Me cuidaré

1.4K 99 38
                                    

Tom

Su cuerpo tiembla por los sollozos que escapan de su boca. Intento mantenerme sereno para ser su soporte, pero sé que ella no está bien y eso me asusta. En cuanto vi su imagen, supe que seguía sufriendo y alejarme como lo pidió mi hermano después de ver todo esto se me hará imposible.

—¿Tú... t-tú... –su voz es débil.— ¿Tú no me amas?

Su pregunta me toma por sorpresa. Observo como sus manos presionan sus piernas con fuerza, como una forma de contener todas esas ganas de continuar llorando.

—Yo...

—Tú no me amas ¿verdad? —esta vez me mira.— Porque sino, no hubieras hecho algo que pudiera lastimarme —con una de sus manos elimina las lágrimas que caen de sus ojos.— Tú... tú lo has dicho, Sam jamás haría algo para lastimarme porque realmente me ama. Eso es ¿cierto? tú... tú no me amas, tú dejaste de amarme y por eso hiciste lo que hiciste ¿no? —noto como comienza a alterarse.— ¿Esa es la razón? porque sino, no puedo... no puedo entender porque me hiciste eso, Tom –su mentón tiembla.— Sé que muchas veces tuve miedo, sé que muchas veces me equivoqué, pero, ¿Merecía eso? Si me amabas... yo... no... no, de seguro no me amabas, por eso...

—Te amo, t/n —suelto.— Yo... yo sí te amo.

—No entiendo, Tom —se aleja lentamente.— ¿Por qué?

—Me gustaría tener una respuesta a eso —el nudo en mi garganta se hace más fuerte.– tener una justificación para tener tú perdón, al menos sentir que merezco tú perdón, pero buscar una razón sólo hará que esto sea peor para ti.

—¿Hice algo mal? ¿Fue por lo de Sam?

–No, no —posiciono su rostro entre mis manos. Para mí sorpresa no se aparta.— Tú no hiciste nada mal, tú... no hay nada de malo en ti —esta vez las lágrimas que caen son las mías.

—Sólo quiero entender –musita.

—Estábamos alejados —ella asiente.— Habíamos cruzado una crisis importante, yo con lo de Sam, tú con lo de Sam... tú con lo de tú hermano, yo con mis grabaciones sintiendo culpa por no poder estar ahí para ti. Ambos sin tiempo, no... no hablábamos —ella vuelve a asentir.

—Pero... yo no quise besar a alguien más, yo quería que estuvieras... a mí lado.

—Por eso —guardo silencio mientras más lágrimas caen.— por eso no puedo darte una justificación a lo que hice, no existe.

—E-entiendo —sus manos se mueven lentamente hacia las mías y las aparta. 

—Quiero que sepas que siempre estaré arrepentido por haberte apartado y por haberte hecho daño. No lo merecías —sintiendo nuevamente el dolor de su lejanía.

—Gracias —su voz se apaga un poco más.— Creo que ahora sí... sí debería irme.

—No quiero.

Levanta su mirada para sostener la mía, lo cual, puedo ver que quema su interior.

—¿Mhm?

—No quiero que te vayas. No quiero que esta sea nuestra última conversación. Yo quiero... quiero estar para ti. Estoy preocupado, t/n.

—E-estoy bien.

—¿Has estado comiendo? ¿Durmiendo?

Como acto reflejo su mirada vuelve a abandonar la mía y guarda silencio.

—No estas bien —confirmo.

—Yo... yo tengo una nueva oportunidad aquí, Tom. Me han llamado aceptando mi propuesta —sonríe tímidamente.

Cuando seas mía // Tom Holland & túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora