Es extraño ambos creían que sus vidas ya no volverían a juntarse.
El creía que la odiaba.
Ella tenía que soportar sus malos tratos.
Ella veía como el le daba toda su atención a una nueva chica... la atención que una vez fue para ella... la atención...
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El clima en las calles de Seul era cálido, el sol iluminaba las calles y brindaba su calor a los habitantes. Aunque este no era el caso de Yang Mi.
-¡ACHU! no creo que alguien se este acordando de mi tan temprano.
Se dijo a si misma al ver que era su cuarto estornudo que llevaba en la mañana, desde antes de irse a dormir, sintió unos leves escalofríos pero no le tomó importancia hasta que amaneció con estornudos.
Tomo su mochila para irse a la escuela, para afuera de su departamento encontrarse con Min-Ho esperandola, inmediatamente una sonrisa se formó en los labios de ambos.
-Vamos.
Dijo Yang Mi a lo que Min-Ho asintio, mientras salían del edificio.
-Estaba pensando Yang Mi, ya que tu pase de autobús se perdió iremos en taxi. Yo lo pagaré
-Ah sobre eso, ya lo encontré estaba en la bolsa pequeña, pero te acepto, irnos a la escuela en taxi, creo que será más rápido.
Y así fue ambos abordaron un taxi mientras, en el camino Yang Mi soltaba pequeños estornudos aunque según ella los "disimulaba", para que Min-Ho no se diera cuenta.
-¿Estas bien?.
-Si Descuida alomejor es una alergia o algo así, no debemos de preocuparnos.
Le dijo a Min-Ho quien la veía nada convencido ante su respuesta. Por lo que Yang Mi decidió cambiar de tema.
- Aproposito Min-Ho ¿Que era lo que tenías que arreglar ayer?.
Min-Ho se puso nervioso, eso se podía notar fácilmente. Pero rápidamente lo disimuló.
-Fui a arreglar unos papeles de la casa, para que todo estuviera en orden. Y se tardaron más de lo previsto, fue muy aburrido.
Dijo con una sonrisa, intentando ser lo más convincente posible.
-Me hubieras dicho que era eso, yo pude haberte acompañado, estoy acostumbrada a hacer los trámites sola, pude haberte ayudado, nos hubiéramos evitado tantas cosas que pasaron anoche... además puede que así no te hubieras aburrido tanto.
-Tienes razón, aunque no quería molestarte.
-Tu no eres una molestia Min-Ho si necesitas algo puedes contar conmigo. Siempre estaré para ti.
Dijo Yang-Mi, mientras Min-Ho desviaba la mirada ante sus palabras y es que no podía evitar sentir culpa al saber que le había mentido a Yang-Mi en casi toda su historia.
¿Yang-Mi se quedaría conmigo aún después de todo?, ¿Como reaccionaría ella si se entera de la verdad?, ¿Mantendra su palabra "siempre estaré para ti"?. Esas preguntas rondaban en la cabeza de Min-Ho. Preguntas que no paraban de repetirse desde el momento que escucho de la boca de Rose, que Baek estaba en Seul sintio de nuevo esa presión en su pecho que había sentido años atrás.
