Ondina intenta pasar desapercibida pero al ser la linda hermanita de Cedric Diggory, no lo logra. Todos la siguen con la mirada a donde sea que ella vaya.
Lo que nadie sabe es que ella guarda a fondo un secreto muy grande, tiene que ocultar a su ver...
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ONDINA DIGGORY
Volveré a Hogwarts de pura suerte. Luego de todo lo qué pasó en el departamento de misterios papá tardó mucho en decidir si dejarme ir era una buena opción.
— ¿Que haces? —me preguntó Layla sin levantar la vista de su revista—
— Alistando mis cosas, ¿no es obvio? —reí mientras cerraba mi baúl— Volveré a Hogwarts a terminar mis estudios.
— Ah, que bien. —me dijo arrastrando las palabras y pasando a la otra página.—
— ¿No me dirás lo peligroso que es?
— ¿Peligroso? Pff, para nada. Llevas en tu dedo una de las joyas más poderosas de la historia. Yo que tú no me preocuparía en si es peligroso o no.
— A veces creo que eres Slytherin... —me susurre a mi misma acercándome a ella y quitándole la revista muggle que me había regalado Hannah—
— ¡Oye! Iba en la parte buena. —se levantó del asiento queriéndomela quitar de vuelta—
— No. —guarde la revista— Tu me acompañarás al callejón Diagon a conseguir los libros que me faltan.
— Pero que flojera. —se quejó y se tiró en mi cama—
— Para ser joven no tienes nada de energía. —tome su tobillo y jale de el— ¡Vamos levántate!
De mala gana ella se levantó y se cruzó de brazos. Ambas bajamos con cuidado por las escaleras antes de acercarnos a la chimenea.
— ¿A donde vas Aqua? —Layla al escuchar la voz de mi hermano se hizo invisible—
