500 Margaritas

Capítulo 12

~15 DE NOVIEMBRE~

⚜️ JOYCE ⚜️

¿Conocéis esa sensación que uno siente cuando sabe que ha hecho algo, pero no recuerda el qué?

Pues así fue como me sentí al día siguiente de la fiesta de Halloween.

Mis padres y hermanos habían viajado a Seattle a casa de los Reened mientras que yo me había quedado para asistir a la fiesta de una de las hermandades de la universidad con Quim y Anna, incluso había pasado la noche en casa de ésta con Quim...

No en ese sentido de la palabra, claro. Aún nos estábamos conociendo como para llegar y acostarme con él a la primera de cambio, no señor, yo no soy así.

Después de aquella leve discusión en la que Quim se había tirado sobre nuestro coche, había mantenido una larga conversación telefónica con él y habíamos solucionado las cosas. Me había explicado el motivo de su reunión con Kimberly y yo lo había entendido perfectamente. Ambos eran capitanes de equipo y debían estar de acuerdo en ciertos temas relacionados con dichos equipos.

Así que después de su insistencia, había aceptado ir a la fiesta de Halloween con él para conocernos más. ¿Qué había de malo en ello? Si Byron puede rehacer su vida tan fácilmente, yo también lo haría.

-¿Me estás escuchando, Joy?

-¿Qué? Ay, perdón, Anna...

-Joy, no estás en este planeta... – Murmuró la chica mientras que yo me encogía de hombros. –Venga, cuéntame lo que te pasa.

-Nada, en serio. Solo ando un poco despistada...

-Hmm... ¿Segura? –Asentí antes de que mi móvil comenzara a sonar interrumpiendo a mi amiga.

-¿Cobby? –Pregunté al ver su nombre en la pantalla. ¿Para qué me estaría llamando él? ¡¿Le habría pasado algo a Summer o a Byron?!

-¡Hola, hermosa! ¿Cómo estás?

-Bien, bien. ¿Y tú? ¿Qué pasa? –Volví a preguntar con preocupación.

-Nada grave, tranquila. Al contrario, te llamaba para invitarte a mi fiesta de cumpleaños. –Suspiré aliviada bajo la atenta mirada de Anastasia. –Será el dieciocho de diciembre en mi casa.

-Ah, pues...

-No admito un no por respuesta, hermosa. Te espero con Summer en mi súper fiesta, ¿de acuerdo? ¡Ah! Y recuerda que es de disfraces.

-¿De disfraces? –Repetí frunciendo el ceño.

-Sí, puedes venir de lo que quieras. Por eso aviso con antelación, para que vayas pensando desde ya en que vas a ponerte. ¡Será divertido! Bueno, no te entretengo más.

-Gracias por la invitación, Cobby.

-¡De nada! Y nos vemos dentro de un mes. –Colgó sin ni siquiera darme tiempo a decirle que no podía darle aseguranza de que pudiera ir, pero qué iba a intentarlo al menos.

-¿Pasó algo? Tu cara al principio era todo un poema...

-No, no, pero sí que me había asusta... –Unos gritos provenientes del terreno de juego cortaron mi frase captando nuestra atención de inmediato.

-¡Se están peleando! –Gritó Anna a mi lado cuando, efectivamente, vimos como separaban a dos chicos del equipo de Quim dejándome totalmente sorprendida. ¿Pero qué había pasado?