G: que escándalo es el que acabas de hacer, Juliana. - dijo negando con la cabeza.
J: lo lamento, Gabriel. Pero ese tipo le faltó al respeto a mí novia. - en el momento en que Juls dijo eso la menor se despegó de su abrazo y la miró directamente a la cara, pero como ella estaba volteando hacia otro lado no se percató de lo que había dicho y que la ojiazul la estaba viéndola un tanto confundida y feliz por como se refirió a ella.
G: no quiero que vuelva a suceder esto, ¿Entendiste, Juliana?.
J: no pasará de nuevo, siempre y cuando no vuelvan a dejar pasar a ese tipo a mis próximas exposiciones. - habló decidida a no dejar de defender a Valentina.
G: se tendrá cuidado con eso. - dijo retirándose.
V: lamento si te causé algún conflicto. - habló después de que Gabriel estuviera lo suficientemente alejado como para no escucharla. - te juro que no tenía idea de que él venía...
J: no, Val. Yo se perfectamente que tu no sabías que él vendría, jamás creería eso de ti. - la abrazó de nuevo, demostrándole todo el amor que sentía por ella. - yo lamento tanto que hayas tenido que pasar por eso, créeme que lo de menos ahora es si se molestó o no Gabriel. ¿Prefieres que ya nos vallamos? - preguntó acariciándole el cabello.
V: la verdad si, ¿Ya te puedes retirar?. - preguntó porque no quería que la mayor dejara su exposición por ella.
J: si, no te preocupes por eso, le diré a Gabriel que ya nos retiraremos. ¿Vamos?. - dijo y Val asintió.
Esperaron un momento a qué Gabriel se desocupara para poder hablar con el.
J: Gabriel. - dijo cuando él terminó de hablar con la señora. - ¿Crees que ya sea momento de irnos?.
G: claro, vete con cuidado. Lamento si reaccioné de mala manera hace un momento.
J: no te preocupes, te entiendo. Nos vemos. - habló para despedirse de él.
G: nos vemos.
J: vamos chicas. - tomó la mano de Valentina para dirigirse hacia el auto en el que había llegado a la exposición.
W: yo me iré en mí coche. - habló cuando salieron del lugar.
J: bien Wen, cuídate mucho. - se despidió de ella al igual que Valentina.
Cuando llegaron Juliana de inmediato le abrió la puerta del coche a la ojiazul.
V: gracias. - dijo sonriéndole y la artista subió a la parte del piloto. Habían estado en silencio durante el camino que llevaban, Valentina iba pensando en lo que pasaría si sus padres se enteraban que había estado saliendo con una chica, tenía miedo de lo que podría suceder y esperaba que a Lucho no se le ocurriera decirle a sus padres.
J: ¿Sigue en pie el ir a mí casa?. - dijo para romper el silencio.
V: ¿mmmh?. - volteó hacia ella pidiendo con la mirada que le volviera a repetir lo que dijo.
J: que... Que si sigue en pie el ir a mí casa. - habló con nervios, no sabía porque Val estaba tan distraída y le asustaba lo que podría estar pensando.
V: ah...
J: no tienes que ir si no quieres, todo está bien, Val. - pensó que le diría que no, así que decidió adelantar su respuesta.
V: Juls... Si voy, ya les avisé a mis padres que no estaría en casa. - dijo mostrándole una sonrisa sincera.
J: ok... Que bueno. - habló dándole también una sonrisa. - Val... Si estás preocupada por algo, cualquier cosa... puedes decírmelo. - estaba concentrada en el camino pero como pudo tomó la mano de la castaña.
V: no, estoy bien. - dijo tomando también la mano de la morena para darle confianza y que no creyera que le estaba mintiendo aún que lo estuviera haciendo. Pudo notar como en los labios de Juls se formó una pequeña sonrisa, le había creído a ella y en ese momento se sentía mal por mentirle, pero la verdad es que no la quería preocupar.
J: hemos llegado. - habló al estacionarse en frente de su casa, la menor la reconocía perfectamente por el día que llegaron por ella para ir a la playa. - déjame abrirte la puerta. - bajó del auto para llegar a la puerta de la ojiazul y abrirla para que ella saliera.
Entraron a la casa y Juliana le dijo que podía sentarse en la sala para que esperara a que ella le llevara un vaso de agua. Valentina observaba cada parte de ese lugar, delante del sillón en el que estaba había un gran televisor que era sostenido por una mesa y a los lados de este había un tocadiscos con vinilos y del otro lado un reproductor de DVD que también tenía sus discos, se notaba que el mueble estaba un poco antiguo. Volteó hacia su izquierda y había un buró con un florero en el que había rosas rojas, 'muy lindas' pensó Val tomando delicadamente con sus dedos los pétalos.
J: ¿Juzgando mí humilde hogar?. - dijo con los dos vasos con agua en sus manos. - aquí tienes. - habló pasándole un vaso con agua.
V: gracias. Para nada, no juzgaba, lo juro. - la mayor se sentó a su lado. - solo observaba sin juzgar, espero no te moleste. - dijo riendo.
J: no, yo hago lo mismo al ir a una casa desconocida. Mí mamá se enojaba un poco y me decía que no debía hacer eso. - habló sonriendo con nostalgia y la castaña lo notó.
V: ¿Tu mamá vive contigo?. - preguntó dudando.
J: no... - dijo sin más y la castaña ya tenía sus sospechar por la manera en que la artista había dicho sus palabras. - Ella murió hace algunos años. - habló agachando su cabeza.
V: l-lo lamento... Mucho. - susurró la última palabra. La morena levantó su cabeza y le mostró una sonrisa un poco triste.
J: han pasado ya algunos años, pero la ausencia aún sigue y no creo que alguna vez este sentimiento se valla. - dijo abrazando a la ojiazul aún estando las dos sentadas.
V: Juls... - habló con la voz entrecortada, le dolía verla de esa manera.
J: no sabes cuánto le agradezco al universo el haberte puesto en mí camino.
V: yo también le agradezco al universo, eres la persona más increíble que he visto en esta vida de mierda. - esas palabras le sacaron una sonrisa a Juls.
J: me hubiera gustado que se conocieran tu y ella... me hubiera gustado mostrarle a la persona que amo. - dijo separándose del abrazo para ver a Valentina a la cara. - te amo, Val. - habló tomando con su mano la mejilla de Val y acariciándola suavemente con su dedo pulgar. La castaña no podía articular ninguna palabra, estaba muy sorprendida.
V: te amo. - habló cómo pudo y sin pensarlo más se acercó para darle un beso en los labios, sus labios encajaban perfectamente y danzaban dulcemente demostrando en cada uno de los movimientos el amor que se habían declarado esa noche.
Al separarse Juliana tiró con sus dientes el labio inferior de la menor causando que soltara un pequeño gemido que llegó a causar estragos en la artista.
J: tengo algo que darte y algo que pedirte. - se paró. - ¿Puedes esperar aquí?, No tardaré, solo iré a la habitación.
V: claro, te espero. - dijo aún aturdida por el beso y viendo cómo la morena se dirigía a su habitación.
Al poco rato Juls regresó y Valentina se percató de una pequeña cajita que llevaba en sus manos.
J: tal vez no sea el momento de pedirte esto, pero la verdad estoy un poco cansada de esperar. - habló abriendo la cajita y sacando de ella dos pulseras que tenían marcadas en ellas el pacto. - ¿Quieres ser mí novia?. - preguntó con sus manos temblando por los nervios. Val le sonrió y se acercó a ella para tomar la pulsera y plantarle un gran beso en los labios.
V: si quiero ser tu novia. - dijo al separarse del beso. - ¿Me la pones?.
J: si. - agarró la pulsera y se la puso a la castaña.
Y este era el inicio de una gran noche y una relación que esperaban funcionara correctamente, había miedo por parte de las dos, tenían miedo de la reacción de los padres de la menor.
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