Beautiful Star × Blaine Anderson

Capítulo 5: Bésame

Iba caminando con Kurt en los pasillos conversando sobre la nueva temporada de ropa, no sabía mucho sobre eso, pero me gustaba escucharlo hablar con entusiasmo sobre eso, según mi criterio, podía considerar que sabía vestirme bien e intentar mantenerme al tanto sobre las nuevas modas.

-Parece que esta temporada veremos muchos suéteres- Kurt asiente confirmando mi teoría, me encantan los suéteres.

Pero de la nada me sentí inquieta, y cómo no, si depronto aparece Karofsky y empuja a Kurt, haciendo que se estrelle en los casilleros de una forma estruendosa.

-Mira por dónde vas idiota- le digo a Dave, quien sólo me da una fea mirada- ¿Estás bien?

-Si, bien- dice en un suspiro asustado cuando suena la campana.

Nos tocaba ir al Club Glee, por lo que hicimos a un lado esa mala pasada y nos dirigimos a la sala, donde al entrar nos sentamos juntos.

-Muy bien chicos, vamos a empezar- anuncia el señor Schue-. Primero, démoles la bienvenida a Puckerman.

Todos aplaudimos por su inesperada llegada del reformatorio.

-Puck, espero que ahí te hayan enseñado a comportarte mejor- le dice el Señor Schuester.

-¿Bromea?, fueron vacaciones- ruedo los ojos-. Sólo rompía cráneos y hacía ejercicio todo el día.

-Ay qué joya, cómo pudieron dejarte ir- ironiza Quinn con un lápiz en mano.

-Y ahora, tambores Finn- ordena el Señor Schue.

Se escucha que Finn imita un tambor con su libro en las piernas.

-Porque tengo en mi mano nuestra competencia para las locales del próximo mes- anuncia con entusiasmo y nosotros gritamos por la competencia que se avecinaba.

-Primero: el coro de acapella de la escuela privada para varones de Westerville, los Silbadores de la Academia Dalton- iba a seguir hablando, pero Santana, como siempre, lo interrumpe.

-Oiga un segundo, se me acaban de ocurrir un montón de chistes gays- comenta mirando a Kurt y yo le saco el dedo del medio en su cara.

-Y el otro equipo, los Hipsters, un programa especial de la localidad de Warren, son personas mayores que buscan completar su enseñanza secundaria- dice quitándose sus gafas para leer.

-¿Eso es legal?- pregunta Rachel.

-¿Cómo vamos a competir con un grupo de abuelos adorables?- comenta Mercedes confundida.

-¿Es broma?, esos huesos frágiles, dale un buen golpe a esos ancianos y le romperás la pelvis- dice Puck riéndose.

-Recuerda que algún día todos seremos ancianos, tendrás huesos frágiles que podrían romperse con sólo un golpe- le digo riendo y me mira con una mueca de fastidio.

-Como esto funcionó la vez pasada con las locales, esta semana quiero que tengamos nuestro segundo torneo de chicas contra chicos- todos aplaudimos emocionados, es genial poder cantar lo que uno quiera.

-Ahora, dividanse en dos grupos y decidan qué canción van a cantar- me paro de mi lugar y me siento cerca de las chicas, Kurt se iba a sentar a mi lado.

-Kurt, una vez más; al grupo de los chicos- dice el señor Schuester a espaldas de nosotros.

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Después del Club, acompañaba a Kurt a que dejara sus cosas en el casillero, estábamos hablando sobre algunas canciones que teníamos en mente, cuando Dave Karofsky nuevamente lo vuelve a empujar fuerte. Este chico iba a escucharme, es suficiente, no puede molestar todo el tiempo a Kurt.