EFÍMERO [2]

41.

Lady Deadman:

-Por favor, aguarda-él tomó mi mano, su mirada me suplicaba que me quedé. 

-Lo siento, Alex me espera-me solté de su agarre y me fui alejándome de él, a paso apresurado, fue entonces que llegué hasta Alex, él me miró con confusión mientras respiraba pesadamente, su mano en su pecho el cual subía y bajaba por haber corrido.

-¿No me digas que era Nolan Hoss? ¿Era él?-no me miraba, sino a Nolan. 

-Puede ser...

-¿Y no me llamaste para pedirle que se sacara una foto conmigo? ¿Sabes cuanto lo admiro? Hasta cree una cuenta de fans de él. 

-Luego te explico, Alex. Esa carrera provocó mi hambre más, y si no vamos terminaré comiendo tu oreja-regañé.

-Okey, okey. Mujer a veces me asustas-dijo mientras me seguía al restaurante-¿Pero lo conoces o no? 

-Sí.

-¿De dónde?

-De la escuela. 

-¿Me estás diciendo que estudiaste en la misma escuela que Nolan Hoss?-asentí y él comenzó a gritar y al instante con mi mano tape su boca.

-¿Quieres calmarte?-contesté susurrando, él habló, pero por mi mano no lo entendía, entonces aleje mi mano de su boca.

-¿Cómo pudiste ocultarme esta información? 

-No sabía que eras fan de él. 

-Y en la escuela dirigiste palabras con él, ¿verdad?

-A veces-tragué saliva, no quería hablar precisamente ahora del torpe-Solo comamos, estoy cansada y los pies me empiezan a doler. 

-Está bien, pero luego me cuentas todo a detalle. ¿Y por qué te sujetó de esa manera tu muñeca? ¿Acaso quería que te quedarás a su lado?

No le contesté y me senté para luego llamar al mozo.

- - -

Nolan Hoss - El torpe

Escribí en una servilleta. No podía dejar de pensar en él. Jamás creí volver a reencontrarme con él. 

-No me dejes por favor, quédate no te vayas, Nolan.

Suspiré al recordar nuestra despedida, lo mucho que lloré esa vez, lo que grite por última vez en El Mirador. Mi café humeaba en mi mesa donde estaba sentada, aún no iba al trabajo. 

Un mensaje me llegó de mi jefa.

<<Lady, ¿dónde estás? Estoy a punto de abrir la biblioteca. Digo librería.

Visto: ✔✔

Me paré y vi como Príncipe se estiraba para levantarse. 

-Hola, amigo peludo-vino hacia mí y se subió a mi regazo puso sus patas en mi pecho y comenzó a lamerme mi barbilla mientras yo lo acariciaba-Tu dueño está aquí, sí ni yo lo puedo creer.

Luego de eso me acerqué y tome el libro que tanto había querido leer. 

Otra noche para amar. 

Abrí y vi la primera hoja.

"Recuerdas esa vez que me seguiste, ese poema no está en el libro fui improvisado en ese instante, te engañé sí, y recién te lo confieso. No te enojes por favor.

Disfruta este libro tanto como yo, te deje marcado con Post-it mis partes favoritas y algunas notitas para ti que me inspiré en el momento. Que tengas una linda lectura.