HARRY
— Felicidades, estoy orgulloso de ambos, rompieron récords nunca antes visto en una revista — Papá nos abrazó con Mia, estoy demasiado feliz, superamos todas las expectativas en ventas con la edición llamada Mr. & Mrs. Thompson. La portada, ambos salimos demasiado bien vestidos, Mia sale con un maquillaje y una cabellera impresionantemente hermosa, y lo mejor de todo, se ve su panza de embarazo. Salgo de pie tras ella, con mi mano en su panza, Mia con su mano agarrando mi brazo, y la otra mano de ambos, entrelazadas, ambos mirando a la cámara. Amo esta foto, simplemente la amo. Gracias a esta edición, nuestra fortuna y contratos con marcas crecieron como la espuma, dejándonos dentro de los primeros 20 en la revista Forbes, siempre estaba dentro de los 50, pero jamás dentro de los primeros 20, por lo que también nos ofrecieron ser la portada en la siguiente edición de su revista. El caos fue tal en un momento con los camarógrafos, que tuve que contratar guardaespaldas las 24 horas del día, Mia tuvo que dejar de hacer vida normal por un tiempo, me da miedo que la pueda suceder algo embarazada.
— Prométeme que si no es mujer, serás feliz igual — mire de malas ganas a Mia.
— Será niña.
— Promételo Harry — pidió frustrada moviendo mis brazos, bufé molesto entornando mis ojos.
— Está bien, está bien, lo prometo — sonrió satisfecha — Pero será niña — me soltó enojada completamente indignada maldiciéndome dándose la vuelta entrando a la consulta de la ginecóloga.
Estoy demasiado nervioso, la ginecóloga hablaba y hablaba, pero para variar no estoy escuchando nada, solo estoy concentrado en la pantalla.
— ¿Quieren saber el sexo de su bebe?
— Si por favor doctora — le pedí nervioso acomodándome en el asiento, me miró sonriendo con gracia por mi reacción de incomodidad.
— Felicidades, serán padres de una niña — miré a Mia demasiado feliz, me puse de pie eufórico.
— ¡Lo sabia! — grité feliz agarrando el rostro de Mia, de sus ojos cayeron unas lágrimas de felicidad — Será igual a ti princesa, cumplirás tu sueño y será igual a ti — le di un beso brusco y rápido mientras Mia no podía dejar de sonreír con lágrimas rodando por sus mejillas.
Me excedí, como siempre, y al llegar Mia a casa le tenía nuestro piso lleno de globos rosados y un pastel rosado, me abrazó feliz y comenzó a llamar a todos a nuestro piso para darles la noticia de que será niña y vean todos la sorpresa que le preparé.— Por suerte es niña, te imaginas hubiese sido niño, ¿Qué hubiese hecho con todo esto? bueno ahora está normalizado de que el color no tiene género ¿O no? — estalló en risas abrazándome negando con su cabeza diciéndome en su gesto que su marido está completamente loco de la cabeza.
— ¿Qué quieres? — Mia me miró haciendo pucheros de forma tierna, ya tiene 28 semanas.
— Leche con vainilla — la quedé mirando fijo.
— Sabes que aquí no hay leche con vainilla — asintió de forma tierna — ¿Quieres que salga a esta hora a comprar saborizante de vainilla? — sonrío feliz.
— En serio saldrías a buscarme vainilla.
— ¿Qué? No, mira la hora que es, ya es pasado la media noche, no voy a encontrar en ningún lado saborizante de vainilla — chilló molesta.
— Harry estamos en la ciudad que nunca duerme, voy a morir sin la vainilla.
— No cuando dejemos este piso y nos cambiemos quizás dónde no podrán darte estos antojos — se arqueó hacia atrás agarrándose de mi fingiendo un desmayo — Dramática — se puso a reír haciendo pucheros.
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El Jefe Para Siempre Será Mío (3)
RomansLas películas de amor siempre tienen finales felices. ¿Pero qué sucede en la realidad después del "Fueron felices para siempre"? Esta es la tercera parte de El Jefe De Mi Prometido, en donde Harry seguirá intentando hacer junto a Mia, una historia...