitarme la vista de encima.
Observo como mi padre emprende camino a lo que asumo es hacia las afueras de la habitación.
—Todo estará bien, mi amor —ahora es ella quien acaricia mi cabello.— has despertado, y ahora todo estará bien.
¿Qué mierda ha pasado? ¿Dónde está Noah?
T/n
Le doy las gracias una vez más al señor, y con ambas maletas en mano cojo el aire necesario para movilizarme a la entrada del hospital.
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Cuando seas mía // Tom Holland & tú
Fanfiction_______ es una chica de 23 años que decide perseguir sus sueños de la mano de su mejor amiga, yendose a vivir fuera del país. En esta aventura se encontrará con las fantías que tenía desde que tenía 17 años.