Capitulo 3: habitación 23

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Capitulo 3: habitación 23

Malia Marquez...

Malia estaba revisando algunos análisis de sangre en el laboratorio, sus compañeras estaban de un lado a otro llevando pruebas. Suspiro y arreglo sus lentes, su pelo castaño iba en una coleta alta la cual soltó debido al cansancio, resoplo y se levantó de su silla.

-malia ve a atender al donante 32, está en habitación 23 con el otro grupo- dijo una de sus compañeras.

-está bien- dijo sonriente.

Se levanto de su silla y camino hacia la habitación, mientras caminaba pensaba en lo gracioso que era, le parecía irónico el número de paciente y el número de habitación.

Quizas 32-23 significara algo muy importante.

Pensó con una sonrisa en su rostro. Llego a la habitación, abrió la puerta y fui directo hacia el donante 32, se acercó a él y empezó a quitarle la intravenosa.

-Hola-dijo este saludándola.

-Hola- malia le miro a los ojos.

Sus ojos eran de un color azul muy precioso casi gris o grises con tono de azul, un tono tan llamativo como hipnotizante, su pelo era castaño con toques dorados, su barbilla estaba marcada, sus labios eran carnosos y pequeños, tenía una nariz muy refinada y elegante, su piel era clara, se veía de un cuerpo muy entrenado con solo ver su antebrazo te dabas cuenta, ella se mantuvo mirándole atentamente.

-Elay walton-dijo este sonriente- tu eres? - le pregunto sacándola de su trance.

-malia marquez- respondió y siguió con su trabajo.

Se sintió avergonzada de su atrevimiento, como pudo distraerse de su deber por un simple cara bonita. aunque debia admitir que no se veian caras como esa a diario.

-nunca te había visto antes... eres nueva? -dijo elay mientras mordía su labio inferior de manera pensativa, era una costumbre que había adoptado por los años.

Malia le miro asintiendo sin mencionar palabra, tomo la aguja para la próxima intravenosa e hizo el procedimiento para inyectarle. Seguido de esto saco un bolígrafo y se sentó en la silla al lado para anotar algunas cosas.

-tipo de sangre? - le pregunto elay a malia.

-disculpa? - respondió con otra pregunta debido a la sorpresa- ah! su tipo...-dejo la frase en el aire.

Elay se rio un poco – sí, que creías? ¿Parezco un vampiro? - respondió.

-olvídelo-dijo malia avergonzada- tipo de sangre?

-O negativo- 

-de acuerdo-anoto en los papeles- esta no es tu primera vez donando...-dijo al leer el historial de este.

-no, llevo desde los 18 donando sangre- respondió elay sonriente.

-cuantos años tiene? - pregunto malia mirándole a los ojos.

-26.- respondió elay.

A pesar de su actitud juguetona y algo inmadura, elay walton era un hombre excepcional.

MDT: Mi querido entrometidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora