V: ¡Wen!. - gritó por la emoción de ver a su amiga parada en la puerta de su casa.
W: ¡Vale!. - gritó al igual que Valentina.
V: que gusto verte. Pasa. - dijo dándole entrada a su casa. - ¿Cómo has estado?.
W: bien, ¿Y tu?.
V: bien. Ven vamos a la habitación. - Wen la siguió hasta la habitación. - ¿Que tal tu viaje?. - preguntó en el momento en que llegaron a la habitación.
W: increíble, Raúl es espectacular. - Raúl era el chico con el que había estado saliendo hace cuatro meses.
V: me alegra.
W: ¿Y tú?, ¿Cómo van las cosas con Juli?.
V: de maravilla, incluso más de lo que esperaba, te vas a sorprender con lo que te diré. - sonrió con nervios.
W: suelta la sopa. - dijo con ansias.
V: Juls me propuso matrimonio. - dió un gritito al final de la frase.
W: ¡¿Queeee?!. - habló sorprendida. - ¡No lo puedo creer!.
V: ni yo me lo creía. - rió.
W: me alegro mucho por ti, Vale. - se acercó a ella para abrazarla. - espero que me hagas dama de honor.
V: claro que sí. - dijo abrazándola fuertemente.
W: por cierto... ¿Dónde está Juliana?. - se separó del abrazo.
V: está en su estudio, quiere terminar rápido una pintura para poder dedicarse cien por ciento a los preparativos de nuestra boda.
W: que dedicada. - dijo bromeando. - se ve que quiere hacer que todo sea perfecto.
V: así es Juls. - dijo burlándose de ella.
J: amor... - se asomó por la puerta. - oh... ¡Wen!. - gritó feliz y sin pensarlo dos veces se lanzó a abrazarla.
W: parece que les hacía falta. - dijo riendo.
J: mucho. ¿Cómo has estado?.
W: bien. Ya me enteré que le propusiste matrimonio a mí amiga y no me pediste permiso. - Juliana hizo cara de sorprendida y apenada, eso causó que Val riera. - muy mal heee... Puntos menos, eso lo hablaremos Vale y yo luego, tal vez y se arrepiente de casarse contigo. - la castaña no paraba de reír, había extrañado a Wen esas tres semanas que se había ido.
J: ¿Si te invito a cenar me sumas puntos?.
W: depende.
J: haré lasaña, puedes preguntarle a Val que tal me queda y te dirá que de maravilla.
W: bien... Tres puntos más. - la morena dió un pequeño salto y dijo "yes", parecía una niña pequeña festejando.
V: mira como tienes pintura en la cara. - dijo señalándole la frente y la mejilla.
J: justo venía a eso, quería lavarme la cara. - dijo riendo. - ya terminé de pintar el cuadro.
V: ¿Enserio?, ¿Luego lo puedo ver?. - preguntó con ilusión.
J: claro, Val. - le sonrió y se dirigió al baño para lavarse la cara.
W: aah... - suspiró. - El amor te apendeja.
V: ¿Lo dices por experiencia?. - se burló.
W: yo no me casaré dentro de poco. - ¿A quien engañaba la castaña? Nunca podría ganarle a Wen en las burlas.
V: es que la amo. - dijo haciendo un puchero.
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W: deliciosa tu lasaña y todo, pero no te salvas del discurso protector de una amiga protectora.
J: ¿Quieres helado?. - preguntó tratando de cambiar de tema.
W: te acepto el helado, pero no te salvas. - misión fallida para la artista. Juliana se paró para ir por el helado.
J: ¿Tu también quieres, Val?. - dijo mostrándole el helado.
V: si, amor. - Juls les sirvió a ambas y de paso se sirvió un poco a sí misma.
W: a ver... Tienes que amarla, que es lo principal. - empezó con su discurso protector. - cuidarla y estar para ella en las buenas y en las malas, porque pocas personas se quedan en las malas, espero que tu seas de las pocas que se quedan. - la morena no dejaba de asentir a cada una de las cosas que Wen le decía. - porque si me entero que le rompiste el corazón... - tomó el tenedor que tenía a un lado y se lo mostró, causando que la artista abriera fuertemente sus ojos y la ojiazul tomó la mano de su amiga para tranquilizarla. - de verdad, Juli, te quiero mucho, pero Val es mí mejor amiga y no me gustaría verla sufrir.
J: a mí tampoco. Prometo no hacerle daño. - levantó su mano en señal de promesa.
W: bien... Estás advertida.
V: Wen... - dijo para que dejara de asustar a Juliana.
W: tranquila, Vale, solo le advierto lo que le puede pasar. - dejó el tenedor que hace tiempo había tomado. - así no tendrá la excusa de decir que no le advertí.
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Luego de que Wen se despidiera de ambas, subieron al estudio de Juls para que la castaña pudiera ver el cuadro que por fin había terminado de pintar, era el mismo que le había mostrado a Víctor y le había dicho que necesitaba retoque.
V: te quedó increíble, Juls. - dijo viendo con asombro aquella pintura.
J: me alegra que te guste, Val. - sonrió. - eres a la primera que se lo muestro completamente terminado, sabes que me encanta compartir esto contigo.
V: lo sé, me lo has dicho muchas veces. - aún observaba el cuadro sin poder creer lo increíble que le había quedado a la morena. - me sorprende lo buena que eres en esto. - dijo al ver como la artista observaba su rostro.
J: gracias...
V: por eso venias toda manchada de pintura. - rió. - te veías muy tierna. - dijo haciendo un puchero. La mayor sonrió y con su dedo tomó un poco de pintura dejando en su mejilla un poco.
J: ¿Me veo tierna?.
V: realmente si. - con rapidez llevó el dedo que tenía con pintura a la nariz de la castaña manchandola de pintura. - ¡Juls!. - Juliana rió.
J: tu también te ves tierna.
V: me mientes. - habló haciendo un puchero. - no soy tierna.
J: claro que lo eres y más aún cuando haces pucheros. - tomó más pintura y luego llevó su mano a la mejilla de la menor acariciandola y dejando huella en cada movimiento que daba, acercó su rostro al de la ojiazul y chocó su nariz con la de ella moviéndola de un lado a otro mancahandola aún más de pintura. - te amo. - pronunció y sin más acercó sus labios a los de su prometida para besarla lentamente, cuando estaba a punto de terminar con aquel beso tomó entre sus dientes el labio inferior de Valentina y lo jaló hacia ella.
V: yo también. - susurró cuando el beso terminó. Cada que Juls le decía esa palabra sentía que en su estómago había mariposas revoloteando, no importaba cuánto hubiese escuchado ya esa palabra salir de sus labios, seguía causando lo mismo en ella una y otra vez.
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