El futuro en el pasado I - II

16.-

—¿Estas bien?—Preguntó Eugene a su hermano mientras compartían asiento en clase de historia de la magia.—Tal vez me pase un poco en la mañana. Lo siento, es que bueno.. Ya sabes, no me gusta ver a mamá tan.. afectado.—Susurró.—Y sigo molesto, se que sólo fue un ataque de irá pero, mierda. No vuelvas a gritarle, o te juro que ni Thomas podrá detenerme.

Henry ladeo la vista.—Yo, tampoco, mierda. Se que soy un idiota.—Murmuró y entonces observó al joven de cabellos negros y sonrió.—aún tampoco estamos tan lejos de casa.—expresó a su hermano y suspiró.—¿Crees que a Thomas lo habrán aceptado en los Chudley Cannons?—Preguntó cambiando el tema.—Papá enloquecería, dejaría tirado todos sus turnos en San mugo para celebrar.

Eugene asintió con toda seguridad.—Estoy seguro, además, mamá dijo que el equipo había sido maldecido, y que Thomas rompería esa maldición.—Expresó.—Nuestro hermano es muy talentoso, no lo dudes, cerdo.

Henry rodo los ojos, pensó en Thomas y sonrió.—Será interesante.—murmuró, la vista de su hermano se posó sobre sus ojos.—ya sabes, hablar con "él" no es lo mismo hablarle aún retrato que a la misma persona que con vida. Estoy seguro que a Thomas le hubiera gustado ya sabes, conocerlo después de todo era su padre.

Eugene se peino el cabello y posó su vista en Binns.—Al menos no regresó como un fantasma.—comentó.—papá se suicidaría.

Henry río y negó.

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James se las arregló para 1quedarse un par de minutos a solas con Severus, antes que iniciaría el almuerzo. Los dedos del Prince se aferraron a la túnica del Potter mientras sus labios se acariciaban.

Severus soltó una risita.—Eres inteligente para hacer cosas malas, James.—susurró besando sus labios.—¿Este lugar.. si es seguro?—Preguntó, no quería ser pillado por nadie, y menos por Mulciber.

James apreso su cintura sin apartar sus labios de los de Severus, sentía sus mejillas arder y no solo eso, su corazón, el cual latía absurdamente rápido mientras aquella bonita sensación de calidez se esparcía en su pecho.—Sev. Te quiero.

 Severus suspiró, rompiendo el besó.—Yo también, tonto.

<Potter están ridículo, pero disfruto esto, maldita sea ¿Por qué no puedo mostrarle esto al Potter que me jodido literalmente la vida>

<Ahora babea por mí, Ja! Maldito, puedo acostumbrarme a esto, prepara ese trasero Potter, voy a follarte>

Severus limpio los labios del joven de lentes segundos antes de dar el último besó, lo mejor no era confiarse. Y además, estuvo a punto de atragantarse por aquellos comentarios.—Bien, regresemos al comedor.

A James le hubiera gustado compartir un tiempo más a solas pero, entendía a Severus y también le molestaba, odiaba el hecho de que este estuviera unido de esa forma a Mulciber y, le aterraba el hecho de que dentro de poco ambos estuvieran casados.—Si yo..—Murmuró.—Si yo te pidiera que.. te escaparas conmigo ¿Lo harías?—Preguntó sin verle a los ojos.—¿Tu.. te irías conmigo?

Severus casi se petrifico al escuchar aquella petición. Se removió de un lado al otro, intercambiando el peso de su cuerpo en sus pies.—¿Por qué la pregunta ahora?

James le sostuvo de las manos haciendo que esos bonitos ojos negros le observaran.—Yo, no quiero que te cases con él, Severus. Quiero, que.. te cases conmigo.

El joven Prince tragó ruidoso, sus deseos eran los mismo pero..—Yo.. también quiero lo mismo pero, yo.. no puedo James.—Pronunciar eso fue algo difícil.—Regresemos al comedor ¿Si?

James apretó el agarré.—¿Es por tu padre? La señora Elena, estoy segura que ella podría convencer a tu papá y, aceptar nuestro matrimonio, Sev.—La propuesta no era descabellada.—Yo.. yo, yo incluso hablaría con él, Severus.

Los labios del joven pelilargo temblaron. Ojala y las cosas sólo se solucionarán con el diálogo. Pero, tras su padre estaba Voldemort y, sabía que sucedía cuando alguien no cumplía con sus órdenes.

—Hablaremos de esto después, no en medio del pasillo.—Por ahora lo mejor de evitar el problema, aunque sabía que más adelante estallaría. No quería pensar en eso y en las futuras consecuencias, sabía que estaba engañando a Mulciber, que estaba jugando con fuego, y que lo correcto era alejarse de James Pero.. ¿Cómo podía hacerlo? ¿Cómo podía alejarse? Estaba enamorado.

James decidió dejar el tema en el olvido en ese momento pero, sabía que dentro de poco Severus y él tendrían que hablarlo con seriedad. Por mucho que le incomodara a Severus, tenían que buscar una forma, sólo una en la que pudieran estar juntos, y James estaba dispuesto hacer cualquier cosa para estar junto a él.

Regresaron sin conversar mucho al gran comedor y, tomaron asiento en puestos separados al notar que, Mulciber había aparecido, por suerte este, no pregunto nada al respecto, se veía algo agotado.

—¿Te encuentras bien?—Preguntó Severus mientras tocaba su mejillas, la piel del chico de cabellos blancos estaba fría.—¿Quieres ir a la enfermería?

Mulciber negó. No tenía apetito pero se obligó a comer, la mañana no había iniciado muy bien para él, las cacerías muggles era algo que para su sorpresa no disfrutaba.—Si, no te preocupes, príncipe.—Murmuró.

Severus no quedó con muy convencido con aquella respuesta.—¿Seguro?

Mulciber asintió, y beso la mejilla de prometido.—¿Sabes? Me sentiría mejor si.. vas a mi habitación está noche.—Si bien, la voz del chico fue baja, James logró escuchar perfectamente aquello.—¿Por favor?

Severus asintió, evitando imaginarse escenas de todo tipo. Llevó algo de la ensalada que había sido preparada para él almuerzo.—¿Estas herido?—Susurró a Mulciber, viéndole a los ojos.—¿Fuiste a.. bueno, ya sabes...?—El Prince no era un idiota.

Mulciber no respondió a tales preguntas, la verdad no quería pensar en eso, ni mucho menos preocupar a Severus. Observó entonces a las dos nuevas adiciones de su casa.—Un pajarito me dijo que comparten habitación con Potter, ¿Fue un buen anfitrión?

Henry sintió un escalofrío al escuchar su voz.—El mejor de todos, señor.

Eugene asintió, ganándose la curiosidad del pelo blanco.—¿Señor?—preguntó.

Mulciber deslizó su brazo sobre los hombros de Severus y busco sus labios, dando un rápido beso sobre estos.—Tienes cierto parecido a mi prometido pero, Merlín, no te molestes ¿Vale? Pero mi Severus es mucho más hermoso que tú.—comentó.—Oh por cierto, soy Mulciber.

—¿Sólo Mulciber?—preguntó Henry.

—Es mi apellido.—Comentó el de séptimo año. No le gustaba su nombre lo sentía demasiado ridículo.—¿Por qué? ¿Es un problema para ti?

Severus le dio una especie de pellizco para observar al par de hermanos.—Su nombre completo es Thomas, Thomas Alexander Mulciber.

El albino frunció el ceño.—No tenías que decirlo.

Severus jalo un mechón de su cabello blanco.—Te lo he dicho un montón de veces, me gusta tu nombre.

El slytherin beso el cuello de su prometido, ansioso de que la noche llegará, observó a Potter, si bien. Este estaba haciendo una gran tarea en ignorarlo aunque estaba seguró que escuchaba todo lo que decía.—prométeme que a ninguno de nuestros hijos le pondrás mi nombre.

Severus evitó mirar a James por impulsó y no respondió a dicha pregunta.

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🤔🤔🤔 ¿Teorías?

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