El futuro en el pasado I - II

32.-

Fleamont no ocultó su felicidad, cuando una hermosa pelirroja cruzó las puertas de su humilde hogar en el valle de Godric. Ya habían pasado al menos dos semanas desde que las vacaciones de navidad habían iniciado y, era una grata sorpresa ver un rostro un tanto conocido en su hogar—Bienvenida.

Lily sonrió al hombre—Gracias, yo... he, vengo a ver a James—Murmuró al hombre—Somos compañeros en un proyecto que dejó el profesor de defensa contra las artes oscuras y, hemos acordado hoy en realizarlo.

El hombre asintió, y por suerte, su esposa apareció—Querida, una compañera de James ha venido a visitarnos ¿Por qué no lo buscas? —Le pregunto—Su nombre es..

—Lily Evans—Respondió ella con cierto nerviosismo.

Euphemia asintió, reconociendo un tanto a la chica. Subió las escaleras en busca de su hijo, mientras su esposo llevaba a la chica hasta la sala de estar.

—Entonces... ¿Son compañeros? Creo que te he visto antes-Murmuro con cierta pena. Eran pocos los compañeros de su hijo que lograba reconocer y, que conocía—¿Vas a Slytherin con James?

La chica negó, sintiendo sus mejillas enrojecer. Siempre sería algo intimidante hablar con sangre puras, aunque su amigo le había asegurado que sus padres no eran clasistas con la sangre—Yo, bueno, soy nacida muggle—Comento—Soy una Gryffindor.

La sonrisa de Fleamont se agrando aun mas—Comprendo, bueno, no te preocupes respecto a tu origen. Mi esposa y yo, no somos esa clase de gente—Murmuró tratando de calmar los nervios en la chica—Me alegra que James tenga amigos Gryffindor.

Lily asintió nuevamente—Si, bueno, el círculo de amigos de James no es tan grande, creo que solo se reduce entre Sirius, Remus, unos dos o tres Slytherin, Severus y yo.

El mayor frunció el ceño levemente—Severus, Severus Prince—Pronunció el nombre del chico pálido—¿Ellos son cercanos?

Lily se mordió los labios levemente, era notorio que al padre de James no le agradaba ni un poco Severus y, para ella era bastante incómodo. Se veía que era un buen hombre pero, ella consideraba al Slytherin su amigo, como si ambos se hubieran conocido mucho antes de entrar a Hogwarts. —Bueno... Para James, Severus es muy especial.

—¿Especial? —Repitió el Potter mayor—Ese chico lo único que ha hecho es amargarle la vida a mi hijo.

—No creo que Lily se haya tomado el tiempo de venir para responder tus preguntas, papá—La voz enojada de James hizo sobresaltar a la chica pelirroja.

Fleamont resopló y, con maldad murmuró—El único consuelo, es que pronto se casará con el heredero de los Mulciber.

La ira recorrió los ojos de James, Euphemia evitó que su hijo respondiera de forma airada.

—Prepararé algunos aperitivos mientras ustedes realizan su proyecto ¿Vale?

Lily asintió, se despidió del hombre con la mirada y, le sonrió nuevamente a la madre de James con esta. El de lentes se evitó de replicar a su padre, y tragándose su enojo, subió las escaleras hasta que su amigo y él, se encontraron a gusto en la soledad y seguridad de su habitación.

Lily, observó la recámara, era bastante diferente a lo que esperaba de james potter. Muchos libros regados, la gran mayoría de Medimagia, uno que otro Poster de Quidditch, incluso libros de medicina Muggle.

—Entonces ¿Estás planeando tomar mi lugar como insufrible sabelotodo?

James soltó una risita mientras buscaba los libros, pergaminos y tinta necesaria para desarrollar el proyecto escolar. Si bien ambos eran de diferentes casas, al profesor de DCAO se le había ocurrido la fantástica idea de que Slytherin y Gryffindor se unieran como equipo—Bueno...—Susurro—Quiero ser medimago, es algo que ya sabías, Evans.