Ondina intenta pasar desapercibida pero al ser la linda hermanita de Cedric Diggory, no lo logra. Todos la siguen con la mirada a donde sea que ella vaya.
Lo que nadie sabe es que ella guarda a fondo un secreto muy grande, tiene que ocultar a su ver...
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NARRADORA
—¡Bella! Vamos a comer, ¡se me antojan unas sardinas! —exclamó Ondina manteniendo su boba sonrisa—¡Vayamos a la cocina! Me se un atajo.
—Aqua, ¿que rayos te pasa? —preguntó Bella mientras le jalaban el brazo haciéndola caminar apuradamente—
— No me pasa absolutamente nada. —se apresuró a decir— ¡Mira es aquí! —la hizo entrar por una puerta secreta que lleva a la cocina. Los amigos de Ondina le enseñaron los pasajes para entrar a la cocina. Helga Hufflepuff los creó ya que le encantaba comer en secreto luego del banquete— No hay nadie cerca, avanza.
— ¿Por que diablos quieres-
— ¡Por merlín! Mira todo esto... —suspiró Ondina mirando todos los moriscos que estaban frente a ella—
— ¿Te comerás el pescado crudo? —Isabella frunció los labios muy asqueada al ver a su amiga tratando de comerlos— Creo que será mejor que nos vayamos-
— Espérame... —Ondina elegía que comer hasta que sus ojos cayeron específicamente en un tipo de pescado— ¡Mira es pez espada! delicioso y crujiente... ¡como las galletitas!
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— Ok ya es suficiente. —tomó a Ondina por los hombros y se la llevó hacia las mazmorras Slytherin— Te voy a llevar a mi habitación, te ves incapacitada.
Isabella la llevó hacia la puerta de su sala común y luego de susurrar la contraseña entraron. Habían un par de personas.
— ¡¿Y está que hace aquí?! —dijo Pansy Parkinson, junto a ella estaban sus amigas—
— Yo la traje, y se quedará aquí. —bramó Isabella mientras iba junto a Ondina a las escaleras—
—¡No debe estar aquí! —chilló de nuevo Pansy mientras le tomaba del brazo a la Hufflepuff—
- Mira Parkinson, ella se quedará aquí por que YO lo digo. -Le dio su mirada amenazante.- Y cuidado le vayas a contar a Snape sobre que está aquí porque te juro que yo misma te corto la boca para que ya no chilles. -Volteo hacia sus amigas.- Y ustedes también se quedan calladas. -Las chicas asintieron asustadas. Bella subió un par de escaleras pero antes de adentrarse a los dormitorios volteo hacia Pansy y le dijo.- Ah y ese perfume que te pones huele a excremento de serpiente, con razón no le gustas a nadie. -Le mostró una sonrisa falsa.- Sueñen conmigo. -Se adentró junto a Ondina a los dormitorios.-
