RAY (#2 M5C)

Capitulo treinta y cinco

¿Y si mejor nos regresabamos a mi casa?

Deja de huir.

¡No estoy huyendo! Solo...quiero ver a Dylan, es eso.

Claro, quieres verlo después de gritarle en la cara que no lo querías cerca por unas horas, porque tenías que pensar en lo que te había dicho.

Bueno, me puso de los nervios, ¿vale? Últimamente estoy muy estresada con todo y si...esto realmente es real, podría ocasionar problemas o quién sabe que otras cosas podrían pasar.

¿Piensas en que podría enojarse? Por favor, ¿le viste la cara? Le hacía más ilusión a él que a ti misma.

Ilusión puede que me hiciera, sin embargo, sentí un nudo de nervios en mi pecho que me agobió todavía más. No sabía ni como abordar el tema en el caso que fuese real.

Crecerá y veremos... perdón, sucederá y veremos.

Suspiré.

Odiaba mis conversaciones internas, me sacaban del sitio donde me encontrase para ponerme a cabeza en enorme con otras cosas.

«No debí haber venido, no debí ni siquiera pensar que esto era real»

Me repito una o tres vez mientras froto las manos en mis muslos por los nervios. Estoy sentada extrañamente demasiado derecha para mí gusto y eso solo significa una cosa que ya sé, estoy nerviosa. Muy nerviosa.

Miro todo alrededor y el nudo en mi garganta es más y más fuerte. No sé que pensaba al momento que si quiera dije que vendría y que él me apoyara. ¡Diablos! ¿Para qué vine? ¿Por una sospecha que seguramente ni es real? No puedo convencerme que no se real, pero tampoco puedo estar segura de que lo sea.

Las paredes blancas hacen que me sienta más incómoda al estar sentada aquí.

Los colores blancos no generan tranquilidad y tampoco son algo que ayude, no obstante, parece que en estos lugares en algo completamente normal hay blanco en todos lados. Miró la hora en el reloj de pared y empiezo a inquietarme, ¿por qué tarda tanto? ¿por qué si quiera estoy aquí?

¿Por qué, a pesar de que quiero, no me levanto y me voy?

No sé en qué estaba pensando en venir aquí y ahora la ansiedad me esta matando. Quería salir de dudas y, en vez de eso, estoy hasta el cuello de inseguridad. No es como si lo que me fuesen a decir aquí dieran un giro de ciento ochenta grados, sé que no será así, ya todo está dicho, yo todo se acabó y si es lo que creo que es yo sola puedo lidiar con esto, ¿verdad? ¿No es difícil no? 

De todas formas ya he lidiado con esta situación, no es difícil y tampoco está en discusión decirle la verdad, claro que no. Yo me metí en este embrollo yo sola lidiare, ganaré y saldré. Aún así, tengo demasiados nervios, yo no estoy preparada para esto y estar sola...bueno, sola he estado toda la vida.  Aunque últimamente sé qué no estaré sola. Menos en un momento como este.

Estoy sobre pensando las cosas, tengo que relajarme.

Debería haber aceptado el ofrecimiento de Yessica de acompañarme, estoy bien, bueno algo. Estoy sola, sin embargo, un poco de apoyo no era malo, un poco del sentido del humor de Yessica me habría servido.

Yess: ¿Está todo bien?

Samantha: No, se fue y no regreso, estoy empezando a inquietarme. Llevo aquí ya veinte minutos y quince, dieciséis segundos.

Yess: Oh sí que estás nerviosa, pero tranquila, debe estar dando el follón de su vida con su secretaria. ¿Es joven?