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James Parker*

Después de la pequeña discusión que tuve con el padre de Ava el doctor me dijo que podía pasar que verla y eso hice, me encontraba colocándome una bata desechable junto con un cubrebocas y guantes.

Esperé a que la enfermera me diera acceso a la habitación de Ava una vez que me dijo que entrara, le agradecí y entré a la habitación.Ava estaba entubada me partió el alma verla en ese estado, me acerqué a ella, acaricie su vientre, no pude contener las lágrimas, ellas salieron por si solas.

—Por favor resiste un poco más, sigue luchando por nuestro hijo, tú puedes mi amor.— no podía pronunciar bien las palabras, tenía un nudo en la garganta.

—Yo no te dejaré nunca, siempre te cuidaré lo prometo.— me levanté, le di un beso en la frente para luego salir de la habitación.

No podía durar más de dos minutos, ella estaba en cuidados intensivos y el horario de visitas era muy restringido.Dejé 4 de mis hombres para que cuidaran de ella mientras yo iba a darle un último adiós a April, salí del hospital me subí a mi camioneta y salí en dirección a mi casa.

Al llegar subí a mi habitación, me quité la ropa que traía encima, no me di cuenta hasta que estaba frente al espejo del baño que yo estaba manchado de sangre, eso no me importó.Me di una corta ducha, me puse unos pantalones negros, una camisa negra, el reloj que Ava me había regalado para mi cumpleaños, me puse un poco de perfume y salí de la casa.

Llegué al funeral enseguida reconocí a los padres de April le di mi pésame, coloqué una flor sobre su ataúd, y me fui hacia donde estaban los chicos.Debo decir que cuando April llegó a la inmobiliaria era tímida, con el paso del tiempo fuimos tomando una hermosa amistad, yo siempre fui un hijo de puta con las mujeres, ella era diferente, me enseñó que no todo en la vida es sexo.

No voy a negar que me llegué a acostar con ella, pero siempre tuvimos claro que yo no podía tener con ella nada más que amistad y ella lo comprendió, dejamos de acostarnos meses antes de que Ava ingresara a trabajar con nosotros, a pesar de eso nunca dejamos de ser buenos amigos, es por eso que me duele su muerte.

Por qué la quiero y siempre la voy a querer, el funeral culminó muy rápido me despedí de todos y me fui en dirección al hospital debía quedarme con Ava, no sabía cuando ella podría presentar un buen avance, yo siempre he mantenido la fe de que ella despierte.

Siete meses después...

Tendremos una niña durante estos siete meses el doctor le ha estado haciendo exámenes y chequeando que todo esté bien, la bebé está sana, Ava no ha despertado y eso me impacienta mucho.

Hoy es el día en que mi hija vendrá al mundo, en estos meses he comprado una nueva casa más hermosa donde he organizado una habitación para cada uno de mis hijos, la esposa de mi tío me ha ayudado a decorar ambas habitaciones.

Estamos todos en sala de espera, la cesárea ha empezado hace 10 minutos, mi tía está a mi lado, Job está sentado en otro extremo junto a Mark y mi tío no deja de caminar de un lado a otro.Después de 30 minutos la doctora que llevaba a cabo el parto salió con una amplia sonrisa, eso me calmó.

—¡Felicidades, señor Parker acaba usted de tener a una hermosa niña!— dijo la doctora.  

Todos me abrazaron con lágrimas de felicidad, incluso yo mismo no podía creer lo que ella me acababa de decir, la doctora nos guio hacia el área donde estaban los niños recién nacidos.Mi hija era hermosa tenía mucho pelo de color negro, sus ojos era como los míos, tenía muchas pestañas, sus manos eran hermosas, todo de mi pequeña era hermoso.

—Y bien ya pensaste que nombre le pondrás.— dijo mi tío mientras observaba a mi pequeña.

—Cuando Ava despierte elegiremos juntos.— dije con esperanza.

—Hijo no quiero ser pesimista, pero si Ava dura años para despertar.

—Pues esperaré los años que sean necesarios, pero ella al igual que yo tiene derecho a elegir el nombre de nuestra hija, ella despertará pronto yo lo sé.

Job y Mark llenaron la habitación de Ava de globos y peluches los cuales decían "felicidades mamá", "eres la madre más hermosa del mundo".Estaba sentado en uno de los muebles de la habitación donde estaba Ava cuando vi a una enfermera que traía a mi hija.

Me levanté para tomarla de la camita donde ella estaba y la cargué entre mis brazos, se sentía hermoso, es una sensación que no tiene explicación, lágrimas de felicidad se asomaron, estaba viendo lo más hermoso del mundo y eso era mi hija.

Después de varios minutos con ella cargada la niña comenzó a llorar, sus gritos eran muy fuertes, estaba muy asustado porque no sabía que hacer, justo cuando iba a llamar a la enfermera vi como Ava movió uno de sus dedos.

Inmediatamente la enfermera entró y se llevó a la niña me dijo que estaba llorando porque tenía hambre y debían alimentarla. En cuanto a Ava el doctor comenzó a hacerle varios chequeo y llegó a la conclusión de que era buen indicio, me dijo que en cualquier momento ella podía despertar.

Incontrolable deseo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora