Es extraño ambos creían que sus vidas ya no volverían a juntarse.
El creía que la odiaba.
Ella tenía que soportar sus malos tratos.
Ella veía como el le daba toda su atención a una nueva chica... la atención que una vez fue para ella... la atención...
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Un suspiro fue lo único que salió de los labios de Baek, mientras veía con atención a Yang-Mi, quien le miraba con una sonrisa.
-¿Está todo bien?. -Le cuestióno ella al ver su actitud, por lo que el rápidamente asintió con una sonrisa.
-Es solo, que no pensé que hubiera tanta gente, me molesta hacer fila. -Solo el a lo que Yang-Mi asintio.
-Ya veo, he escuchado demasiado de este restaurante, y la verdad es entendible es de los pocos restaurantes de comida extranjera en Corea.
-Minimo espero que la comida valga la pena.
-¿Ustedes solían comer mucha comida de distintos países? -Cuestiono Yang-Mi.
-Algo así, mi tío casi siempre sale a dar conciertos, por lo que siempre comíamos distintos tipos de comida.
-Debes de ser genial eso, ahora entiendo de dónde Min-Ho, conoce como preparar tantos platillos.
-No es tanto eso, cualquiera puede hacerlo.
-Eso no es cierto, yo he intentado hacer los mismos platillos que Min-Ho, hace y no me quedan igual que a él, Min-Ho, tiene una especialidad para hacer los platos... El es magnífico.
Baek, rodó los ojos ante las palabras de Yang-Mi, el solo hecho de escuchar a alguien alabar a Min-Ho, le provocaban ganas de vomitar, es que simplemente no podía entender como alguien podría a querer a un ser tan despreciable cómo lo es Bae Min-Ho.
-Mira ya está avanzando la fila, yo creo que entraremos pronto. -Hablo Yang-Mi trayendolo de vuelta a la realidad, más sin embargo está vez no se contuvo demasiado.
-¿Porque quieres tanto a Min-Ho?. -Hablo bruscamente, aunque esto paso desapercibido para Yang-Mi.
-Lo amo por muchas razones, son tantas las razones que no me caben en la boca.
-¿Y que pasaría si te enteras que el no es quien tú crees?... Es decir si te llegases a enterar que cometió un grave error en su pasado.
-Todos cometemos errores nadie es perfecto, así que quién soy yo para juzgarlo, si el me a aceptado con mis errores yo también lo haré, creo que los dos podemos ayudarnos a mejorar como personas.
-Listo tenemos una mesa disponible para dos. -Escucho a la señorita de la recepción asi que ambos asintieron.
Baek, respiro profundamente mientras se repetía mentalmente que tenía que controlarse, si no todo el plan se iría por la borda.
Necesitaba a Yang-Mi, para destruir a Min-Ho, y para eso necesitaba ganarse su confianza, si seguía cometiendo tales errores, Yang-Mi comenzaría a sospechar.
Baek, sonrió y se dirigió a Yang-Mi, quien miraba con atención el menú.
-¿Necesitas ayuda para saber que ordenar?. -Le cuestióno.
