El futuro en el pasado I - II

1.

Nota: Primer capítulo de esta nueva versión. :"D si bien, tenia planeado subir el 1 capitulo dentro de dos semanas. XD pues comenzamos hoy de nuevo.

Nota: versión alterna de viaje al pasado uvu (TODAS LAS OPCIONES GANADORAS SE REALIZARÁN)

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Capítulo I.

Severus despertó mareado después de quedar inconsciente al recoger una nota que había sido deslizada debajo de su puerta. —¡¿Pero qué mierda?!— intentó moverse, pero no lograba nada con esto, sus manos y piernas estaban atadas. —¡Potter! ¿Qué diablos estás haciendo? — se retorció como si de un gusano se tratase, sus palabras y movimientos pretendían ser amenazadores, pero en su lugar sólo dejaban ver su desesperación, el mencionado estaba en una de las esquinas del lugar y eso no le hacía ninguna gracia al mayor. Si bien la oscuridad reinaba, fue capaz de divisarle, nada más su presencia y el estado en que se encontraba no prometía nada bueno y acababa de ver la cereza del pastel, extrañas runas y símbolos dibujados a su alrededor.

—No es nada malo, Profesor. —La voz del chico era suave, y baja, incluso algo débil. —Cuando usted regresé, sálvelos a todos.

En los ojos negros pudo leerse genuina confusión. —¿Salvarlos? —repitió, a su vista llegaron también las figuras de Hermione Granger y Ronald Weasley. —¿Qué está sucediendo? ¡¿Qué estás haciendo, Harry Potter?!

La humedad en los ojos de Harry fue visible para Severus mientras los jóvenes tomaban una posición diferente, formando entre los tres una especie de triángulo. —Estoy... ayudando, quiero... arreglarlo todo, Severus. —Aquella, era la primera vez que Potter le tuteaba. —Y... aunque sé que no es correcto, necesito de su ayuda, Profesor. Sólo usted es capaz de hacerlo.

Una luz en el suelo hizo visible el triángulo imaginario. —No vayas a cometer ninguna estupidez, Potter. Suéltame y te juro que te ayudare en lo que sea ¡Detén esto!

Harry negó y le sonrió. —Usted me ayudará, cuando despierte lo entenderá. —Le susurró, sus ojos estaban más húmedos que antes. —Por favor, Profesor, ayúdame, ayúdelos.

El profesor ahogó un gritó cuando sintió que el suelo a su alrededor se hundía, el triángulo le estaba succionando—¡Potter! ¡Potter! ¡Detén esto! ¡Maldita sea! —Se sintió impotente, se sintió inútil. Tenía miedo. —¡Harry!

Lo único que vio antes de caer en una especie de oscuridad, fue la sonrisa de oreja a oreja en el rostro de Harry Potter, aquel bastardo que hace sólo segundos parecía querer llorar.

Se hundió por completo en la brumosa oscuridad y sintió un escalofrío, parecía como si estuviera cayendo de un alto precipicio, las ataduras en sus manos y pies parecían disolverse, giro su cuerpo buscando luz, pero sólo había oscuridad. Ni siquiera fue capaz de verse así mismo, ni siquiera había ruido, pero si podía sentir como caía con rapidez en aquel extraño vacío.

¿A dónde iba?

¿A dónde estaba cayendo?

¿Qué había hecho Potter?

Fue incapaz de procesar cuanto tiempo había pasado, pero aún caía... Aún estaba cayendo ¿Cuánto tiempo había pasado ya?

—Severus, cariño. —Una voz femenina llamo su atención, fue lo primero que escuchó después de horas de estar cayendo. —Sev, amor... el desayuno está listo.

 De repente todo se detuvo para él...Aquella voz... ¿Era su madre? Si... Era ella. ¡Era ella! —¡¿Mamá?!—Casi gritó, no pudo evitar sentir un hormigueo de felicidad en su estómago. —¡¿Mamá, donde estas?!— Incluso pudo escuchar un suspiro detrás suyo, se volteó buscando la fuente de este sonido y entonces una luz parecía estar brillando desde lo lejos.