Capitulo 17

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La morena había llevado a Val a su primera cita, al principio no tenía idea de a dónde llevarla, pero al pensarlo mejor se había decidido por una cena a la luz de la luna, solo ellas dos con la luna de testigo, el mar y la arena, no había una cosa mejor que eso definitivamente.

Juls había estacionado el Jeep un poco lejos del lugar en donde estaba su mesa en la playa.

J: necesito que te tapes los ojitos un momento. - dijo mientras se desabrochaba el cinturón de seguridad.

V: ¿Es neta?, No Juls. - habló sonriendo sin creerse lo que Juliana le decía.

J: por favor, Val. - le suplicó. - solo será un momento.

V: está bien.

Bajaron del Jeep y se dirigieron al lugar donde sería su cita, la castaña se había tapado los ojos con sus manos asegurando que no haría trampa y la artista la iba dirigiendo para que no tropezara.

Al llegar al frente de la mesa la morena le pidió a la ojiazul que descubriera sus ojos.

V: Juls... - fue lo único que pudo decir, estaba realmente sorprendida, frente a ella estaba una mesa y dos sillas, en la mesa había un mantel blanco, dos velas, un ramo de flores rojas y blancas y comida. - esto es hermoso. - dijo tapándose la boca de lo sorprendida que seguía. La miró y luego la abrazó, Juls le correspondió el abrazo de inmediato.

J: quería hacer algo especial para nosotras dos juntas. - le habló al oído a Valentina. - no habíamos tenido tanto tiempo para pasar juntas.

V: es perfecto. - dijo al separarse del abrazo.

J: que bueno que te haya gustado. - se dirigió a la silla que sería de Valentina para retirarla de la mesa y que Val pudiera sentarse. - ven... - dijo estirando la mano para que la castaña fuera hacia ella. - siéntate aquí. - habló cuando la chica le tomó la mano.

V: gracias. - dijo cuando ya estuvo sentada, Juliana también se fue a sentar al que era su lugar. Al estar cada una en su lugar hubo un pequeño silencio, había nervios por parte de las dos.

J: ¿quieres comer?. - dijo rompiendo el silencio.

V: si.

Cada una tomó lo que más le gustó de lo que había en la mesa, mientras comían hablaban distintas cosas, alguna que otra vez se miraban y sonreían acompañadas con el ruido del mar de fondo. Ninguna de las dos había tenido una cita, la artista quería hacer algo especial para la persona que más amaba en ese momento, jamás en su vida había hecho ese tipo de cosas y le pareció que sería una muy buena idea que la ojiazul fuera esa primera cita, porque de verdad la amaba y no sabía cómo decírselo con palabras, tal vez sería una buena oportunidad decirle en su primera cita que la amaba, pero tal vez no, no quería espantarla, no quería que terminara algo que apenas iba empezando.

Por otra parte Val tan solo pensaba en lo afortunada que estaba siendo en ese momento, antes de la morena no había tenido algo así con nadie,no había citas ni nada que implicara un sentimiento romántico, y ahora sabía que amaba a Juls, porque cada que estaba con ella su corazón se aceleraba y se sentía emocionada, ahora en ese instante se sentía completamente amada, todo era perfecto.

J: ¿Quieres que nos acerquemos a la orilla del mar?.

V: vamos, Juls. -

Cuando llegaron caminaron por toda la orilla tomadas de la mano.

V: todo se ve muy hermoso, las estrellas se ven hermosas. - dijo viendo las estrellas.

J: si, todo se nota más.

V: tu también te ves hermosa. - habló con una gran sonrisa en la cara.

J: ya lo sabía. - en realidad solo quería ocultar lo sonrrojada que se sentía por eso, casi no recibía ese tipo de cumplidos de esa manera. La castaña sonrió, sabía perfectamente como era Juliana, a ella no le iba a ocultar que estaba sonrojada.

V: te sonrrojaste.

J: ¿Qué?... No. - volteó su cara hacía el lado contrario a la ojiazul.

V: ¿Entonces por qué escondiste tu cara?. - dijo buscando la manera de ver la cara de la mayor.

J: porque quiero ver el mar, está muy bonito. - habló riendo.

V: a ver ya. - tomó la cara de la artista con su mano. - lo sabía. - soltó una carcajada. - te ves muy linda sonrojada. - dijo calmando su risa.

J: ya Val... - habló más apenada.

V: ok, ya. - se puso una mano en la boca para tapar un poco la sonrisa que aún tenía.

A la morena se le había ocurrido otra idea pero no sabía si sería bueno hacerlo, bueno... Le daría igual que el agua estaba fría.

J: hay que meternos al agua. - dijo de repente.

V¿QUÉ?, ¿Estás loca?. - la habia tomado totalmente desprevenida. - el agua está fría y ni siquiera tenemos ropa para eso, Juliana.

J: eso lo sé, pero no importa. - habló levantando sus hombros y luego sacó su chamarra y su camiseta. - traemos ropa interior... Al menos yo...

V: si estoy usando ropa interior, Juls. - dijo sabiendo lo que pensaba en ese momento y Juls liberó el aire que había retenido. - pero aún así, está fría el agua.

J: vamos, Val... Hay que hacer locuras algunas veces en la vida. - le sonrió, ya solo había quedado en ropa interior y Valentina no negó que verla de esa manera le causaba mucha complicación en alguna parte de su cuerpo.

V: está bien, pero tu primero. - Juliana sin pensarlo entró al agua.

J: ahgg... Está muy bien el agua. - dijo, pero en su cara se notaba que era todo lo contrario. - ahora ven tú. - Val notó como le castañeteaban los dientes.

V: estás loca. - habló resignandose. - esta no está siendo una muy buena cita. - hizo un puchero.

J: ven aquí y te lo recompenso. - dijo sonriendo.

La castaña lo pensó un poco pero al final se decidió por entrar, se dejó solo su ropa interior y se dirigió hacía el agua.

J: ves que no era tan difícil. - le sonrió.

V: no, claro que no. - habló con sarcasmo. - tengo frío.

J: ¿Te caliento?. - la abrazó.

V: Juliana... - soltó un pequeño gemido cuando la mayor empezó a darle pequeños besos en el cuello. - ¿Que haces?. - sonrió.

J: calentándote. - dijo aún en su cuello.

V: no de esa manera, tonta. - dijo riendo.

J: ah... - se separó de su cuello. - creí que... - dijo bromeando y la ojiazul la abrazó por el cuello.

V: te quiero... - habló ahora ella entre el cuello de la artista, pero sin hacer nada más. - mucho. - la morena soltó un suspiro, le encantaba que Valentina le dijera eso.

J: yo también te quiero, Val. - Val separó su cara del cuello de Juls y miró sus labios al igual que Juliana los de ella, acercaron más sus labios y los unieron en un beso casto y hermoso, mostrándose todo el amor que sentían la una por la otra.

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