Eva Ivanov.
-eres una inmadura. -me dijo adrien mientras entrabamos a casa. -nunca sabes controlar tus amoríos.
-bájame. -le ordene.
-Eva no, estas heri- lo interrumpí.
-Apenas fue mi primer día y según tú, ya estoy en amoríos. -dije enfadada-no soy como tú que al ver las primeras piernas debajo de una falda Se te sube la actitud.
Me bajé como pude de sus brazos y empecé a caminar hacia la cocina.
- ¿Que paso? -pregunto malia al ver mi expresión, ella apenas había llegado del hospital y no tenía ganas de ver más sangre en el día, pero ella ya estaba acostumbrada a mis golpes- ¿estás bien?
-Si amiga, solo me estoy desangrando, ¿pero todo bien y tú? -respondí ganándome una mala mirada de parte de malia.
-Ven a curarte niña. -dijo sentándome en una silla del comedor- ¿qué paso ahora? -pregunto interrogante.
La cocina de la casa igual que todos los demás lugares de esta es bastante grande. tiene una isla en el centro de esta de un color blanco hueso y cerámica estilo piedra para darle un toque más rustico a la casa, junto con ocho sillas a juego, según naomi que fue la elegida para diseñar el interior del lugar era la mejor opción. Una nevera grande de color plateado adornaba un lado de esta con algunas fotos de nosotros.
-Ya nos encontraron o eso creo, uno de los tipos rusos o alemanes ya sabe nuestra ubicación-dije como si nada.
-lo más seguro es que no hagan nada. Ellos saben que cualquier movimiento en falso levantaría sospechas de parte de algún gobierno- dijo uno de los gemelos entrando a la cocina- y no estaba detrás de la puerta espiando, el si- señalo a su copia.
-solo un poco- sonrió.
Los gemelos gael y gabriel, ojos de color azul verdoso, tez bronceada según ellos, pelo castaño claro lacio peinado hacia atrás de una manera fresca y divertida, sus rostros tienen una forma muy marcada como si los mismos ángeles los hubieran tallado, de cuerpos bien ejercitados debido al fuerte entrenamiento que siempre han llevado acompañados de sus sonrisas perfectas llenas de carisma que hacen enamorar a cualquiera.
Alguien que no conociera a Gael y Gabriel se confundiría con mucha facilidad, pero gracias a un lunar en el pómulo derecho del gemelo menor podemos diferenciarlos.
-Fue lunar, yo no tengo que ver...- respondió Gael culpando a su hermano 3 minutos menor nombrándolo por ese lindo apodo.
-cierra la boca. - suspiro y le paso el botiquín a malia.
-Eva, debes tener más cuidado. esa herida no tiene un mes y aun esta débil. además, mira tú brazo mujer -respondió ignorando lo que le había dicho.
-Tranquila, eso sanara sin ningún problema –dije tratando de calmarla.
me quito la camiseta con cuidado quedando en sostén y me acomode mejor en la silla. Malia empezó a limpiar la herida con cuidado.
- ¿y cómo vas con Axel desde que llegamos a América están muy distantes? -pregunte curiosa.
-Quiere irse. -Respondió mientras preparaba el hilo para coser de nuevo la herida. -dice que lo más seguro es que sus padres ya estén muertos. joder ev los puntos-frunció el ceño. -te mueves demasiado niña, mira ese moretón en tu brazo, ¿con que te golpearon?
ESTÁS LEYENDO
MDT: Mi querido entrometido
أدب المراهقينLa confianza es un arma de doble filo, la curiosidad igual. Elias ya paso por mucho, vivió cosas que no le desearia a nadie al igual que eva, pero ya sabemos como va esto. El entrometido de Elias tratando de ser un héroe en la vida de Eva, se convir...