Capítulo 39

174 17 1
                                    

⚜️ JOYCE ⚜️

-¿Quién es? –Pregunté tapándome con la sábana de su cama al darme cuenta de lo tenso que se habían puesto sus músculos.

Por mucho que mi mente pensara solamente en querer admirar su cuerpo desnudo, algo me decía que la situación en estos momentos no estaba para ello.

-¿Byron? –Insistí ante su prolongado silencio.

-E-es Tiffany... –Murmuró saliendo de su aturdimiento para responder la llamada. –¡Tiff! ¿Estás bien? ¡¿Qué pasa?! –Mi corazón se encogió un poquito al escucharlo tan preocupado. ¿Pero como no estarlo? Ella era la madre de su hijo...¿Qué? ¿Pero tú estás bien?Desde luego, toda la libido me había bajado de golpe. –¿Y por qué diablos me llamas a mí? ¡Pensé que te había pasado algo! –Miré a Byron tras haber alzado la voz de esa manera. ¿Para qué lo habría llamado? –No, dícelo a Monty. Para eso está, ¿sabes? Ese también es su trabajo... No, ahora debe estar todo cerrado. Además, ¿cómo quieres que llegue hasta tu casa? ¿Volando? ¿El chófer? Sabes que Samuel es humano y debe dormir igual que nosotros, ¿no?

Rodé los ojos sentándome en la cama para comenzar a buscar mi ropa.

Estaba segura de que Tiffany quería algo y Byron terminaría llevándoselo dijera lo que dijese. 

-¡Está bien, está bien! Pero no te pongas así, Tiff... Sí, sí, ya voy... –Colgó girándose hacia mí resoplando. –¿A dónde vas?

-Contigo. ¿Qué fue lo que te pidió? – Pregunté terminando de amarrarme los zapatos.

-Un batido de maracuyá, coco y avellanas. ¿Eso existe? –Me encogí de hombros sin saber que responderle. –Y unos nachos con queso, baicon y guacamole.

-¿Todo eso para ahora? –Asintió con la cabeza mientras se vestía.

-Y encima con exigencias... Dice que no puede ir el guardaespaldas porque yo soy el padre. ¡Haber que tiene que ver una cosa con la otra!

-Bueno, en parte tiene razón. Tú eres el padre del bebé y ese antojo se debe a él... –Murmuré buscando una sudadera en su armario.

Su cara no era de muchos amigos cuando me miró, pero en el fondo sabía que yo tenía razón.

⚜️⚜️⚜️

-Mejor te espero aquí...

-¿Qué? ¿Cómo vas a esperarme en la calle? Ni de coña. –Dijo tirando de mi brazo hacia la entrada del portal.

Le habíamos pedido al taxista que nos llevara al lugar más cercano que estuviera abierto a las dos de la madrugada a por los pedidos de Tiffany. Por lo que ahora, nos encontrábamos en el edificio de su casa.

No iba a negar que lo había dicho con la boca pequeña eso de esperar en la calle, pero prefería estar sola en medio de la noche que encontrarme otra vez con esa chica...

-¡Al fin! –Gritó Tiffany en cuanto tocamos la puerta de su casa. –Pensé que nunca ibas... –Su sonrisa se borró en cuanto sus ojos se encontraron con los míos.

-Buenas noches. –Dije por cortesía antes de que ella volviera a dirigirse a Byron.

-¿Quieres pasar?

-No, quiero volver a casa, Tiff. ¿Dónde está Montiabello? –La chica se apartó dejando ver al guardaespaldas apoyado en una columna del salón sin apartarnos la vista de encima.

500 MargaritasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora