51. En los baños

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Todo el día me preocupe al no ver a Hani, nadie comentaba sobre el, nadie decía si había venido o no y precisamente hoy me tocaba como última clase junto a él. Todos los Arquitectos me llegaron a preguntar por mí falta y sin problema les respondí comentando el acto delictivo de esa institución dos casi gritaron como sus hijos se encontraban estudiando en ese lugar y buscarían sacarlos pues no permitirían atrocidades de esa magnitud.

Tenía dos horas libre antes de mi última clase, así que camine a los baños donde intentaba retocar mi cabello y que no se mostrarán las ojeras que me cargaba, luego de muchos intentos y no lograrlo me di por vencido resoplando. Deje la mochila a un lado y me puse a revisar el teléfono frente a él espejo el cual me ayudaba a no sentirme tan solo, era bastante molesto verme a solas en un baño tan grande.

No tenía mensajes de Hani y aunque le hubiera mandado ninguno lo llegaba a recibir. En un momento note como alguien tapaba con fuerza mi boca y me estampaba a su cuerpo tocando mi miembro sobre el pantalón, intenté soltarme entre pataleos, para recibir casi al instante una nalgada que me hizo ver hacia el espejo notando como la persona que me tenía retenido no era nada más que mi novio, sonreí un poco bajo su mano para empinar mi trasero y moverlo frente a él, recibiendo otra nalgada que si no hubiera sido porque tenía tapada la boca hubiera gritado.

- No sabes lo mucho que te extrañe, orugita, te deseaba tanto - destrabado mis pantalones, bajando estos junto a la ropa interior, dejándome a la vista de todo el que pudiera entrar - te tengo mucho que contar.

Sentí como sus dedos se adentraban a mi, dejándome en el limbo al no esperarlo y sentir como sus dedos embestían con fuerza, aunque fuera fuerte y sin control no me había hecho daño alguno en el caso contrario me llevaba al éxtasis. Sentía como sus tres dedos dentro de mi llegaban a ese punto el cual el lograba encontrar y hacerme ver el cielo, gemía sobre su mano y mis lágrimas escurrian por mis mejillas en reclamos de necesitar más.

Al no sentirlo más en mi interior hice un sonido de reclamo el cual solo le causo gracia, sin soltar mi boca soltó sus pantalones dejando a la vista su gran y gordo miembro que escurría por adentrarse en mi interior, sentía como entraba cuidadosamente mientras me sostenía del lavamanos intentando mantenerme en pie.

- He hablado con mis padres - ¿Le era buen momento para hablar? - le he dicho sobre nosotros.

De un golpe se dejo entrar en mi interior, haciendo que gritara de placer al sentir como casi mi corría, sus embestidas eran fuertes y tan marcadas en ese delicioso puntos, tenia una de mis piernas subidas a la isla de lavamanos, abriéndome lo más posible para él. Su gran miembro era la gloria, las embestidas eran rápidas y mientras gritaba, lloraba y suplicaba lo veía jadear por más reflejado en el espejo donde veía las gotas de sudor rodar por su cuerpo, un grito lo hizo liberarse haciendo que en el acto lo acompañará.

Creí que nos detendriamos pero las embestidas seguían llegando a mi interior, donde pude volver a sentir como se empinaba y seguíamos en el frenesí de deseo.

Seguimos por un largo tiempo proporcionándonos placer, en diferentes posiciones, diferentes intensidades, gemidos y gritos de placer que nos llevaban a pedir por más, cuando ya no pudimos más preferimos quedarnos recostados en el suelo del baño, tomando todo el aire que nos fuera posible.

- Mis padres están molestos - levante la mirada de su abdomen para verlo a la cara y expresar intriga - les comenté que eres mi pareja y puedo decir que no esperaba su reacción, me han dicho que no aceptaban mi decisión pero no por eso dejarían de ser mis padres y ser personas las cuales te tienen aprecio, solo que no querían que tratará este tema con ello de nuevo.

- oh! Me has dicho que Kile, Leticia y Zelinda también se encontraban, verdad? - me senté sobre su pelvis, con las piernas a cada lado recorriendo su torso con los dedos, delineando cada área intentado gravar cada parte de su cuerpo.

- Si, Leticia le revelo a mamá y a Kile que es nuestra hermana y quien fue su madre, te imaginas que nuestra madre no se encuentra muy alegre de la noticia - tome su miembro y comencé a recorrerlo,  lo conocía bien, pero me encantaba notar como sus venas se resaltaban mientras su gran pene se enduraba entre mis dedos - ahora mi padre estará viviendo en un hotel, al menos hasta que mi madre lo llegue a perdonar. 

- ¿Qué tal se lo ha tomado Kile? Imagino no es tan fácil asimilar tener una hermana mayor y que se entere hasta ahora - mi entrada aun se encontraba dilatada así que al tenerlo listo entre mis manos deje que entrara nuevamente en mi, haciendo pequeños rebotes, llegando casi al instante a ese punto tan delicioso - nunca me cansare de esto.

- ¡Ah! Sigue - sus manos llegaron a mi trasero haciendo que me moviera mas rápido, haciendo que mis gritos se dejaran escapar - yo no me canso de tu culo, de este deliciosos hoyo que me recibe de manera tan deliciosa. 

Seguíamos gimiendo y jadeando, sentía que estaba totalmente lleno de semen, pero no soportaba quedarme sin más.

- ¡Oh, por Dios! Ustedes no pueden dejar de coger ni por unos minutos - observe hacia la puerta del baño, mientras Hani seguía tomando mi trasero haciendo llegar su gran pene hasta mi interior, frente a mi estaba una chica de estatura pequeña con un vestido turquesa, tenis desgastados negros y dos trenzas que caían sobre sus hombros teñidas de color lila.

- Lili ¿nos darías un poco de privacidad? - no me salían las palabras entre tantos gemidos pero tal parece que Hani si la conocía.

- Vamos, que les quedan - vio por un momento su teléfono, decorado con calaveras - quince minutos para coger rico y que tu tengas que impartir una clase, ahora mientras ustedes siguen cogiendo yo entrare ya que no aguanto las ganas de entrar al baño. 

Me corrí casi al instante que ella entro a uno de los cubículos al sentir como Hani volvía a llenar mi interior y a robar mis labios en un fogoso beso.   

- Te presento al hermano menor de Zelinda - mire a mi novio con una sonrisa al recibir la respuesta de quien era la chica que se encontraba con nosotros en el baño - a venido a estudiar en esta universidad, realmente no entiendo con que intenciones. 

- Pues te aseguro no era para verte coger sin descanso y con los baños - salió del cubículo y se quedo recostada en una de las paredes viéndome con una sonrisa la cual me causaba escalofríos - mis padres quieren que me case con un disque conde, yo no quiero y mi hermana se encuentra aquí así que he venido a ser yo mismo. 

De un salto me levante, haciendo que Hani saliera de mi con un jadeo y los chorros de semen comenzaran a recorrer mis piernas.

- ¡Eres un chico! 

- ¿¡Si!? ¿Y?

- Estas vestido de mujer.

- Y tu coges en los baños y nadie te dice nada. 

Solo Dame Más! (Gay Love)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora