CAPÍTULO 19

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Mi hija.

***
EROS MATEUCCI

- ¿Vamos a trasladar aquí la discusión? - dice mi hermana cuando me ve entrar a casa.

Le dije a Chloe que me quedaría, pero ya he cumplido mi objetivo y no hay necesidad de dormir allí.

- Oh no, no vais a discutir aquí - dice Ander y señala a la niña.

- No voy a discutir - respondo - Pero si vuelvo a verte en mi oficina no seré yo quien te eche - la advierto.

- ¿Quién lo hará entonces? ¿la teniente Wilson? - dice antes de que pueda llegar a la cocina.

- Vaya, veo que alguien ha conocido a Chloe. - Dice Ander.

- Es una zorra - responde mi hermana y no puedo evitar girarme de golpe.

- Callate - la regaño y ella frunce el ceño.

- ¿Vas a venirme con esas después de que me haya insultado? - dice

- ¿Te ha insultado? - dice Ander

- Ha dicho la verdad, Bianca - digo

- ¿La defiendes?

- Ella no me ha tirado un puto vaso a la cabeza

- Ha sido sin querer - dice y yo suelto una carcajada amarga.

- Madura de un puta vez - le digo y un vaso se estrella en la pared, junto a mi.

Me giro y Ander la mira con la boca abierta mientras ella me desafía con la mirada.

- ¡Eres una Maldita loca! - camino hacia ella y mi amigo se interpone en medio.

- Eh, ha bebido, no sabe lo que hace

- Me importa una puta mierda - digo - Recoge tus cosas y vete de aquí - le digo a mi hermana y ella se queda pálida.

- No no no no - se acerca a mi con los ojos llorosos - Por favor, deja que me quede, juro que no voy a volver a hacer eso.

- ¿Cuántas veces tendré que oirte decir eso? - digo enfadado y ella se echa a llorar

- Lo siento, de verdad.

- Vete a dormir - le digo y ella se limpia las lágrimas antes de coger a la niña e irse a su habitación.

Camino a la cocina seguido de Ander, sacó un par de vasos, además de la botella de whisky y salimos a la terraza.

Sirvo ambos vasos y tomo uno de ellos de un trago.

- ¿Quieres acabar como ella? - dice Ander

- Yo se emborracharme, ella es una niñata consentida que cree que puede hacer lo que quiera, cuando quiera y como quiera solo por beberse unas cuantas copas de más.

- Tenemos que ayudarle - dice y yo río

- Si me hubieras dicho eso antes de que me lanzara ese vaso igual hubiese estado de acuerdo.

- No puedes ignorar el hecho de que sea tu hermana

- Claro que puedo - relleno mi vaso.

- La niña tiene 2 años - dice de la nada y yo frunzo el ceño.

- ¿A qué viene eso?

- A qué podría ser mi hija

- ¿Crees que Alessia es hija tuya?

- Si

- ¿En qué te basas?

- En las fechas

- Pregúntale - digo y él asiente

Mis Reglas©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora