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James regresó lleno de barro, y con el rostro sucio pero contento mientras sostenía su escoba, abrió la puerta de su habitación mientras sostenía con su mano libre el Snicht dorado que había atrapado.

—¡Severus! ¡No vas a creerlo! ¡Atrape a la Snicht dorada y..!—James guardo silencio al ver que Severus no estaba en la habitación, fue al baño pero estaba vacío, sobre la cama había una enorme caja de chocolates, frunció el ceño ¿Dónde estaba Severus? Decidió darse un baño para luego cambiarse y salir en búsqueda de Severus.

Se ducho con prisa y se vistió con ropas cómodas pero decentes para salir, tenían también que subir al comedor y cenar.—Ah.. ¿Dónde estas?—Murmuró saliendo de la habitación, por suerte diviso a Severus al llegar a la sala común, estaba acompañado de un chico de cabello blanco más alto que él.—¡Severus!—James se acercó con prisa hasta donde encontraba su prometido y alzo la vista para observar al chico mayor.—¿Dónde estabas? Regresé y no te encontré.

Mulciber rodó los ojos Y se interpuso levemente entre ambos haciendo que James se tropezara y cayera.—Príncipe, gracias por aceptar mi invitación, dentro de unos días iré a Hogsmeade, te compraré algo.—Murmuró acariciando su mejilla.—Si alguien llega a molestarte, sólo tienes que avisarme ¿Vale?

Severus asintió levemente y Mulciber acarició nuevamente su mejilla y acarició con su pulgar sus labios.—Si, he gracias.

Mulciber sonrió y se marchó.

James gruño mientras se ponía de pie, junto a Severus regresó a la habitación.—¿Quién es ese tipo? ¿Estabas con él? No me agrada.

Severus guardo silencio por unos segundos hasta que finalmente hablo.—Bueno, es el hijo de un amigo de mi padre, esta en cuarto año, su apellido es Mulciber y bueno.. Él es así, es extraño.

James se mordió labios levemente.—¿ÉL fue quien te regalo los chocolates?—Preguntó con molestia.—Pensé que te quedarías aquí haciendo los deberes.

Severus rio levemente.—¿Qué es esto? ¿Estas molesto por que salí a dar un paseo por el jardín? Tu estabas jugando a Quiddicth, James y bueno.. Solo me faltan unas cuantas líneas y terminó.

James bufo, se acercó a Severus y le abrazó levemente.—La próxima vez me acompañaras a ver el juego, ese chico es extraño y no me gusta como te mira..—Murmuró—Por cierto..—James busco la Snicht que había atrapado.—¡Para ti!

Severus observó el objeto volador.—¿Lo atrapaste? Gracias..—Murmuró besando su mejilla.—Iré contigo la próxima vez, lo prometo.

James enrojeció hasta las orejas, sonrió contento y también le devolvió el beso, aunque de la forma que más le gustaba, en los labios.—Cuando me gradué, seré jugador de Quiddicth profesional, estaremos viajando por todas partes, Sev.

Severus guardo la Snicht y río levemente.—Pensé que querías ser auror, yo quiero ser profesor de pociones ¿Cómo podré trabajar si tendremos que viajar a cada rato?

James rodo los ojos.—¿Y por que tienes trabajar? Con lo que yo ganare será suficiente y si trabajas ¿Cómo cuidaras a nuestros hijos?—el Slytherin hablaba con tanta seguridad que hizo que el corazón del cabello negro se acelerará.

—¿H-hijos?—Tartamudeo, las mejillas del príncipe enrojecieron hasta sus orejas.

—Si, hijos.—James se quitó los zapatos para subir a la cama y espero que Severus le imitara.—si nos vamos a casar, también tenemos que tener hijos ¿No sería genial? Quiero que tengamos dos hijos.

Severus subió a la cama, y se llevó a la mano a la cabeza al sentir una leve punzada.

—¿Severus? ¿En verdad no quieres tener hijos conmigo? Pero si de niños te gustaba mucho la idea.

El futuro en el pasado I - IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora