Español

3.3K 227 238
                                    

Llegamos a la misma casa en la que estacionamos la vez anterior. Al bajar del auto, siento la brisa ponerse en contacto con mi rostro, y suspiro.

‐Aquí suele hacer más frío.

‐¿Más que en Londres? -lo miro incrédula-

-No es tanta la diferencia, pero, se puede decir que sí.

-¿A qué me has traído? ¿A morir de hipotermia? -bromeo-

-Tú has dicho que te gusta el frío -se encoje de hombros-

-Sí. El de mi país.

Sonríe divertido, y comienza a caminar en dirección al maletero, para sacar nuestros bolsos.

Después de insistir unos minutos, Tom me cede mi bolso, y soy yo quien lo entra a la casa.

-No pesaba nada -se queja-

-Por eso lo puedo yo.

-¿Te han dicho que eres cabezota? -ríe-

-Sí, sobre todo tú hermano. ¿También hemos venido para insultarme? ¿hablar de mis defectos? -actúo ofendida-

-Tranquila -suelta una carcajada.- sólo tenía curiosidad.

-Lo soy -le confirmo riendo con él-

Acomodamos las cosas en la sala de estar. Tom ha dicho que luego ordenaremos bien, pues, el itinerario que ha planeado se puede ver afectado si nos tardamos arreglando nuestros bolsos.

-Lamento que no podamos sentarnos un momento, pero, te prometo que valdrá la pena.

-Confío en ti.

-¿Comiste algo? -pregunta-

-No.

-Perfecto -sonríe.- iremos a una cafetería de por aquí.

-Dudo que sea mejor que la mía.

-Creeme que tienen competencia -sonríe-

-Eso estará por verse -lo miro desafiante-

___

La chica que nos ha atendido, trae entre sus brazos nuestra orden.

Una sensación de culpabilidad me invade. Mientras los chicos están trabajando, yo me encuentro como cliente en otra cafetería.

Deja el smothie de chocolate y naranja, junto los scones rellenos de crema frente a mí. Luego, deja tres croissant rellenos de chocolate, con un té frente a Tom. No puedo negarlo, todo se ve demasiado irresistible. Le agradecemos a la chica, y ella abandona la mesa sin dejar de mirar a Tom.

-Creo que le gustaste -murmuro-

-¿Celosa? -eleva una ceja-

-Tom, ya estaría muerta si tuviera celos por cada chica o chico que se te queda mirando -rio-

-Buen punto -hace una mueca.- ahora, prueba esas delicias. Verás que no miento sobre la competencia.

Lo miro un instante. ¿Cómo se puede ser tan guapo?, enserio me lo pregunto.

-Estoy esperando ver tu reacción -insiste-

-No tienes paciencia ¿eh? -sonrío y niego con la cabeza-

Cojo un scon y le doy una mordida. Entonces, como en ratatuoille una ola de sabores se mezcla en mi boca. Esta realmente exquisito. Con mi otra mano, acerco el vaso con el smothie para dar un sorbo. Podría tener un orgasmo en este mismo instante.

-Te lo dije -ríe Tom-

-Esto -guardo silencio para continuar tragando.- está realmente bueno.

Cuando seas mía // Tom Holland & túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora