Incontrolable deseo

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Ava Smith*

Estaba en el desayunador de mi departamento tomando una taza de café y leyendo el periódico digital, mientras la chica del aseo organizaba la mesa para poner el desayuno, mientras estaba sumergida en las noticias los pasos notorios de Noah al bajar por la escalera hicieron a un lado mis pensamientos.

Mi hombrecito hermoso se abalanzó sobre mí y comenzó a depositar muchos besos por toda mi cara mientras que yo no paraba de reír por las cosquillas que él mismo me provocaba, mi hijo tiene 4 años, tiene una inteligencia increíble, estaba vestido y arreglado con su uniforme para ir al colegio, lo subí a mi regazo y le di un beso en su pequeña frente.

--¿Hiciste todas tus tareas?-- observaba sus ojitos con dulzura mientras que él jugaba con mi cabello.

¿Mami cuando papi vendrá a vernos?— mantuve mi mirada como la de hace algunos segundos, de solo mencionarlo al imbécil ese se me revolvía el estómago.

Cielo una pregunta no se contesta con otra— él me dio una sonrisa de lado.

Si mami anoche nana Celeste me ayudó hacerla- lo bajé de mi regazo y lo coloqué en la silla de al lado.

Bien debes ser un niño disciplinado como tu madre, y no sé cuando tu padre te vendrá a visitar— lo último lo respondí con desdén.

Terminamos de desayunar le pedí a Noah que se lavara los dientes mientras que yo me fui a recoger unos documentos y mi bolso, salimos de la casa y fui a dejarlo al colegio mientras que yo me dirigía a casa de mi padre.

La relación de mi hijo con su padre es muy linda no lo puedo negar a pesar de que estamos separados él siempre visita a su hijo cuando puede, lo lleva a jugar, a comer o a comprar juguetes, por ese lado no me puedo quejar.

Intenté en varias ocasiones enviarle el acta de divorcio, pero él la rechazaba sin medir palabras con mi abogado, decidí rendirme ante la idea, ya que tarde o temprano se cansaría de fastidiarme la vida.

Mi padre me había llamado antes del desayuno para pedirme que fuera a su casa con carácter de urgencia, no sé lo que tenga entre manos nada bueno puede ser, siempre se mantiene buscando la forma de que yo perdone a mi hermana, por mi parte pierde su tiempo intentándolo.

Me estaciono frente a la casa de mi padre, bajo del auto con mi bolso en las manos, toco la puerta y me recibe la chica del aseo, me da acceso y sin pensarlo entro a la sala y me recuesto en el sofá.

 Esperé durante 5 minutos cuando vi a mi padre bajar por las escaleras con una sonrisa de oreja a oreja, este señor que se trae entre manos, se acercó a mí me dio un beso en la frente y se sentó a mi lado.

Me alegra que estés aquí hija mía- sonreí un poco por su forma de hablarme.

Yo también me alegro de verte papá-  dije mientras acariciaba su cabeza.

El motivo de mi llamada es para informarte algo importante- me senté correctamente y puse una atención de escucha.

Y bien ¿Qué es eso tan importante?- se veía nervioso lo notaba por la forma en la que vacilaba sus dedos.

Me enteré de que estás buscando trabajo, sé que no lo necesitas porque estás bien económicamente, pero quieres buscar algo para entretenerte— sé que esto no viene por buen lugar.

Eso es correcto padre- respondí con detenimiento.

Sabes que tengo un amigo llamado Juan Miquel, pues él tiene una inmobiliaria llamada C&C home, esta es una fachada es una empresa anexada a la policía, ahí en esa inmobiliaria trabajan policías encubiertos los cuales venden casas a todo tipo de delincuentes para así poder atraparlos.- observé a mi padre de manera pensativa, no me gusta el rumbo por donde va la conversación.

¿Y yo que pinto en todo esto?- estaba confusa no entiendo que tengo que ver yo en todo esto.

En fin iré al punto, mi amigo necesita que lo ayudes en varias misiones que se llevaran a cabo-  me levanté del sofá y me puse a caminar de un lado a otro.

Papá sabes que yo no quiero volver hacer agente encubierto, la última vez casi pierdo la vida- en realidad esa era una de las razones por las que no deseaba volver a mi trabajo.

Entiendo tus razones hija, pero realmente necesito que me ayudes en esto le debo un favor es mi gran amigo, solo tienes que poner tus condiciones y listo, él las entenderá.— la idea de volver a mi antiguo trabajo me aterra no solo por mí sino por la seguridad de mi hijo.

Supongamos que acepto trabajar para tu amigo, ¿mi hijo estará seguro?- mi padre se levantó y quedó a mi misma altura.

Por supuesto que si, además tú eres sumamente inteligente, te adaptas a cualquier ambiente, sé que lo harás muy bien— asentí moviendo la cabeza y lo abrace recostando mi cabeza en su pecho.

Está bien padre tú solo dime donde y cuando podemos vernos tu amigo y yo— le di un beso en la mejilla de manera de despedida.

Me subí a mi auto y me dirigí a la oficina de mi abogado Junior, debía llevarle unos papeles y platicar de algunas cosas que este tenía que decirme. 

Llego a la oficina me queda a 10 minutos de la casa de mi padre, aparco cerca para no perder tiempo a la hora de irme, cojo los papeles en mis manos, me miro en el espejo de mi auto, me arreglo un poco el cabello y salgo de mi auto. 

Entro y enseguida me recibe la secretaria de mi abogado, ella me dice que espere unos minutos, ya que el abogado tenía un cliente antes de mí, luego de varios minutos de espera ella me hizo pasar a la oficina de Junior.

Buenas tardes, Junior— le hablaba con confianza, ya que habíamos obtenido una hermosa amistad fuera de lo laboral.

Te estaba esperando desde hace rato mujer— me dijo de forma burlona la última palabra.

Te traje los papeles que me pediste- se los tendí a su mano

Con respecto a eso, hay algo importante que debo decirte- mierda que no sea una mala noticia.

Por tu tono de voz siento que no debe ser nada bueno- me observó y por la manera en la que lo hizo supe que tenía razón.

Tu esposo dijo que de la única forma en la que él te daría el divorcio es si tiene la custodia total de Noah- mierda el muy pendejo sabe por donde joderme.

¿Entonces?- pregunté de manera interesante.

Sabes que a eso le tenemos solución, el único problema es que mientras peleamos la custodia el niño pasaría por un estado de confusión muy fuerte y lo primordial es la salud mental del pequeño.— tiene razón no tiene sentido que luche por el divorcio si la salud mental de Noah está en peligro. 

Pues creo que por el momento no debemos continuar con la demanda de divorcio- respondí con fastidio.

Me despedí de Junior miré la hora en mi reloj y ya era el medio día, debía ir a buscar a Noah al colegio, me dirigí al colegio y cuando bajé del auto vi la camioneta de Harry, más ganas de matarlo.

Enseguida Noah salió corriendo hacia mí ignorando a su padre, lo tomé en mis brazos y di un casto beso en su cabecita, Harry se acercó a mí en busca de cercanía, le dije a mi pequeño  que subiera al auto mientras que yo iba a poner unos puntos claros al miserable este.

Bien te la luciste con mi abogado- dije con los dientes apretados.

Ya sabes a lo que tienes que acceder si quieres el divorcio- juro que me estoy conteniendo para no darle un golpazo en la cara de idiota que tiene.

Me importa un culo lo que tú quieras, no tienes la calidad moral para pedirle a un juez la custodia de nuestro hijo- que se cree este pendejo, tengo las pruebas necesarias para refundirlo en una cárcel americana.

Giré dándole la espalda y me subí a mi auto, llegamos a la casa enseguida Noah subió a su habitación a quitarse el uniforme y yo le pedí a la chica del aseo un té para bajar el estrés que las últimas horas había obtenido.