Cuando seas mía // Tom Holland & tú

The truth untold

Tom

La respuesta tarda en llegar, pero llega.

—¿Tom? —pregunta extrañado.— ¿He olvidado algo en casa?

—¿P-podemos hablar? —intento sonar seguro, pero el temblor en mi voz me traiciona.

—¿Estas bien? —expresa preocupación.

—¿Puedo ir?

—Mhmm... claro.

—Gracias.

Sin esperar una respuesta pongo fin a la llamada.

No habrá pizzas.

Envío el mensaje y con la brisa golpeando mi rostro con fuerza, enfriando las lágrimas que siguen cayendo lentamente por mis mejillas, emprendo camino a la casa de mis padres. Supongo que, no importa cuánto crezca, si las cosas van mal, siempre buscaré refugio en ellos, en mi familia.

T/n

La figura de Lucinda se acerca con velocidad, pero no es la única, tras ella también se encuentra Joe.

–¿Q-q...?

—¿Creíste que no vendría en cuanto te escuché llorar? —pregunta un tanto ofendido. Mi mirada se mueve hacia la de mi mejor amiga, sin entender.

—Estaba trabajando —se encoje de hombros.— tenía que atender con el altavoz —mis mejillas se ruborizan.— Tranquila, sólo Joe escuchó —asiento más relajada.

—¿Por qué no vamos a mi departamento? —propone Joe.— allí pueden conversar y yo te preparo un moccha —me sonríe amablemente.

—Bien —afirma Lucy.— apoyo la propuesta.

Las lágrimas se disipan un poco al ver las sonrisas de mis amigos. Joe me toma de la mano y comienza a tirar de mí de manera suave para encaminarnos a las afueras del parque. Lucinda no tarda en incorporarse, y así es como termino caminando con uno de sus brazos rodeando cada uno de los lados de mis hombros.

Sam

El cuerpo de Tom se queda congelado en la entrada de casa con su rostro pálido y sus ojos enrojecidos.

—Hey, pasa —lo tomo del brazo, jalandolo hacia adentro. Casi como de un muñeco se tratara se queda a mi lado.

Cierro la puerta, y me giro hacia él.

—¿Tom? —Paddy lo observa estático. Más el mayor de nosotros no reacciona.

—Subiré con él —le digo al pequeño.— Aún no le digas a mamá que está aquí —Paddy asiente.

—¿Qué pasó? —murmura, ignorando el hecho que Tom escuchará de todas formas.

—No lo sé.

—¡Paddy te dije que no te fue...! —las palabras de mi mellizo se cortan al notar el rostro de nuestro hermano.— ¿Ha muerto Tessa? —pregunta asustado. Paddy se encarga de golpear la cabeza de Harry.— ¡Auch!

—Eres imbécil, estábamos recién con ella.

—Ah, yo...

Los movimientos de Tom hacen que guarde silencio. Por fin ha decidido reaccionar moviendo su cuerpo hacia las escaleras de casa.

—Te... veo... arriba, Sam.

Mis otros hermanos posan su mirada en mí, Harry tal como lo hizo Paddy en un inicio, busca respuesta en mí, pero aún no la tengo, por lo que, me limito a levantar mis hombros.

Sin dar más espacio a palabras de ellos, camino tras Tom, más no soy el único, Harry ha decidido acompañarme.

Tom